Mecanografía.

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  Acabo de tener este impulso de conseguir una maldita máquina de escribir y empezar a escribir poesía estúpida y versos inmorales hechos de amor, mujeres, besos, y especialmente sobre la que tiene el poder de destruirme, para convertirme miserable.
No hay mentira en su fuego, ella es pura magia; Ella es la única que no puedo tener y sobre la que más sueño. ¡Ella no me cree! Ella no cree en su poder, ella no se ve a sí misma con mis ojos, mis pobres ojos que la ven como el ser humano más hermoso, el cuerpo femenino más perfecto, una diosa; El umbral entre lo que es real y lo que se puede utilizar en la poesía.
Creo que estoy perdido, y no quiero volver a ponerme en pie. Lo único que sé es que cuando llegue el momento, no estará cerca, y estaré viviendo en un infierno auto condenado que planeé el momento exacto en que puse mis ojos sobre ella.
Creo que me perderé, y no hay nada que pueda hacer al respecto.  

Francisco Pazmiño.

Lo vívido. (Poemario) | Ganador Primer Puesto en Poesía #FAwards2k17Donde viven las historias. Descúbrelo ahora