ENAJENACIÓN

Estocolmo

El chico de bellos ojos y labios deseables se hallaba escuchando como su secuestrador le gritaba al aparato móvil que sostenía a un costado de su oreja.
El chico era alto, de piel tostada, poseía unos labios gruesos y ojos rasgados, haciéndole ver muy atractivo a vista del contrarió.

Era increíble cómo toda su vida cambió en unos instantes, en un momento estaba conversando con sus pequeños amigos sobre que harían el fin de semana, a que discoteca asistirían, quien sería el amigo designado para encargarse de todos, y de repente ya se hallaba en esa habitación de paredes rosa palo y blanco, con peluches sumamente tiernos, esposado a esa cama y amordazado.
Pero era mucho más sorprendente que él, Kim SeokJin, se haya enamorado de ese hombre tan frío y a la vez tan dulce con él, "Monnie" como escuchaba que le llamaba el otro chico con cara de caballo, que curiosamente era la única persona que entraba a esa habitación.

Había perdido la noción del tiempo, no sabía cuánto tiempo estaba encerrado en ese lugar, pero al juzgar de las veces que le daban de comer, pudo deducir que ha estado ahí por lo menos tres meses.
Tres meses, solo eso había bastado para enamorarse de ese hombre, y es que para Jin era muy extraño recibir cariño debido a la temprana muerte de sus padres, y que alguien más que no fueran sus amigos le diga que siempre estará con él, que lo ama demasiado y que lo desea con todo su alma, fue suficiente para sentirse amado.

Y no se equivocaba, Namjoon lo amaba con locura, tanta que fue capaz de secuestrarlo en una fría noche de invierno.
Lo tenía todo listo, en muy poco tiempo tendría a el chico de sus sueños entre sus brazos, solo para él, no podía permitir que un ser tan hermoso sufriera las consecuencias de un mundo tan detestable.

Diviso a lo lejos a su amado, caminando tan despreocupado de la vida. En el momento en que lo vio a una cierta distancia, mojo el trapo con cloroformo, lo guardo en el bolsillo de su chaqueta y camino hacia su encuentro. Justo cuando estuvo lo suficientemente cerca, saco su mano, sosteniéndolo el trapo e hizo presión en su nariz para que aspirara ese olor, sintió como su tierno pequeño se desplomaba entre sus brazos. En ese instante la camioneta conducida por Hoseok se detuvo a su lado, abrió la puerta y entró con su preciado ángel para poder crear una nueva vida junto a él.

-¿Bebé?–Escuchó como lo llamaba e inmediatemente volteo– Princesa, perdón si mi conversación te aturdió, pero la gente es muy estúpida a veces.–Namjoon observó como su pequeño seguía dándole la espalda, no volteaba a verlo- ¿Cariño?

-¿Cuál es tu nombre?–Pregunto Jin sin moverse de su posición- Dices que me amas, pero ni siquiera sé tu nombre, no se cual es tu color favorito, qué época del año prefieres–suspiro cansado–Dices saber todo de mi, pero yo no sé nada de ti, absolutamente nada.

-¿Quieres saber todo de mi?¿Dices que... Realmente estás interesado en conocerme?– El moreno sonrió levemente y camino lentamente hasta acercarse a él y sentarse a su lado en la cama.

-Si, quiero conocerte–Volteo el de cabellos castaños levemente para poder verlo- Siento que quiero amarte-hizo una mueca- Pero eso ¿Es raro, no? No debería enamorarme de ti, se supone que me estás alejando de mi libertad, me tienes encerrado aqui sin poder comunicarme con nadie, aunque yo realmente no lo siento así, en verdad siento que me amas y me has hecho un favor, sacándome de esa vida tan monótona, estoy muy agradecido contigo.

-Mi bebé–Tomo sus mejillas y las acarició con cariño- Yo te amo y daría mi vida por tí, te amo, me tienes loco por ti, solo mírame–Rio sin ganas- Yo no sé que sería de mí sin ti–Se acercó y beso sus labios- Mi nombre es Kim Namjoon, tengo 23 años, mi color, mi época y mi lugar favorito eres tú y solamente tú, tú lo eres todo para mi, te amo tanto.

–C-creo que... Yo también te amo-Mordio su labio inferior con nerviosismo.

Nam observo como su hermoso ángel mordía su labio y se preguntó como alguien podría ser tan tierno y erótico a la vez.
Se acercó a su cuello y empezó a dejar pequeños besos susurrando un leve "Déjame hacerte mío" seguido de un jadeo y un asentimiento de parte de Jin.