Aprendiendo a ser Romántico-Stydia

1.Aprendiendo a ser romántico

  -Ok! explícame nuevamente como si tuviera 5 años...- respiró - Quieres que haga qué? – Fue lo primero que dijo Lydia al escuchar a su amigo. 

Desde hacía varios años había logrado vencer la timidez y el sonrojo que le ocasionaba estar frente a él, y había decidido por lo tanto darse por vencida de lograr algo más que la amistad. Es que había pasado varios años tratando de que ese tonto se fijara en ella que ya viendo que el tiempo pasaba y ella se estaba haciendo mayor, prefirió dedicarse a conquistar chicos que la tenían en cuenta. Es que para Stiles Stilinski, la pequeña hermana de su amigo no existía. Y hoy después de tanto llorar, y desde casi tres años, se habían hecho amigos. Amigos a la fuerza! 

Porque el noviazgo de  Allison y Scott, habían obligado a Stiles a buscar nuevos horizontes referidos a la amistad, y como ella estaba cerca, le fue fácil.

Lydia era muy distinta a Allison, y a Scott. 

Stiles se encontró un día estudiándola y se dió cuenta de que tenia algo de los dos, mas lo propio. De Allison tenía el buen gusto, la confianza y seguridad en si misma, de Scott el buen humor y la picardía, y cuando se enojaba, podía ver a la señora Natalie, su mamá, lanzándole un gran regaño. Pero Lydia tenía además algo especial, y era que entendía todas las penas que Stiles tenía. Y más las penas de amor.

 Al joven le era fácil contarle lo que sentía, sus más profundos temores y deseos. Y ella era capaz de darle un consejo, apropiado para cada cosa. Es por eso que teniendo un problema con su amor, tan grande, decidió pedirle ayuda.

-Yo... no es tan malo lo que te pido Lydia–dijo Stiles algo nervioso-Es muy importante para mi!

-Pero Stiles– dijo Lydia y su piel estaba muy pálida–¿En qué puedo ayudarte yo? No tengo idea de lo que quieres hacer!

-No es mucho pedir- sonrio-Sólo te pido que me ayudes a ser mas romántico-ella torció los ojos.

-Sé lo que dijiste, lo que no entiendo es por qué? Para qué?

- ¿Por qué? Bueno es fácil, no se me da eso del romance,Lyds. Yo trato de conquistar a una chica.

- Querrás decir a Erica– dijo con algo de rabia.

-Si, a Erica, pero hago todo mal y quedo como un idiota!

-Pero Erica ya no está en la escuela Stiles– dijo en un tono desesperado.

-Lo sé, pero ella y yo nos mandamos mails, y a veces me resulta algo... difícil poner algo medianamente romántico, y yo... quiero sorprenderla, hacerle ver que yo valgo la pena.

-Si ella se interesara en ti, te querría tal como eres, aun siendo un perfecto... idiiota... como tu dices que eres!

-Bueno pero es que a algunas mujeres son más sensibles que otras!

-Querrás decir que Erica es una reventada que lo único que quiere es acostarse contigo y decir que es la novia del chico que todas aman.

–Y Erica quiere que yo cambie.

-Por qué tienes que cambiar tú? – lo miró arqueando una ceja –¿Es que ella se cree tan perfecta para decirle a todo el mundo que cambie?

-Lydia...

-No–puso su mano en el pecho del joven –Déjame terminar. Si ella te quisiera, te aceptaría tal como eres Stiles. Tu eres un chico excepcional–se sonrojó un poco.

-Gracias, pero es que yo quiero hacerlo, yo noto que no sé como comportarme delante de una mujer.

-Bueno... eso es cierto – tuvo que admitir Lydia.