Darkness. [Asa Butterfield] | Versión En Español |

Capítulo 2.

Desde el otro lado de la barra vi a una chica de tez blanca y cabello oscuro corto bailando sensualmente. Dios, que belleza. 

Lentamente me le apego en la parte de atrás poniendo mis manos en sus caderas. Moviéndonos a una sincronización perfecta. Puso sus manos en mi cuello, y luego de unos momentos se gira. Queda tan cautivada por mis ojos que se detiene y yo también me pierdo en esos oscuros ojos marrones. La siento ponerse nerviosa, lo cual me causa un gran placer. Después de unos segundos, me besa. Sí, me beso tan fugazmente que sentí una electricidad en mi cuerpo que se concentra en mis labios. Murmuró algo que no logré descifrar.

Siento que se despega y cuando vuelvo a juntar los labios, un asqueroso sabor a plástico llega a mi lengua, cuando me separo veo que no es la misma chica. Me giro en mi mismo eje buscándola pero no la encuentro. 

Me alejo de ella y decido llamar a mi hermano. Estábamos felices que Marlie tenía 10 años y todos habíamos acordado que no la meteríamos en este mundo de mierda. 

A los tres tonos no responde. Tres, cuatro llamadas y nada. 

Salgo del establecimiento para poder escuchar mejor. Escucho su tono celular sonando. Me giro y lo que veo no me gusta.

Corriendo hacia él, me tiré al suelo agarrando su cabeza en mis manos

-No, no, no.- Grité con toda mi fuerza. -¡No!, esto no puede estar pasando, simplemente no.

Miré a todo lados en busca de alguna pizca de sospecha, nada, estábamos solos, solo él y yo.

Mi hermano había muerto. No. Alguien lo había asesinado. No uno. Dos. Conozco esta forma de matar. La he visto antes en algún lugar, pero no recuerdo absolutamente nada.

Me acurruqué más a él, suplicándole a algún Dios que me lo regresara. Las lágrimas corrían sin pavor alguno por mi mejillas. Tenía cien preguntas en mi cabeza. Pero a todas las ignoré y solo me concentré en pensar quien habrá sido. Joe Fox. Es el único maniático sádico de mierda que quería asesinar a mi hermano. Pero mandó a alguien más a hacer su trabajo sucio.

Llorando, llamé a Loxie.

-¿Si, hermanito?- Dice una inocente y dulce Loxie.

-Loxie... Morgan... Sangre...- No podía ni siquiera hablar de lo desesperado que estaba y lo conmocionado.

-Calmate Asa, ¿Qué Morgan qué?

-¡Morgan está muerto! ¡Alguien lo asesinó! Necesito que vengas ahora mismo, estoy en La Vie Rose. - Dije sollozando.

Escuché una puerta cerrándose.- Ok, ya voy para allá. -Finalizó la llamada. Ella no se inmutaba por nada. Ella había visto el asesinato de nuestros padres en vivo y directo.

Después de unos 15 minutos, mis ojos se ven cegados por una luz blanca de un automóvil.

>< >< ><

Al finalizar el entierro, volvimos a casa en absoluto silencio. Desde ayer que nadie habla. Pero hoy era el momento perfecto de hablar en lo ocurrido.

Era suficiente que el mismo hombre haya asesinado a mis padres, ¿Ahora a mi hermano? Ese hombre esta jugando con fuego. Esta por hecho que es el número uno de personas muertas en mi lista.

Llegando a casa, yo fui el primero en entrar. Lo esperé a todos en la sala listo para hablar.

Loxie entra con Marlie agarrada de su mano. 

-Ve a acostarla, por favor.-Le indico a Loxie, haciéndole la indirecta que tenemos que hablar.

Camino hacia el sofá individual y pongo mi codos sobre mis rodillas y entrelazo mis manos.