¡El campamento es mio!

Capítulo 1

Capítulo dedicado a: NayelyMuriel-Cruz
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—¿No crees que te estas pasando con las bromas Cece? —miré a mi amiga la cual veía preocupada como se llevaban a Diego a rastras gracias al monitor jefe (su padre)

—Mi culpa no es que mi estúpido enemigo te guste —me senté en una encima de una de las mesas que habían en el salón de juegos, pronto Gabriela se sonrojó, rodé los ojos.— Que asco por dios, ¿cómo llevas pillada por él desde los siete años? Gaby, que tienes dieciséis.

Gaby imitó mi gesto y se sentó al lado mio sacando de su chaqueta una bolsa de Haribo.

—Y qué quieres que haga, ademas no digas nada que tu estuviste colada por él también —después de esa frase tan idiota reí.

—Por dios yo nunca he estado colada por ese idiota, ¿tu crees que me gustaría estar con idiota que desde que llegué con seis años al campamento no ha hecho más que torturarme, eh?— se quedó pensativa unos segundos

—Hija que preguntas mas largas haces —rodé los ojos.

—Hija que idioteces tan largas dices —esta vez fue ella la que rodo los ojos.— Ademas, ¿que hago aquí?, tengo que irme un rato, adios Gaby

Me despedí de ella y de un salto baje de la mesa. Nerviosa mire la hora en mi móvil. Había quedado con Nicolás a las cuatro y ya eran las cuatro y diez. Tragué saliva.

—Solo espero que esté ahí —susurré para mi misma, lo sé, estoy idiota, me junto demasiado con Diego.

Salí de la zona de adolescentes que era una gran cabaña. Todo el campamento estaba situado en el bosque y con un lago al lado, de ahí que nuestro campamento se llamará “Lagoona Blue” en él habían pequeñas  cabañas , algunas cabañas eran para dormir (habían mixtas, para chicas y para chicos) y otras como la zona de juegos eran de ocio, para que no nos pegaramos un tiro, era el único sitio con señal y WIFI.

Sin que los monitores me vieran me adentre a la zona de bosque, me sabia esta zona perfectamente. Por eso sabía que si seguías unas flechas bien escondidas en los árboles podías ir al otro campamento que había en este mismo bosque , la diferencia con el de nosotros es que este era de ricachones y “malotes”.
Vamos como un reformatorio para gamberros.

Empecé a seguir las flechas y antes de llegar al campamento vi a un joven de cabello negro sentando debajo de un árbol. Caminé lentamente para que no escuchara mis pisadas, las cuales se hacían más ruidosas por las hojas que caían de los árboles.

—Llegas casi veinte minutos tarde Cece —suspiré.

—Lo siento Nicolás — Nicolás se levantó, joder era muy alto.

—¿Estabas con Diego? — sonreí inconscientemente y él también lo hizo. Se acercó a mi.

—Oh pequeña, ¿que le has hecho esta vez? —sujetó con sus manos mis mejillas y me dio un casto beso en los labios.— Por cierto, me gusta tu pelo rosa —susurró en mi oído

—Eres imbecil Nico —cogí la iniciativa y le besé.

Vale, para los que no están enterados. A los doce años me perdí en el bosque y encontré  el campamento de los pijos y en el a Nicolás, un niño al cual dejaban todos lo veranos tirado en ese campamento porque no le aguantaban. El mismo me lo dice “joder Cece eres la unica que me soporta”. A los trece nos dimos nuestro beso, pero al final seguimos la historia los dos con dieciseis sin ser novios pero si dandonos besos, no se como definir eso. Lo único que sé es que asi estamos bien.