"Dos de agosto."

- Capítulo Único. -

Se vio de nuevo de unos diez años, apurado cómo en antaño aunque de igual forma sin razón.

Su madre ya no estaba viva y su padre en su oficina, seguro no tenía cómo recordar que el día en que nació su primogénito, era hoy.

Más sin dudar, él creía que este año no sería cómo el anterior pues esperaba aunque sea una felicitación.

El timbre de su teléfono lo sacó de su cavilaciones, el nombre de su hermano le aceleró el corazón.

-Happy Birthday Bro. - le felicitan desde el otro lado de la línea y ya para Kagami el día lo valió. -No podré estar contigo hoy pero el fin de semana, cuando llegue Álex sin duda iré a quedarme con ustedes.

El pelirrojo sonrió pues, cómo en América, estarían los tres juntos viendo Space Jam y nada de Cujo.

-Alguien quiere saludarte. - menciona su hermano antes de siquiera dejarlo indagar el quién.

-Cejas-chin. - la voz  monocorde de Murasakibara lo sorprende pues nunca creyó recibir algo de él. -Pasa un buen día, tal vez luego pueda hacerte un pastel sin nadie estorbando.

-Uhm, ¿si? - respondió con duda causando un silencio desde el otro lado de la línea. -¿Murasakibara?

-Creo que lo mataste Bro. - le respondió con un deje de envidia en la voz el pelinegro. -Supongo que no esperaba llegar tan lejos.

-No te entiendo Tatsuya. - y el timbre sonó avisando visitas. -Tengo que irme, alguien habla.

Y al despedirse, con emoción avanzó hasta la puerta para sólo encontrar un enorme tigre de felpa sentado frente a él.

-¡Sorpresa! - el grito de todo el Seirin le hizo sonreír luminoso. -¡Feliz cumpleaños Kagami!

-Chicos, no se hubieran molestado. - agradeció a sus senpais y su entrenadora, quien puso al peliceleste frente a ella.

-Kuroko-kun fue el que planeó todo esto. - y el pequeño fue estrechado en un abrazo de ensueño.

-El tigre también esta fantástico. - y los presentes se miraron inquietos pues ese regalo no era de ellos.

-Midorima-kun y Takao-kun lo trajeron en su carreta. - una pequeña mueca apareció en los labios del chico fantasma. -Aquí esta la tarjeta.

Kagami la miró notando la caligrafía perfecta de cuál futuro galeno, más también supo que Midorima hasta en su escribir era una contradicción pues, primero le deseaba buen día y luego que si quería se deshiciera de su buena suerte botando el presente.

Sonrió pues ya quería saber que más sorpresas le traería el día de su nacimiento.

.

-Entonces, Kise quieres decirle algo a tus seguidores para concluir. - la voz del locutor se escuchaba animada aunque no más de lo que el rubio a su lado estaba.

-Más que a mis seguidores, este es un mensaje para uno de mis nuevos amigos. - el silencio se dejó escuchar en la cabina para luego ser roto por la estruendosa voz del modelo que todos ya conocían. -¡Feliz cumpleaños Kagamicchi! Pronto iré a visitarte y podemos jugar un one vs one.

Las palabras que salían de la radio hicieron sonreír aún más al cumpleañero y ofuscar a la vez a sus antiguos compañeros de Teiko.

-Que genial, no sabía que entrevistarían a Kise en la radio. - exclamó Kagami a los presentes, quienes habían querido animar la reunión y al encender la radio se dieron cuenta que en el programa se encontraba el as de Kaijou.

-Si, yo lo olvide. - mencionó cómo si nada la sombra de Seirin ocultando su obvia villanía.

.

Cuando sus amigos partieron después de ayudar a meter el enorme tigre a su departamento, el timbre sonó de nuevo dejando ver a un hombre trajeado sacando de su saco una caja negra que fue dejada en sus manos.

-Eso fue raro. - mencionó el pelirrojo cuando el hombre se había marchado. -Es de Akashi.

Y así era, pues con fina letra impresa la tarjeta le deseaba un nuevo año lleno de dicha, de sueños realizados y aún más belleza.

Se sonrojo ante lo último pero se olvidó de ello al ver la tarjeta dorada que en el Maji Burguer le daba comida gratis hasta su siguiente natalicio.

Sin dudarlo, se cambio para ir a estrenar su membresía dorada anotando mentalmente agradecer luego al emperador por el regalo.

.

-¿Ahomine? - llamó al moreno que indeciso daba vueltas en su sitio fuera del edificio donde vivía. -¿Qué haces aquí?

Y Aomine quiso decirle que era muy obvio a lo que había ido pero era difícil, con semejante ángel frente a él.

-¿Quería que jugáramos a un one vs one? - se encogió de hombros mostrándose un tanto incómodo y eso a Kagami le pareció prefecto al ver que incluso había traído su balón. -¿A donde ibas?

-Al Maji pero puede ser luego. - y de nuevo el moreno se había quedado prendado por ese gesto. -Akashi me dio una tarjeta dorada, puedo invitarte si me das pelea.

El moreno se carcajeo caminando a lado del cumpleañero que se quejaba por su ruidosa risa.

Sin dudarlo y al saber que sería el último en desearle al tigre un feliz cumpleaños decidió jugarse el todo por el todo, lo abrazo atrayendolo para estampar sus labios en las mejillas que de carmín se colorearon ante el contacto.

-Feliz cumpleaños Bakagami. - le sonrió desviando luego la mirada de ese que lo traía enamorado. -Era a esto a lo que vine en verdad.

Y Kagami se vio de nuevo a los diez con la sonrisa hasta las orejas al descubrir que su madre le había preparado un regalo más antes de partir.

Sabía que ya no estaría solo de nuevo cada dos de agosto.

.

.

.

Un escrito relámpago para el cumpleaños del tigre amado por todos. :)