Como aquellos desastres naturales,
llegaste ami vida,
sin pensarlo, sin planearlo, sin avisarlo. Arrancando de raíz todo aquello que creí que estaba enterrado.
Fuiste sacando cada parte de mi, desnudando aquello que nadie más pudo hacer,
te di mi alma y todo sin pensarlo en lo más mínimo y absoluto.
No me arrepiento, sos la mitad del desastre que me faltaba.
Mi desastre favorito.