Una relación

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Seguían en el auto, Bruce analizaba lo que había pasado, tratando de concretar sus ideas, no cabía duda de que Clark en realidad era Superman y que en realidad se llama Kal-el.

-jaja jaja...jajajaha.

Era muy cómico pensar que Superman es Clark, sus personalidades eran casi iguales, solo que una era tímida y la otra decidida. Pero tiene sentido que nadie lo haya descubierto, tal vez a primera vista, pero tras intentar conocerlo uno de diría que Superman y Clark no son la misma persona.

Por su parte Clark no entendía porque Bruce se reía...y que se supone que le dirá? Y Bruce por lo menos mantendrá su secreto? Claro que borrarle la memoria seria divertido, pero no era correcto.

-Que es tan gracioso?

-Pensar que eres un hombre que trabaja de periodista y tener la mejor noticia sin poder publicarla...jaja.

-Si, bueno...no se lo digas a nadie, por favor.

Sus miradas se cruzaron unos segundos.

-Y que haras si divulgo quien eres en realidad?

-No creo que lo harías...cierto?

-Tienes razón, no lo haria; pero solo si bienes mas seguido, no debería tomarte mucho tiempo volar desde metrópolis.

Clark estaba muy confundido. ¿Que pasa por la mente del millonario? Pero debía meditar su respuesta...quería confiar en Bruce, pero considerando su reputación, pero tras aver lo conocido y tratado en persona. Caray, es todo un misterio. Entonces Clark contestó.

-Dime ¿A que vendría?

-Sólo a platicar si quieres. Y honestamente yo tengo mis dudas sobre tu anatomía.

Clark lo miró fijamente por unos segundos, no entendía la intención de Bruce. Pero como si este pudiera leerle la mente le contestó.

-Descuida, tampoco tienes que des colocarte, esta ciudad no te a recibido muy bien, ya sea como reportero o súper héroe, pero te aseguro que puedes estar tranquilo con migo.

Clark se relajó profundamente, y no sabía si porque le creé a Bruce, o si este es un hipnótista.

Bruce sacó una tarjeta y una pluma de su bolsillo y escribo al reverso de ésta.

-Llama cuando gustes venir, normalmente estoy desocupado en las mañanas.

Clark lo tomo con discreta emoción.

-¿Te importa si te paso el mio?

-solo dímelo, tengo una excelente memoria.

Tras despedirse, Bruce entro a su casa, siendo recibido por Alfred.

-Señor?

-Si Alfred?

-Señor no puedo evitar sospechar que usted sabía desde un principió quien era en realidad el señor Kent.

Bruce no le contesto, solo esbozo una sonrisa sarcástica.

Bruce avía sospechado de Clark desde la primera vez que lo conoció, pero en esta visita a Gótica le quedo muy claro tras lo de frío.

Así Clark, pasa todo el tiempo que podía con Bruce y cuando este estaba desocupado. Sorprendentemente Clark casi siempre estaba en las mañanas desayunando con Bruce.

Con el paso del tiempo su relación se hizo más real, Bruce descubrió que en realidad se la pasaba muy bien con la compañía de Superman.

Superman estaba muy feliz con Bruce, las cosas estaban bien, estaban yendo lentas, en las mejores oportunidades que tenían para estar juntos eran interrumpidas por cualquiera de los dos, por algún problema en las empresas Wayne, o porque avía que salvar el mundo.

Nunca te busquéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora