One Kiss ♦ (Scicaac)

SUICIDE

Isaac

Salí de mi casa con los ojos llorosos, estaba arto de todo esto, cansado de soportar tanto, si alguien se atreve a decir que soy un cobarde que venga y se ponga en mi lugar, para ver si soporta un solo día viviendo está jodida rutina.

Cada que me despierto es sólo para recordar que mi madre y hermano estan muertos por culpa de un imbécil que conducía ebrio, que mi padre me maltrata constantemente y que mi novio, que decía amarme, me engañó además de que en más de una ocasión también me golpeó y abuso de mi; si eso no es tener una vida de mierda, no sé que lo sea.

Así que hoy decidí acabar con todo de una buena vez, subí corriendo las escaleras de un puente y me preparé para saltar desde el punto más alto, justo cuando estaba por lanzarme escuché una voz que me decía:-¡Hey no lo hagas!- Genial, ya me volví loco pense sin mirar de dónde provenía esa voz.

Scott

Iba de camino a mi casa después de mi entrenamiento de lacrosse cuando vi que alguien estaba saltando la malla del puente para lanzarse desde ahí mierda pensé y subí corriendo el puente sin saber qué iba a hacer con aquel chico.

-¡Hey, no lo hagas!- grité lo más fuerte que pude y vi como aquel chico se sobresaltaba y sacudía su cabeza como convenciendo se de lo que lo que había escuchado no era real.

Cuando llegué hasta donde él estaba pude ver que su cabello era rubio rizado y que parecía tener mi edad.

-¿Qué haces?- le dije intentando recuperar el aliento.

-¿Eh?- dijo sobre saltándose al notar mi presencia- Nada que te interese- dijo volteando a verme con lo que pude distinguir que sus ojos eran azules.

Me sobresalte un poco al sentir un escalofrío, ya que había algo en el que hizo que mi corazón latiera más rápido.

-¿Qué haces?- volví a repetir mi pregunta.

-Qué te importa- dijo con cierto enfado.

-Si te das cuenta de que matándote no vas a solucionar nada,¿verdad?.

- Tú no sabes lo que quiero solucionar con esto.

- Pues no, sólo sé que hay otras formas.

-A sí, dime cuales.

-Amm... Depende del problema, dime cual es el tuyo.

-Porque crees que le voy a contar mis problema a un extraño.

-Bueno, en eso tienes razón pero te propongo algo.

-¿Qué?- contestó enfadado.

-Baja de ahí y ven conmigo, si no logró convencerte para que no lo hagas sigues con lo tuyo y no te digo nada más.

-Ammm... está bien, sé que nadie me hará cambiar de opinión.

-Bueno- dije tendiendole mi mano para ayudarlo, una vez que estuvo junto a mí le pregunté :

-Y bien, ¿Por qué quieres hacer esto?.

-Simple, porque mi vida es una mierda.

-Oh... y porque dices eso.

-Porque... mi padre me golpea, mi nov... ex novio también lo hacía y mi madre y hermano murieron- al acabar de decir esto se puso a llorar.

-¿Como te llamas?- pregunte sin saber qué más decir.

-I-Isaac- contesto con la voz entrecortada.

- Bien Isaac, yo me llamo Scott y se que aunque esto parece la solución más fácil no lo es.

-¿Porque no?.

- Porque la muerte no te pasa a ti, le pasa a todos los que te rodean.

- Pero ¿si no le importó a nadie?

- Estoy seguro que no es así.

-¿Cómo puedes estar tan seguro?.

- Sólo lo sé -después de decir eso algo se apoderó de mí y besé a Isaac en los labios ! SÍ, LO BESE! al principio se sorprendió pero luego me correspondió el beso tomándome por la nuca, nos separamos por la falta de aire y al ver que se sonrojaba sentí vergüenza y le dije:

- Lo siento, te acabo de conocer... no debí- Isaac me interrumpió posando sus labios en los míos, yo le seguí el beso, era un beso lleno de emociones, lleno de amor,nos seguimos besando por un buen rato, de un momento a otro Isaac mordió mi labio inferior como pidiendo permiso para entrar y yo se lo concedí, nuestras lenguas chocaron y se entrelazaron, seguimos así por n largo tiempo hasta que de nuevo nos falto el aire.

-Gracias- dijo Isaac tratando de recuperar el aliento.

-¿Porque?-pregunte.

-Por ser mi ancla.

-Te dije que te haría encontrar un motivo.

Le tendi la mano para que se levantara y bajamos el puente tomados de la mano con una sonrisa nuestro rostro.

Ahora él tenía un ancla y esa ancla era yo.