Realmente no sé cómo empezar, no había hecho esto antes...
Hay muchas cosas que quiero explicar en esta carta. No diré que no quiero alargarme, por que quiero hacerlo, quisiera que te dieras cuenta de que tan especial es esto, mira que yo no escribo algo así a cualquiera.
Hace un tiempo me abordó la curiosidad, y te pregunté si te había gustado alguien antes y cómo sentiste el enamoramiento. Sí, fue ese día en el jardín de mi casa; tu gatito Yoon te siguió y no hizo más que sentarse en tu regazo y de vez en cuando jugar con tus manos. Volviendo al tema... tú te pusiste un poco nervioso y asentiste a la primera pregunta con lentitud. Luego me miraste con una pequeña sonrisa y comenzaste una conversación que de inmediato llamaste "los síntomas del amor", como si fueses un poeta.
Cosquilleos. Ilusión. Celos. Felicidad, emoción. Y el conocido corazón roto.
Y creo que ahora tengo esos síntomas también.
Eso es exactamente lo que quiero decir. Tú me gustas, Hannie.
¿Has oído eso de las mariposas en el estómago? Es exactamente lo que siento. Cuando ríes, cuando me hablas, incluso con sólo mirarme causas ese placentero cosquilleo en mi estómago. Ahora creo en ello.
He tenido ilusiones, ¿recuerdas cuando me entretuve hablando contigo y llegué tarde a la cafetería? Te sentiste tan culpable que lo único que pudiste hacer fue tomar mi mano y correr juntos hacia el lugar. Que por suerte era dos calles abajo, fue muy fácil llegar. Te quedaste un momento y cuando terminó mi turno volviste, y fuimos juntos a casa. Ese día fue maravilloso, ¿no lo crees? Estuve todo el día pensando en como se sentía tu mano junto a la mía... ¡encajaban perfectamente!
También siento celos cuando hablas con alguien más... SeungCheol, JiSoo, o SoonYoung. Comprendo que son tus mejores amigos, y, tal vez ellos llegaron primero... pero no puedo evitarlo. En cada salida a la que me invitabas estaban ellos, todo el rato se pasaban muy cerca de tí, sobre todo SeungCheol... ¡Estuvo a punto de besarte!
Yo lo sé, noté sus intenciones. Por pura suerte los salvó el tono de llamada de tu móvil, él se sobresaltó y se apartó.
Hannie, eres realmente inocente cuando te lo propones.
Cuando teníamos planeada al menos una tarde de películas me sentía ansioso y feliz. ¿qué veremos hoy? ¿debería comenzar a preparar las palomitas? ¿le gustará estar cerca de mí en el sofá frente al televisor? Con sólo imaginar nuestros hombros rozar el uno con el otro me sacaba mil sonrojos y varias burlas leves de mamá.
Incluso sentí mi corazón roto, por que parecía que alguien más había robado el tuyo, o por que te sentías tan triste cuando las cosas no iban bien. Recuerdo que JungAh tuvo el accidente de las escaleras, casi llorabas, y por un momento fue gracioso, por que era un poco exagerado. Pero un par de días después me dijiste que apenas podrías pagar los tratamientos de tu hermana junto a la renta de la casa. Me puse en tu lugar. Con el empleo que tenías ganabas bien, pero eso era muy costoso. Creo que también me dieron ganas de llorar a mí.
Lo maravilloso de eso fue cuando mamá y papá dejaron la casa para mí. Te ofrecí compartir el hogar y de no haber sido por JungAh no hubieses aceptado. Aunque de igual manera, sólo aceptaste por un tiempo, en lo que ella sanaba completamente. Eres un niño muy testarudo, Yoon JeongHan.
Normalmente lo hubiera negado, pero eso me ayudó a enamorarme aún más de tí.
MongMong también se encariñó conmigo en ese tiempo. ¿Sabes acaso qué tan adorables eran tus pucheros cuando el gato te ignoraba? Hacías lo que fuera por obtener al menos un poco de su atención y terminabas falsamente molesto por que él prefería sentarse sobre mis piernas, o sobre mis libros cuando hacía mi tarea.
