¿Sucidarse o morir de amor?.

Capitulo 1.

Quería divertirme un rato, reírme de su cara de incomprensión,  hablo de esa psicóloga,  amaba hacerla enojar sentarme las dos horas frente a ella y sonreír y reír histéricamente.

-Julieta -me miró directo a los ojos ya bastante fastidiada, intentado hacer la voz más dulce posible-

-solté una carcajada sarcástica-

-Tus brazos. -miro su reloj-

-Sonreí sin intenciones de responder-

-ella volvió a mirar su reloj- Son las 5, tú hora término. no puedes seguir así,  tú vienes acá para hablar conmigo, inténtalo,  se que es difícil,  pero para mi también lo es, adiós,  cuídate Julieta, ¡Se feliz! -me grito al darse cuenta de que di un gran portazo-

Salí del establecimiento médico. Encontraba una estupidez mandarme acá,  ¡por favor! , no estoy loca.

Era sábado y veía como las personas hacían una fila gigante para un lugar de Comida rápida,  ¡que asco? -pense- En cuanto vi a una niña obesa... no se que decia con obesa, si yo también lo era. -reí para mis adentros y volví a fijarme en la niña- llevaba un helado, una bebida y una hamburguesa,  no sé como sostenía todo eso, se veía feliz comiendo, pero noto como miraba la comida con deseo y soltó la mano de su mamá y corrió hacia mi-

-¿Quieres? -me tendió su hamburguesa todavía intacta-

-No como,  lo siento.  -Sonreí y vi como la mamá se acercaba con la intención de darle un sermón,  hasta que me vio-

-¿Se conocen?  -mi miro de arriba a abajo y vio como tenía el pelo alborotado y sin peinar, de seguro no le gustaron en lo absoluto mis pantalones rasgados, y creyó que estaba loca por ocupar poleron con ese calor, ¡espera! -le grite a mi cabeza- no seas tan paranoica.

-No, ella se acercó y me ofreció.  -Sonreí- soy Julieta,  ¿tú?  -baje a la estatura de la niña-

-Camile -acaricio su largo cabello negro hecho una coelta- ¿mamá por que ella dijo que no comía?  -miro a los ojos inocentemente a su madre-

-su madre miro el centro médico y me miró a mi con una cara de dolor- hija, dale tu hamburguesa y tu bebida,  ¿quieres que te compremos algo? 

-La mire sabiendo que sabía lo que me sucedía- no, muchas gracias  -Sonreí- se me hace tarde, espero verlas algún día, cuídate Camile. - acomode mi mochila en mis hombros y camine ligeramente dejándolas atrás-.

segunda parte.

Entre a esa librería que tanto amaba, estaba vacía como siempre, salude alegre a Gloria, la señora que vendía ahí.

-¡Julieta! -me hizo señas con la mano-

-Corrí hacia donde estaba y rodee su mesón para darle un abrazo- Gloria -rei-

-¿Cómo estás? -me ofreció una silla-

-escuchamos la campana antigua de cuando entraba alguien, nos miramos sorprendidas y soltamos un risita-

-encargate un momento por favor, prepararé té,  ¿quieres? -se levantó y camino hacia una puerta que daba a su casa.

-no podía resistirme a su té con miel, así que acepte con gusto y me acerqué a la persona que había entrado-

-Hola -digo algo nervioso ya que no se me daba bien hablar con desconocidos- tu estas a cargo?? -hablo tartamudeando un poco y evitando todo contacto visual-

-Sí -sonrio y acomodo unos libros desordenados- buscas algo en especial -acá era el único lugar donde podía conversar con las personas sin complejos, me sentía a gusto acá,  ayudando con los libros, aconsejando, vendiendo, era hermoso, aunque no era muy habitual tener gente acá,  pero todos quedaban enamorados de esta librería y no podían evitar comprar algo...

-Este..... Busco... Busco un libro... Que... -me pongo cada vez más y más nervioso al escucharte hablar tan segura y trato de mirar en cualquier direccion en la que no estes, pero sin evitarlo hago contacto visual por un segundo y me desvio aun mas nervioso-

-¿Quieres algún libro sobre Fútbol?  A los hombres les gusta eso, creo que tengo -camino unos pasos y comienzo a buscar con la mirada en la estantería libro por libro-

-No!! -grito rotundo y seguro pero en ese mismo instante me pongo nervioso de nuevo por haber hablado de esa forma- o... Odi.... Yo odio el futbol -hablo  muy apenado y nervioso aún-

-No grites, odio eso, ¿que quieres? -digo cortante pensando que sólo querías burlarte de mi- ¿Quieres un libro o venir a molestar?, si quieres un libro te ayudare a buscarlo, si no vete.

-No... -hablo aun mas apenado por el reto- no... Yo... Tambien amo los libros, soy nuevo por aqui -me doy cuenta de que tambien amas los libros y comienzo a hablar un poco mas seguro- es que... Queria encontrar... Algo nuevo... Algo que nunca haya leido -miro la biblioteca recien dandome cuenta de lo gigante que era la biblioeca.

- No se lo que haz leído.  -te sonrio intentando tranquilizar la situación-