Criminal Heart

Capítulo 1 «Mentiras bajo la luna»

Mi cabeza daba vueltas, miles y miles de vueltas, tenia clara una cosa, esto debia terminar. Tome mi casi vacia cajetilla de cigarros y saque uno para ponerlo entre mis labios, del bolsillo de mi chamarra de cuero saque mi mechero y sin dudarlo encendi aquel cigarrillo, le di una larga calada para después sacar el humo ligeramente, la muerte era la unica opción, pero el remordimiento acudia en mi tras esos devastadores pensamientos, a buena hora me había fijado en ese rubio hermoso de ojos color zafiro, a buena hora me habia enterado de que era mi enemigo, y a buena hora había tenido que decidir entre el o ese propósito que me mantenía viva. Uno de los dos tenía que morir, eso me había dicho mi superior, mi jefe y si fuera menos, mi esposo. El había descubierto lo que tenia a escondidas con ese joven y aunque no recibí reclamo alguno por ello, sabía que estaba demasiado dolido, podía ver la decepción en su mirada, pero era algo que no podía cambiar, no importaba cuanto me amase ese hombre, yo jamás podria corresponder a sus sentimientos.

Saga era un hombre de negocios reconocido, o al menos a si se mostraba ante la sociedad, una persona intachable, recta y digna de confianza, pero detrás de esa fachada perfecta se escondía un criminal bastante habilidoso y ruin, el hombre con el que me había casado, y decir que habia sido decisión propia era mentir. Mi madre había cambiado enormemente tras la muerte de papá, mi hermano había tenido que tomar el lugar de este dentro de la mafia, y yo al no tener otra función en la empresa familiar fui ofrecida al mejor postor para que los negocios familiares no decayesen, así había terminado por convertirme en la esposa de un hombre al cual no amaba y prácticamente deseaba destruir.

— Sabía que estarías fumando tras la discusión con tu amado esposo — imprimio sarcasmo en las ultimas dos palabras y yo sonreí amargamente, volví el rostro y me encontre con la mejor de sus sonrisas, sentí el corazón derretir.

— Me fastidia que ... — camino hacía mi y puso uno de sus dedos sobre mis labios para después asentir. Él mejor que nadie entendía mi sentir. Mi hermano mayor Shou Ohara. Aunque no eramos hermanos sanguíneos compartíamos un cariño bastante grande por el otro, y decir que teniamos una relación de lo mas normal era otra vil mentira. Si había otro amante a parte de ese joven rubio, ese  era Shou, incluso antes de casarme con Saga  manteniamos esa relación a escondidas de la familia, cuando alguno de los dos necesitaba consuelo y refugio, el cuerpo y corazón del otro cumplía esa tarea a la perfección.

—Lo se — susurró antes de sentarse a mi lado y arrebatarme mi casi extinto cigarrillo— Ahora deja de matarte. Pronto todo terminará, serás libre de nuevo.— Acaricie su mejilla mientras él apagaba el cigarro en un cenicero cercano y con una simple mirada me encendío el corazón. — Toma una ducha y vístete apropiadamente para la fiesta de esta noche. — Me ordenó para despues tomar mis mejillas entre sus manos y posar sus labios sobre los mios para besarme lentamente, correspondi de la misma forma, sintiendo una descarga eléctrica recorrer mi cuerpo y clavarse en mi corazón. Nos separamos a regañadientes, poco importaba la falta de aliento en realidad, solo deseábamos seguir devorando los labios ajenos.

— Tomaré una ducha, no querras venir ¿o si?— me sonrió de medio lado, con esa sonrisa felina que me hacia estremecer, su diestra bajo de mi mejilla hasta mi cuello y de ahi a mi clavícula. Me estremeci.

— Sería una falta de respeto a tu esposo — dijo tratando de parecer serio, yo solo reí por lo bajo — Pero si esta noche quieres, puedes quedarte en mi casa y ya nos arreglaremos — se mordió el labio inferior y comprendí la invitación, sonreí ladinamente y le abracé por el cuello.

— Que asi sea, hoy no me apetece compartir la cama con ese... — ni siquiera pude terminar mi protesta, y para cuando me di cuenta ya estaba devorandole la boca nuevamente, que fácil, que estúpido y que placentero.