Me habia liberado de la idea de que volverias. Estaba feliz, libre, tranquila hasta que quisiste abrazarme, llorabas como si un familiar se hubiera muerto, me pedias perdón como si el tiempo jamás hubiera pasado. Estabas ebrio.
Despues de tanto tiempo, despues de tantas cortadas, tantas noches de insomnio, tantos cigarros, tantas noches alcoholizada decidiste volver ahora, justo ahora. Pero aun asi, ¡aun asi! Me hice la fuerte. Preguntaras ¿Como? Pues yo también lo hago, no te respondí, nada, mientras tu seguias manchando mi hombro de lagrimas y mi corazón de mentiras.
Se que te ayude, se que te lleve hasta tu departamento, juro que lo se. Pero por más fuerte que me haga, no te dejaria tirado ahi, llorando, derramando tus falsas lagrimas, no lo haria porque aunque me cueste admitirlo aun... aun te quiero.