Bienvenido a mi mente

-El dulce recuerdo-

Hoy me puse a revisar conversaciones, ¿Las recuerdas? Aquellos días en que nos quedábamos hasta las seis de la mañana solo para hablar estupideces, reírnos o hablar de la vida y reconfortarnos él uno al otro. Aquellas noches en que él único motivo por él cual no rompía en lágrimas era saber que estabas allí y te creí, en verdad lo hice. Nunca dude de tu palabra, nunca te hice a un lado o dije que me lastimabas, porque, no era así. Pero, desde hace mucho, en un fatídico día, algo cambió, yo cambie, tu cambiaste. Mas bien, tu me cambiaste por alguien mas. Uno, dos, ¿quizas hasta tres?. La verdad no lo se ni me interesa mucho, solo me duele. Hoy en especial pediste ayuda, no a mi exactamente pero lo hiciste y sentí, aunque sea de manera débil que te podía ayudar....Que equivocado estaba. Solo me di cuenta de las cosas. No te sirvo mas, ni para consuelo o estupideces. Ya no soy nada para ti. Pero tu aun eres algo para mi, algo que en verdad necesitó. Ese algo que hasta hoy mantenía mis lágrimas a raya, pero, ahora nada las detiene, de echo, me es complicado escribir esto, con lágrimas en mi ojos supongo que es entendible, ¿no es así?. Bueno, no hay nada más que decir, solo que, en verdad espero lo mejor en tu vida y desde él fondo de mi ser que te ira bien en todo, al igual que a mi...supongo. Ahora solo atesorare aquellos dulces recuerdos, para escapar de la amarga realidad.