Poderes

4.3K 212 294
                                    


A pedido de los jóvenes héroes que han llegado hasta nuestra guía, comenzaremos por algo básico para toda buena historia de héroes, pero no por eso menos importante: los poderes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

A pedido de los jóvenes héroes que han llegado hasta nuestra guía, comenzaremos por algo básico para toda buena historia de héroes, pero no por eso menos importante: los poderes.

Como todos sabemos, con un gran poder viene una gran responsabilidad, y no está de más recordárselos, ya que ustedes, queridos lectores, serán los que decidirán si usar los consejos para hacer el bien y proteger a los indefensos como héroes, o para llevar destrucción a este mundo como villanos (si eligen este camino, tengan en cuenta que no dudaré ir tras de ustedes... sólo una pequeña advertencia).

Sin dar más vueltas, metámonos en el tema. El entrenamiento será arduo, y requerirá toda su concentración. ¿Están listos?


Empecemos por algo sencillo: ¿existe un límite para el poder?

Bueno, algo que se debe evitar en las historias del género es crear personajes que sean tan poderosos que nada pueda destruirlos, o que todo lo puedan. Esto puede llegar a crear dificultades en el argumento, impidiendo que la historia avance con normalidad y forzando al autor a buscar por sinuosos caminos una forma de solucionar un problema que él mismo creó.

Por otro lado, no está mal que un héroe o villano tenga más de un poder, siempre y cuando presente debilidades. Si un héroe no tiene un punto débil (físico, emocional, mental), las amenazas de los villanos se sienten vacías, no se siente el peligro que el autor intenta transmitir y por lo tanto la historia pierde algo de sentido, ya que, después de todo, conocemos su final.

Las debilidades también sirven para humanizar un poco a héroes (y, por qué no, a villanos) que a veces nos resultan tan similares a dioses, y ayuda a que el lector se identifique con ellos, entienda su punto de vista y sus motivaciones, así que son importantes. Pero hablaremos de ello más adelante, ¿les parece?

Todo esto me lleva a pensar en el siguiente punto: el desarrollo de los poderes.

Hay muchas maneras de obtener poderes (nacer con ellos, desarrollarlos por un cambio de condiciones, experimento científico, etc.), lo importante es aprender a controlarlos.

Con personajes que sólo tienen un poder el problema no es tan grave, ya que, en todo caso, esa única habilidad será la que será mejorando poco a poco (eso sí, despacio y sin irse a lo ridículo); pero cuando entramos al territorio de los personajes que tienen varios poderes, me he encontrado varias veces con un problema bastante serio: desarrollan poderes de la nada que sirven específicamente para la situación en la que está metido.

Tienes un personaje con superfuerza, que dispara láseres de sus manos, y, de repente nota que unos civiles están en peligro, así que, como todo héroe, sale corriendo hacia ellos y ¡oh, sorpresa!, resulta que también tenía supervelocidad y no se había dado cuenta. Este tipo de cosas desconciertan al lector, y hace que parezca que el autor se va inventando todo a medida que escribe, creando problemas para los cuales no tiene una solución y emparchándolos con toda clase de inventos.

Guía del HéroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora