Principe Tony y Principe Steve

¿Mejorado?

Arreglo mi propio ropaje, luego salgo de mi habitación... estoy muy ansioso y era extraño que yo mismo me colocara mi ropa pero en esta ocasión no deseo que los sirvientes reales me toquen, Estar a unos días de tener mi primer celo me hace que intente alejar a las personas de mí ya que mi olor es algo atrayente hasta para omegas, Dejo salir el aire que estaba reteniendo Oh mi Luna y sol... estaba muy nervioso porque debía hacer la bajada real para entrar a el salón donde se estaban desarrollando las cosas. Escucho claramente la voz de mi madre: "Baja tus orejas de conejo y mantén quieta tu cola". Tengo cola y orejas porque soy del país de los conejos, todos nacidos en este país tenemos esa peculiar apariencia. a menos que seas un hermoso cruce cosa que era muy extraño porque entre reinos poco había de conversación solo las justas, Pero en este momento había una fiesta con el reino de los caninos, Según Me han informado... por medio de mi madre tienen un hijo quien es alfa cosa que no me deja con muchas alternativas de deducir las acciones que mi madre y mi padre estaban pensando llevar con esa peculiar información y estado del príncipe, con mi propio estado, bajo las escaleras todos los nobles perrunos intentan no alzar las orejas, quienes las tiene alzadas es el Rey perruno y mi padre además de mi madre pero su cola la mantiene recta como me ha enseñado que lo haga, bajo sin ver las escaleras de forma elegante haciendo que mi falda de seda transparente se mueva con el pequeño aire que llega a esta al movimiento, cuando llego a la base de las escaleras miro a mi padre y madre. Al estar cerca de ellos, estaba tranquilo pero por fuera per sentía que hasta mis rodillas estaban temblando.

"Te miras hermoso mi querido hijo" Mi madre habló primero al ser la reina de nuestro reino era casi tan importante como mi padre ya que éramos unos seres de inteligencia y no teníamos muchos prejuicios entre si eran omegas o eran hembras. Pues madre mostró muchas veces en la guerra contra otros reinos que era capaz de trazar grandes estrategias en pleno proceso de parto. Me acerco un poco más a ella claro después de saludar con una pequeña reverencia a la reina madre perruna y a el rey. mi padre me vio algo orgulloso y yo solo sonrojé por sentirme bien al ser el centro de atención, El rey tenía las orejas alzadas en muestra de gran al alcance en su territorio y mirada tranquila hacia su esposa, quien le regresaba la vista como si lo más hermoso fuera, como quiero tener esa mirada con la persona que me tocaría desposar, en la conversación entraba al tema mi futuro esposo, el príncipe Steven Grant Rogers o como su madre le decía "Steve" quien a palabas de la hermosa reina era muy buen caballero y príncipe pero en ese mismo momento se había quedado en los muros de nuestro palacio para ordenar las tropas perrunas y crear una importante barricada de control para todos los que entraran y salían del palacio.

"Disculpen me padres y su majestad el Rey y la Reina perruna... pero quisiera con mis propios ojos ver a el príncipe"

"Claro cariño" me dijo la reina perruna, "Podrás verlo afuera en frente de las tropas y será el único que vista de rojo, espero que sea de tu agrado" Tomó mi mano y me dijo con una sonrisa pero con palabras muy bajas para hacer un poco de privacidad "Espero realmente que su unió de frutos pronto" Cosa a la que me sonrojé y le vi algo apenado "Que lindo eres, amor" ella se acercó a su esposo " Te acuerdas cuando yo era así"

"¿Cómo podría olvidar lo mi reina? eras la más hermosa de toda la corte real" dijo el rey y con una disculpa salí antes de que me comenzaran a decir cosas más vergonzosas. Realmente tener una suegra así no estaría para nada mal.

Los alfas de otros reinos tenía la fama de tratar mal a los omegas y los betas de igual forma eran abusados por los que no tenían mucho poder de alcance con sus feromonas pero... espero que el príncipe Steven sea Diferente a estos además que sea como su madre lo describe.

Al ser un omega de la realeza parecía que era algo caprichoso y como mi padre estaba en el momento de que decía que no importaba si era omega o alfa debía de aprender todo lo que fuera como un alfa al ser un príncipe. Esperaba realmente no caerle mal a mi futura pareja, no necesitaba tener tan mal relación con quien va a tener mucho que compartir, al llegar a los jardines altos del palacio veo a todos los soldados perrunos muy bien ordenados en filas y con sus orejas bajas mostrando que eran sumisos ante su rey o general, me acerco un poco más y miro desde el lado de un árbol para ver si estaba... pero desafortunada mente no estaba, había alzado mis orejas y las bajé por la pequeña decepción. Dejo salir un suspiro y me siento a la par del árbol Seguramente la reina me va a regañar por andar tan sucio al sentarme en el césped con ropa blanca. No puedo evitar alzar mis orejas cuando escucho unos pasos y miro hacia un lado sacando una pequeña daga de mi bota color café, ahí estaba un hombre muy alto y gracias a la luz de la luna pude ver su tez blanca pero no tanto como la reina perruna, sus ojos brillaban con un azul intenso y su ropa era roja-.