7• Oh bendita sea la resaca

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Los cinco Matsuno se encontraban acorralados en aquel callejón y para colmo abandonados en la noche, sudaban la gota fría mientras todos miraban toda dirección para ver quien haría el primer movimiento con la guardia alta y en cuerpo en posee de defensa la adrenalina le llenaba el cuerpo y uno que otro nervio le traicionaba su cuerpo, cinco hermanos contra unos...ett'o... no sé treinta hombres por lo menos?... Unos listos para dar el ataque, alguno que otro chico con arma en mano (Tubos, bates y nudilleras). Cada uno mirando en diferentes direcciones apegado espalda con espalda. Un ruido llamo su atención.

Un hombre de unos veintisiete años aproximadamente con traje de pandillero con el tipi o estilo de bancho que había golpeó fuerte mente una cañería con una bate dejando la marca estampada mientras chasquea su lengua       

- Tsk.... - chasqueo la lengua mirando a los recién llegados - carajo a caso no puedo tener un día pacífico por aquí - se quejo en voz alta - primero uno de ustedes jode en mi territorio y ahora vienen cuatro más y una chica. Qué más procede?!

Los hermanos se quedaron callados sabían que al menos ni uno de ellos había pasado aquí antes -ni en su sano juicio pasarían por estos rumbos - una mueca de confusión se inserto en sus rostros nadie piso su territorio, seguro que Jyushi se confundió de lugar a menos que...

- Jyushi...seguro que es este el lugar? - susurro el cuarto mirando por un costado a su hermano menor el cual asintió con su boca cerrada y un ceño fruncido hacía el "recién llegado"

- SILENCIO JODER! - dio un grito inesperado lo demasiado fuerte para asustar a uno que otro hermano (incluyendo a unos cuantos subordinados) - no estoy de humor para cuchicheos demonios!

- Al parecer la princesa se puso delicada - se quejo el cuarto mirando como aquel hombre exagera todo lo que hay a su paso

Karamatsu debatía seriamente entre reír o sermonear a su Kara boy... Opto por quedarse callado y mirar al que estaba vestido de bancho -más bien en el que parecía el jefe- y luego dar un suspiro. El que parece líder dio un chasquido y como fuesen perros obedientes se pusieron en modo defensa listos para atacar solo faltaba la orden       

- Destruyanlos - y ahí estaba - no aguantó más me iré de aquí... 

- O-oiga nosotros no venimos a causar problemas es más ni siquiera sabemos por qué estamos aquí - hablo el tercero buscando la forma de salir lo más pronto posible de aquí

- S-si ad-además nosotros nunca hemos venido por aquí antes - hablo el sexto con mirada firme

- Exacto no tiene pruebas de que hemos estado aquí...si tan solo nos dejara salir prometemos no volver a pasar en su territorio - hablo Karamatsu con toda seguridad 

- Dicen que no han estado aquí antes - dijo el jefe con tono inocente - que nunca han estado aquí? En serio creen que me vaya a creer eso

- Eh? De que hablas nada aquí nos hace familiar! Así que dejanos ir - dijo Ichimatsu

Un silencio... El jefe empezó a dar carcajadas y sus hombres lo siguieron estuvieron así por un breve momento y el jefe paro y los demás se quedaron en seco.

- Acaso él no se les hace muy familiar? - se movió de su lugar dando un paso a la izquierda dejando ver a un atado Osomatsu con su sonrisa despreocupada como si nada malo le pasara en el mundo

- Hola chicos~, extrañaron a su nii-chan~ - dijo así nomas como si en la vida le valdría medio pepino

- OSOMATSU! - gritaron los cinco anonadados al saber que ahí se encontraba su hermano todo este tiempo

- No! Obama (>:'v) - grito el primero con lágrimas de cocodrilo - cómo es que ustedes se quieren ir de aquí y dejar a su oni-chan solito~, que malos hermanos menores tengo   

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⏰ Última actualización: Mar 30, 2018 ⏰

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Karamatsu...nee-san?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora