destino

capitulo 2:

En su sueño el se encontraba en una calle solitaria y un poco oscura, parado, observando hacia un callejón oscuro con un farol bastante grande que producía una luz poco brillante.

De pronto una luz muy brillante aparecio  frente a el y cuando esta se desvaneció en la gran oscuridad del lugar el pudo ver a Alice produciendo un aura de luz a su alrededor. Ella tomo sus dos manos y se acerco lentamente a su oído y le susurró: "te necesitó", de pronto otra, otra voz que repetía las palabras:

Decision
Rueda
Destino

Abraham despertó de golpe, algo estaba sonando, al principio Abraham creyó que era su despertador. Pero no era la hora en la que el acostumbraba a despertarse, si no que eran la 1:10 de la madrugada. Así que volteó a ver que producía ese peculiar sonido

Era su celular.

Era Alice que lo estaba llamando.

En ese momento Abraham recordó que antes de caer dormido le había enviado un mensaje a ella, agradeciéndole por la platica que habían tenido en el autobús.

-¿hola? ¿Alice? ¿porque me llamas a esta hora?

Entonces Abraham escucho la hermosa voz de Alice la cual le parecía una voz adorable.

-abraham... disculpa si te desperté. Es que  no puedo dejar de pensar en ti...

-es curioso.- dijo abraham recordando el sueño que tuvo.-  yo estaba soñando contigo

Alice se emociono

¿en serio? Yo soñé con tigo también.

Jaja, que curioso.- dijo abraham con cierta emoción de oír eso.

-oye abraham, necesito verte.

David volteo a ver la hora. Era ya la 3:05 de la mañana.

-esta bien. ¿conoces el restaurante de la calle "Solís"?

-mmmmm ¡oh! Si, creo que si lo conozco

- te veo mañana ahí, a las 12:30 de la mañana. ¿te Parece?

-claro. Buenas noches, Abraham 

-buenas noches, alice. Descansa.

Abraham aun no podía creer lo que acaba de pasar. Ella le había llamado queriendo verlo, justo después de soñar con ella. Abraham volvió a dormir y esa vez no tuvo ningún sueño.

Alice después de colgar el celular, se emociono. Ella no sabia bien porque estaba tan contenta, tal ves  era que tenia una cita al siguiente día, o tal ves que abraham había soñado con ella.
Ella no sabia la razón de su emoción, lo pensó por casi media hora y luego cayó dormida. Aun sin saber la razón  de su emoción.

Esa misma noche mientras los dos dormían, la fría nieve se derretida lentamente  abriendo paso a las calles y dejando todo listo para que los dos pudieran verse el siguiente día.

Alice y abraham a la misma hora como si estuvieran conectados.

Abraham llego unos minutos antes de la hora acordada ya que estaba muy emocionado de tener una cita con la mujer mas hermosa que había visto en su vida, por lo que espero en una silla del restaurante.

De repente llego Alice, vistiendo un hermoso vestido negro.

Abraham se levanto y se abrazaron, se abrazaron como si se conocieran de  toda la vida. Una sonrisa se dibujo en ambos en el momento en que sus cuerpo se tocaron.

Al separarse, Abraham la llevo a la mesa que el reservo, cuando se sentaron llego un mesero a preguntar que querían de comer.

Abraham pidió un café con leche y Alice pidió un chocolate caliente.

-¿no te gusta dormir?.- dijo Alice  riéndose.

-jajaja realmente soy muy de andar andar dormido, el café no me afecta el sueño por alguna extraña razón

- te envidio, si yo tomo cafe no duermo como por 3 días... créeme, es horrible

Abraham se imagino a si mismo en su cama intentando desesperada mente dormir y dijo:

-que horrible.

Abraham y Alice rieron solo para que después un abrumador  silencio reinara entre ellos

-Abraham... se que apenas nos conocemos... y...

-lo se, Alice.... siento que tenemos algo... una...

En ese momento los dos dijeron al unísono casi naturalmente:

-conexión.

Ambos sonrieron mientras se veían a los ojos. Súbitamente Alice mostró una cara de preocupación y vio a su reloj de mano que siempre llevaba con ella.

-lo siento, Abraham. pero tengo que irme, mi compañera de cuarto se muda hoy a japón y le prometí ir a dejarla a el aeropuerto 

-esta bien no te preocupes hablamos luego. Cuídate.

Alice se levanto, le dio un beso en la mejilla a Abraham y se fue.

Así pasaron 2 meses, Abraham invitaba a Alice  a el restaurante y ella a el.
De vez en cuando Alice  visitaba la casa de Abraham y abraham la de Alice. Siempre tenían algo nuevo de que hablar, iban tan seguido que las personas que trabajaban ahí pensaron que ellos eran una pareja. Sin embargo no lo eran... o al menos por el momento...

Era ya noviembre cuando Abraham despertó con una idea maravillosa, una idea que le cambiaría la vida para siempre y era: declararse a Alice. El la amaba, la amaba casi desde el día en en el que se conocieron. Y ella también lo amaba a el.