Mi Fortaleza

Capítulo 1.

–Jack por favor ten mucho cuidado -dije agarrándole el brazo-

–Hermana tranquila todo va a salir bien, por favor toma mi casco

–No llevatelo lo necesitaras mas que yo

-Hermana te amo, y todo saldrá bien ya veraz, el que esta allá arriba es grande y poderoso y mamá nos va a proteger, asi que tómalo
-insegura lo tome y me escondí en un una acera mientras el corría a toda velocidad hacia donde estaba los militares hasta ver que  desaparecía-

–Lo mataron, lo mataron -gritos retumbaban en la calle, corrí rápidamente a ver que había pasado y se encontraba Jack tirado con mucha sangre-

–NOOOO MALDITASEA TU NOOO-baje rápidamente y lo tome en mis brazos militares me  agarraron...-

–Por su seguridad le recomendamos abrochar sus cinturones, el aterrizaje será en unos instantes -me despertó la voz de la aeromoza de ese terrible recuerdo que me perseguía. Vi a mi hermano profundamente dormido con la boca abierta, asi que decidí meterle los dedos para que se ahogara -

–¿Oye Cielo que te pasa? ¿Estás loca?-me dijo con su voz enojado-

–JAJAJAJA si un poco, despierta ridículo ya estamos por llegar -le dije desordenando su cabello. El solo me saco el dedo del medio y empezó a mirar la vista por la ventana-

Hoy 14 de agosto mi hermano y yo comenzábamos una nueva historia, una nueva vida. Tenia un pasado que no quería dejar, pero mi papá simplemente nos mando por nuestra seguridad a España, lo entendía tenia miedo de perdernos

15 minutos mas tarde...

Nos encontrábamos en el aeropuerto esperando a una colega de mi padre, que probablemente sería nuestra nueva familia

–¿Cielo? ¿Matias? -nos dijo una señora muy bonita de echo, tenía ojos azules hermosos-

–Hola, si somos nosotros. Supongo que usted es la Sra. Colina-le dije-

–Asi es. Buenos mis niños, vamos a su nuevo hogar. Supongo que están muy cansados... -nos dijo la señora Colina, con ese acento español que me gustaba mucho-

–La verdad no, los viajes en avión siempre son livianos -dijo Matias-
–Oye Cielo esa mujer si que es sexy–
-me dijo Matias en susurro-

–Matias por Dios ya, ella será como nuestra nueva madre -le dije volteando los ojos-

Llegamos a un muy lujoso carro y un señor que suponía que era el chofer, tomo las maletas y luego nos abrió la puerta para entrar.

–Oye su papá me dijo que no querían vivir con nosotros, que le buscáramos un apartamento donde vivir -nos dijo la señora Colina-

–Si es que la verdad no queremos molestar y además necesitamos tener nuestra privacidad- le dije-

–Por Dios, no sería ninguna molestia. Tu padre nos ha ayudado mucho. Pero respetamos su decisión ya les compramos el apartamento, pero me gustaría mucho que hoy durmieran en nuestra casa

–Seria mas que un placer Sra Colina
-dijo Matias. Claro que lo decía solo para ver las piernas de la Sra-

–Claro mis niños, así cenamos todos juntos- nos dijo con una sonrisa-
-Matias y yo solo asentimos-

Eran alrededor de las 6:00pm, España era impresionantemente hermosa. Era un lugar muy histórico, y eso me gustaba, amaba los lugares asi. En Venezuela, había un lugar hermoso llamado la Colonia Tovar, ese lugar lo amaba. Quedaba muy cerca de donde vivíamos, eramos de Caracas y pues mamá siempre nos llevaba. Después de su muerta yo iba sola, aveces con Jack y Matias.