Mi laberinto favorito

CAPÍTULO 23

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Después de haber escuchado eso de Seulgi, creí que Jimin estaba pensando las cosas y considerando dejarme pues sí, soy más virgen que ella. Salí y antes ya había llamado un taxi y lo iba a cancelar pero después de eso mejor salí en busca de él. Salí y me detuvo pero no podía quedarme más en ese lugar. Me dirigí a casa y me pondría a leer pero me duché y salí a ponerme la pijama, estaba escuchando música que me perdí en mi mundo hasta que escuche que se abrió la puerta, creí que eran las chicas por lo que lo ignoré y seguí preparándome para dormir, salí y baje por agua, no había nadie... extraño. Subí a mi habitación y escuche un rudo proveniente de mi pequeña librería así que me dirigí asustada y abrí la puerta sin pensarlo... él estaba ahí.

___: ¿Qué haces aquí?-confundida-

Jimin: Vine a buscar a mi bonita pero creí que no estabas y me tome la libertad de explorar tu cuarto-sonriendo nervioso-

___: Creí que eso de la educación aquí en Corea es un tema muy... cumplido, por así decirlo-viendo lo que tenía en sus manos- No puedes ver esto-quitándole el álbum-

Jimin: Quizá eso no pero a ti sí-tomando mi muñeca- ¿Por qué te has ido así? Me has preocupado-dijo jalando de mí para quedar en su regazo-

___: Por-porque... no podía seguir ahí escuchando todo lo que decía-viendo sus hermosos ojos-

Jimin: Te quiero, ¿Si sabías?-besa mi nariz-

___: Pues ella tiene razón... yo soy una simple contadora extranjera y tú y ella son...-me besa-

Jimin: No digas eso, serás una simple contadora extranjera pero eres lo mejor que me pudo haber pasado, eres increíble, me vuelves loco, me pones nervioso, me enseñas facetas que ni yo mismo me conocía... me has enseñado mucho, ella será mi primera vez pero tú serás mi "para siempre"-me besa-

Nos perdimos en un dulce beso, sus labios tan suaves y dulces. Nos separamos a falta de aire.

___: Te quiero, mi amor-sonrío sonrojada-

Jimin: Yo más, bonita-sonríe- Ahora, muéstrame esas fotos-

___: No, aún no eres apto para estas fotos-sonrió-

Jimin: ¿Por qué?-sonriendo divertido-

___: Porque recién comenzamos, y yo no he visto las tuyas-me levanto y me dirijo a guardar el álbum- además, es de mala educación tomar las cosas ajenas sin permiso

Jimin: Ahora resulta, doña modales-me abraza por detrás-

___: Sí, don sin modales-volteo y le doy una pequeña mordida a su labio-

Jimin: ¡Auch! Bonita-sus tripas se hacen escuchar-

___: ¿Tienes hambre, cariño?-sonriendo-

Jimin: Pues un poco, me vine tras mi novia y no pude quedarme a la pizza-haciendo mueca-

___: Ven, te prepararé algo mejor que una pizza-tomando su mano-

Bajamos a la cocina y encendimos la luz. Saqué leche, harina, huevos, y comencé a preparar una masa para hot-cakes. Antes, me até mi melena en un moño alto y me puse un mandil.

Jimin: ¿Te he dicho que te ves sexy así?-mordiendo su labio y pasando su mano por su cabello-

___: ¿Te he dicho que me encanta cuando haces exactamente eso?-muerdo mi labio-

Jimin: Bonita, cocina para mí por favor... después-suspira- arreglamos eso- se sienta en la barra-

___: De acuerdo, amor-sonríe- Pero, ven ayúdame-sonrió-

Se paro y le coloque un mandil. Comenzamos a batir la masa y en ocasiones el me embarraba la cara con la masa, mientras unos Hot-cakes se cocían en la sartén. Entre risas y juegos, terminamos y preparamos una malteada. Nos sentamos en la barra a comer.

Jimin: Mira, debes aprender a cocinar con más higiene-mordiendo su hot-cake-

___: Mira quién habla-sacándole la lengua-

Jimin: Compraremos de estos, pero de pareja y así nos veremos más lindos sucios-señalando el mandil-

___: Me parece una gran idea, mi amor-sonrió- Comamos

Estuvimos platicando hasta que de repente le tiré un poco de malteada en su ropa.

Jimin: ¡___! -Poniéndose de pie rápidamente-

___: Lo-lo sie- sien- to-estallando en carcajadas-

Jimin: Ahora veras-dijo corriendo tras de mí-

Enseguida reaccione y corrí hacía mi cuarto pero era más rápido que yo y llegando a mi cuarto, me cargo en sus brazos y me tiro en la cama. Comenzó hacerme cosquillas y yo trataba de zafarme pero de pronto duplico su fuerza y tomo con una mano mis brazos arriba de mi cabeza y se puso arriba de mí. Nos quedamos viendo, hasta que paramos de reír y el bajo su mirada a mis labios, y a mí por supuesto que también se me antojaban sus labios. Se acerco y me beso. Nos comenzamos a besar lentamente pero de pronto el beso se volvió más apasionado.