(Román) 21-Junio-X
Torrejón de Ardoz era aburrido, pero que muy aburrido, eso era lo que pensábamos Gabriel y yo.
Todos los días la misma rutina, todo el mundo hacia lo mismo día a día, pero este viernes todo empezó a cambiar, ¿Para bien? o ¿Para mal?....
Empezaban las fiestas de Torrejón, los únicos cinco días en los cuales puedes hacer de todo.
-¡Gabriel!-grite mientras me dirigía a él.
-¡Que!-me devolvió el grito mientras agitaba los brazos como si fuera un niño.
-Estos días puedo quedarme a dormir en tu casa-le dije sonriendo.
-Guay-dijo-Entonces, ¿Con quienes vamos a ir hoy?
-Tú y yo. No quiero que venga nadie-respondí enfadado-Además, seguro que tienen sus propios planes.
-Vale, pero ya te aviso que no beberé nada-me dijo.
-Joder, que aburrido que eres-dije riéndome mientras le golpeaba el brazo.
Llego la noche, eran las 12 de la noche cuando encontramos a unas chicas que estaban bebiendo, gracias a Gabriel nos hicimos amigos rápidamente. El tiempo se nos paso volando, cuando quisimos darnos cuenta ya eran las 5:30 am, pero aun así nos quedamos con las pocas personas que quedaban en nuestro nuevo grupo.
No recuerdo muy bien como llegue al sofá de Gabriel, menos mal que él no bebió nada, porque al levantarme me dolía la cabeza muchísimo, mire la hora, las 17:00...
-Mierda-maldije sin levantar la voz, fui a levantar a Gabriel y desayunamos.
-Zero me ha llamado-dijo Gabriel viendo su móvil- !12 perdidas¡
-Sera algo importante-dije-¿Vas a ir?
-Sí, será algo importante-dijo mientras se vestía-Y tu ¿Que vas hacer?.
-Yo tengo que volver a casa, mis padres están enfermos desde hace unos días, salen una vez y se enferman, pobres y Luis seguro que tendrá hambre, así que iré a ayudarle, pero volveré aquí ¿OK?-respondí poniéndome los zapatos y chaqueta.
Salimos de casa de Gabriel sin ver a nadie, cada uno fue en su dirección, mientras iba a casa no vi a nadie, era todo algo extraño, había gente, pero lejos y andaban como borrachos y no le di importancia, llegue a casa y entre al portal usando las llaves, llame al ascensor, pero no funcionaba, joder, que mala suerte, dije subiendo las escalera, mientras subía pude oír fuertes gemidos y golpes, subí rápidamente algo asustado, abrí la puerta y al entrar mire en la cocina, allí estaba mi madre, tirada en el suelo ensangrentada...
-Ma...ma-tartamude al verla, me aleje y entre en el salón, entonces oí gritar a Luis, mire en el pasillo Antonio golpeaba con fuerza la puerta del baño, se dio la vuelta y vi que su piel estaba grisácea y sangraba por los ojos, de pronto vino corriendo hacia mí, aun así era lento, reaccione yendo a la terraza, ahí cogí un martillo de clavos y decidí entran por la ventana de mi habitación para llegar al baño.
-Luis-susurre golpeando la puerta un poco-Sal, soy yo-Abrió la puerta y señalando detrás mía grito.
-¡Román!-mire detrás y vi a mis padres acercándose, sin pensarlo fui a la puerta del pasillo y opuse resistencia, que mierda estaba pasando.
-¡Luis, entra en tu habitación, ponte los zapatos y...!-pare cuando golpearon la puerta mas fuerte-¡Coge tu mochila y la mía y llena una de ropa nuestra y todo lo necesario, en mi habitación hay unos pinchos de acero y una navaja, cógelos también!