¡Oh! ¿Cuánto tiempo me burlé de tí por ser un hermano celoso y sobreprotector? Esa vez que JungAh llevó a un compañero a la casa. Sólo iban a estudiar, pero como siempre exageraste las cosas y tomaste un momento de la elaboración de su preciado proyecto para explicarle que no conseguiría fácilmente tu permiso para salir con la bebé de la casa.
Tu hermana prácticamente te sacó arrastrando de la sala de estar a la cocina y me pidió que te mantuviera alejado de ambos hasta la cena. Por que también lo había convencido de quedarse a la cena.
Eres todo un tonto, Han, y así me enamoré de tí.
Todo lo que vivimos elevó mi expectativa. Tal vez si fuéramos una pareja actuarías celoso. Tal vez si estuviera triste intentarías consolarme. Tal vez si tomara una decisión, me apoyarías.
Tal vez si me hubiese confesado de la manera apropiada, podría haber una mayor probabilidad de que aceptes mis sentimientos.
Antes de terminar... quisiera disculparme por lo que pasó el viernes. Quería evitar decir algo al respecto, pero no pude soportarlo, ni siquiera era mi casa. Sé que no debí comportarme de esa manera frente a ellos. Y sé que tampoco estuvo bien haberte golpeado.
Me removí en el sofá. Acabábamos de cenar y ahora sólo conversábamos de lo que sea. A mi lado estaba JiSoo, y en el mismo sillón, SoonYoung y MinGyu.
SeungCheol ganó el lugar a tu lado.
No hablé mucho, estaba más concentrado en mirarlos a ambos. Él abrazaba tu cintura y se apegaba más a tí. En primer lugar, ¡era un sofá enorme! Podrían caber tres personas, pero el niño prefería estar sobre tí.
De un momento a otro usó ambos brazos para aprisionarte y luego dejó un beso cerca de tus labios. ¡un beso!
Miré hacia el resto de los invitados y JiSoo me dirigió sólo una sonrisa incómoda. Volví la mirada al suelo hasta que escuché tu risa.
"Déjalo".
Murmuré, y estoy seguro de que nadie lo escuchó bien. Por fin detuvieron su juego de cosquillas y besos totalmente intencionales de su parte para mirarme.
"Yo...". Me levanté de mi asiento y miré a los otros tres con un gesto de disculpa, no quería mirarlos a ustedes. "Tengo que irme, mañana iré a trabajar temprano... aún así, gracias por la invitación".
Les dirigí una reverencia antes de comenzar a caminar hacia la salida con mis manos en los bolsillos. Estaría bien si me marchaba, podría evitar humillarme aún más.
"¿JiHoon?" Me detuvo justo en el pasillo que conducía a la puerta. "Vamos juntos".
Negué un par de veces con mi cabeza.
"Está bien, puedes quedarte". Sujeté el pomo de la puerta con mi diestra. "Quédate con tu novio SeungCheol si quieres".
Hubo un momento en el que el silencio se volvió incómodo, así que sólo abrí la puerta.
"¿Acaso estás celoso, JiHoon?"
"No". Si le dirigía la mirada, estaba seguro de que se daría cuenta de mi nerviosismo, o de que quería llorar. "¿p-por qué estaría celoso?"
Comencé a caminar de nuevo, saliendo al pasillo. Volvería al ascensor y estaría bien.
"¡Lee JiHoon, detente!"
Caminé un poco más rápido. ¿por qué se tomó la molestia de seguirme? Suspiré y presioné el botón para llamar al ascensor, varias veces a decir verdad.
Aún así llegó hacia mí y me giró para que mirara su rostro. Se veía molesto.
Pero hey, no soy el culpable, pudo quedarse.
"¿Qué es lo que te pasa últimamente, mhm?" Seguía sosteniendo mi muñeca, y estaba muy cerca de mí. Demasiado. "Estás actuando como un tonto, ¿lo sabes? No sólo hoy, otros días también y-"
No pude dejar que terminara. Levanté mi mano libre y le pegué. Sólo un golpe seco en su mejilla.
Justo en ese momento se abrió la puerta del ascensor. Entré y presioné el botón del primer piso, igualmente varias veces hasta que la puerta se cerró.
Medité mucho durante la noche, y la noche siguiente. Estoy seguro de que no querrás verme. Pero está bien, fue mi culpa.
Espero poder hablar pronto...
Con cariño, JiHoon.
