Detour [Baekyeol/Chanbaek]

Capítulo 9. FINAL

El día después del incidente, Baekhyun ordenaba silencioso sus libros tras oír sonar la campana que indicaba el final de las clases por ese día.

Sintió una extraña sensación, y miró hacia la ventana del pasillo, encontrando la figura del castaño estampada en medio del vidrio, con la mirada fija en él.

Cuando el alto se vio descubierto, entró en pánico, y se apresuró a escabullir la mitad de su cuerpo tras el marco, dejando solo su cabeza al descubierto.

Baekhyun lo miró incrédulo. Vaya idiota.

Cuando al fin terminó de acomodar todo y salió por la puerta del salón, Chanyeol lo esperaba nervioso y algo cohibido, saludándolo discretamente agitando una mano.

-Nos vamos a casa -le informó el bajito, acomodándose la bufanda.

- ¿Eh? -el alto estaba más que sorprendido - ¡OH, OKAY!

***

Ahora ambos estaban sentados en el césped, a varios metros del sendero que acostumbraban tomar para volver a casa.

Baekhyun permanecía con las piernas flexionadas contra el pecho, ocultando su boca en la bufanda, mientras Chanyeol no disimulaba su impaciencia, mirándolo a cada tanto de reojo mientras intentaba imitar su postura.

Tras varios minutos así, el azabache finalmente suspiró -Hablaré francamente ahora -dijo monótono, con la mirada melancólica clavada en sus pies -Me gustaría responder positivamente a tus sentimientos...

La sonrisa de Chanyeol no pudo ser más amplia -¡¡Woohoo!! ¡BAEKKIE...!

-Sin embargo... -lo cortó el mayor -...tengo miedo... -a estas alturas, el alto ya se había puesto de pie de la emoción, mirándolo desde arriba -...miedo de cómo mis padres y el resto del mundo me mirará... cuando sepan que estoy enamorado de un chico. Apartarme del camino que casi todos siguen... me aterra -confesó frunciendo el ceño y cerrando los ojos con fuerza -Esta manera de pensar se filtró en mí a través de los años, y no creo poder cambiarla tan fácilmente. Pero... yo quiero cambiar. Quiero ser como tú, para que no me importe lo que el resto del mundo piense. Quiero vivir siendo capaz de decir cuánto amo las cosas que amo. Hasta ahora nunca me he desviado del camino, y sólo me enfoco en seguir adelante. Nunca me he detenido o considerado mis sentimientos -finalizó con los nudillos blancos apoyados en la hierba.

Baekhyun siguió con los ojos cerrados y el pulso acelerado, hasta que sintió el suave roce de los dedos de Chanyeol en el dorso de una de sus manos. Contuvo la respiración y abrió los ojos en el momento justo en el que la mano del menor tomaba la suya.

-Cuando estoy contigo, quiero tocarte así -susurró el alto, ronco. Dio un suave apretón a la mano que sostenía, ganándose la mirada tímida de Baekhyun por encima de sus pestañas - ¿No te gusta hacer este tipo de cosas conmigo? -preguntó en un jadeo.

El corazón de Baekhyun dio un vuelvo cuando vio las mejillas de Chanyeol afiebradas a la espera de su respuesta.

-Yo... no es que... no me guste -balbuceaba el mayor, más sonrojado que nunca.

- ¿No lo es?

-No, yo...

-Entonces, ¿qué es?

¿Qué es? Es lo que Baekhyun se preguntaba.

-Es... mi corazón... -confesó, estrujando su abrigo al sentir sus latidos retumbar en su pecho -...siento... como si fuera a estallar...

Al oír esto, Chanyeol no pudo reprimirlo más. Tomó el rostro del azabache entre sus manos, con la mirada perdida en los labios finos y brillantes.

Baekhyun estaba petrificado en la misma posición, viendo al alto acercarse cada vez más y más, hasta que el pánico se apoderó de él.

- ¡¿Espera qué estás haciendo?! -chilló tapándole la boca con ambas manos.

-Besart...

- ¡NO PUEDES! -lo cortó atropelladamente.

- ¿Por qué no? -se extrañó el menor, tomando las muñecas y alejándolas de su boca para poder hablar adecuadamente.

- ¿Qué pasa contigo? ¡AMBOS SOMOS CHICOS! Y lo más importante, ¡este es el tipo de cosas en las que necesitas consentimiento de ambas partes!

-No lo haré si no quieres que lo haga. Si no quieres que lo haga, ¿entendido? -Chanyeol habló con total seriedad -No me alejes solo porque ambos seamos chicos, o porque no sea normal. Solo aléjame porque en el fondo de verdad no quieres que te bese.
Pasaron unos segundos, y ninguno dijo nada, entonces Chanyeol volvió a acercarse, tomando la barbilla del bajito a medida que acortaba la distancia que los separaba.

Baekhyun apartó la mirada, y en algún punto, incluso llegó a ladear la cabeza, claramente sobrepasado por la situación. Pero Chanyeol nunca se apartó, es más, se detuvo y dejó que se tomara su tiempo, antes de acomodar nuevamente el rostro de Baekhyun en una caricia, hasta que sus alientos se mezclaron, y luego sus labios se fundieron en un beso lento y delicado.

El bajito cerraba los ojos con fuerza, sintiendo la ternura desmedida en los movimientos gentiles del menor. Sus ojos escocieron imperceptibles, brotando discretas lágrimas que murieron al embeber sus pestañas.

El viento sopló sacudiendo las copas de los árboles y haciéndolos estremecer a ambos. Los labios del mayor se sintieron fríos cuando la calidez de los belfos contrarios perdieron contacto con los suyos.

Suspiró tembloroso abriendo los ojos, encontrándose con la sonrisa y mirada que solo Chanyeol podía mostrarle. Fue en ese instante que lo comprendió. O tal vez siempre lo supo, desde el momento en que se conocieron esa tarde en el festival.

Tal vez nunca había olvidado su sueño. Después de todo, los ojos de Chanyeol cuando contempla algo que ama, era lo más brillante que Baekhyun hubiera visto jamás.