Que comience el juego (Zayn&Tu)

capitulo 24

Narra Zayn:

Pasé mi mano por su mejilla de nuevo, adoraba ver cómo ella cerraba sus ojos en el momento en el que mi piel hacía contacto con la suya. Me acerqué lentamente para así poder besar la comisura de sus labios. Esos besos perfectos que tan sólo ella sabía dar. Aquellos que me hacían temblar, aquellos que hacían recorrer una corriente eléctrica por mi cuerpo.
Sus carnosos y suaves labios comenzaron a jugar junto con los míos. En ese momento no nos importaba nada, solo nosotros. Sólo ella, y yo. 

―Por la manera en que me muerdes, tienes mucha hambre. ―La solté.
―Si, ve y pide la pizza por favor. ―Dijo mientras me daba la espalda para ponerse el corto camisón, su espalda aún desnuda.
―Esta bien. ―Salí de la habitación para llamar a la pizzería. En unos instantes ella se sentó en el sofá, yo me sume a ella para ver televisión. Minutos después sonó el timbre alertando la pizza.
―Abre la puerta. ―Dijo _____, mientras seguía viendo televisión.
―No, ve tú. ―Bromeé― Tú eres la que tenía hambre.
―No. Zayn, el chico se va a ir. ―Exclamó, pero aún así no se quitaba de mi pecho.
―Que se valla. ―Ella se paró rápidamente, y abrió la puerta con una sonrisa, el repartidor solo miraba sus piernas casi descubiertas.
―Ehm, esto... son $19, 95... ―El chico no podía ni hablar ante la presencia de _____.
―Amor, necesito el dinero. ―Me levante de golpe del sofá, puse a _____ atrás de mi, el chico se la comía con la mirada.
―Toma aquí hay $20 ahora lárgate. ―Le arrebaté la pizza de sus manos.
― ¿Y la propina? ―Protestó el chico.
―Te la daré cuando no mires con ganas a mi novia. ―Le cerré la puerta en la cara. 
Coloqué la caja de pizza sobre la mesa, comimos, después el cansancio se apoderó de ______, quedando dormida sobre mi pecho, la tomé en los brazos y la lleve a mi habitación, recordé aquella vez en Malibú donde toque sus labios por primera vez, un traviesa sonrisa salió de mi. Me tumbé a su lado y caí en un rotundo sueño.

Al día siguiente...

Narra _____:

Un ligero cosquilleo en mi espalda muy cerca de mi hombro izquierdo, hizo que me comenzara a despertar, no quería abrir los ojos, aun quería seguir durmiendo, pero el recordar que seguramente sería Zayn el culpable de las caricias, me incitó a abrir los ojos. Efectivamente al abrir mis ojos me encontré con Zayn recostado de lado, recargando su cabeza en su mano mientras que con la otra acariciaba mi espalda.
―Hola. ―Dije sonriente.
―Buenos días, ¿cómo dormiste? ―Dijo con una pícara sonrisa.
―Perfectamente. ―Solté una tímida risa mientras me sonrojaba. Zayn soltó una carcajada y me tomo de la barbilla para atraerme a sus labios y así besarme de una manera sumamente lenta.
— ¿Y qué quieres hacer hoy? ―Preguntó a solo unos cuantos centímetros de mis labios.
―Debo ir a mi casa, y tu, debes prepararte para tu partido. ―Me levanté y tome mi ropa, no me iba a quitar el camisón, viéndolo bien, se complementaba perfectamente con el jean de ayer. Me vestí en pocos segundos, pero Zayn aún estaba recostado en su cama. 
―Vamos Zayn, se va a hacer tarde, y no traje mi auto. 
―Cinco minutos más. ―Fui a su baño, tome un vaso, lo llene de agua, con cautela me acerqué a él y derrame todo el liquido en su cara.
― ¿Por… ¿por qué lo hiciste?, ¡está helada! ―Dijo temblando.
―Eso es para que me obedezcas. ―Sonreí triunfante.
― ¿Vamos ya? ―Pregunté, pero él seguía en su cama.
―Si. ―Se puso rápidamente su ropa, bajamos a la primera planta, tomé mis cosas y subimos a su auto, minutos después ya estábamos frente a mi casa.
―Nos vemos en el partido. Adiós. ―Tomó mi mano y me detuvo, me plantó un dulce beso.
―Ahora ya te puedes ir. ―Sonreí, baje del auto, y entré a casa.

― ¿Mamá, papá? ¿Están en casa? ―Dije buscando alguna señal de un ser vivo.
―En el comedor, linda. ―Escuché la voz de mi madre.
― ¿Qué hacen? ―Pregunté, al verlos con muchos papeles sobre la mesa.
― Tu madre y yo debemos organizar todo esto, viajaremos a Nevada, ¿te molesta quedarte sola? ―Pensaba sonreír, pero no sería bueno de mi parte alegrarme porque no se encontrara nadie en casa y así poder disfrutar unos cuantos días con Zayn, como ayer.
―No, hagan lo que tengan que hacer, los extrañaré. 
―Si quieres te podemos contratar a alguien que haga los quehaceres por ti. ―Añadió mi padre.
―No hace falta, ya soy mayor de edad, puedo hacer todo yo sola. ―Dije convenciéndome a mí, mas que a mis padres.
―De acuerdo, "niña grande" estaremos ausentes por tres días, no quiero nada de fiestas, ¿entendido?
―Si, ahora sigan trabajando. ¡Ah! ¿Y cuando se van?
―En una hora, el avión nos dejará si no nos apresuramos. ―Tomaron sus cosas y las guardaron en unas grandes maletas. 
― ¿Quieren que los lleve al aeropuerto?
―No, el taxi de la aerolínea vendrá por nosotros, no te preocupes. ―Subí a mi habitación, tomé una ducha y tome un short y una playera. Escuché la voz de papá gritando mi nombre.
―Ya llegó el taxi, ven a despedirte de tus padres. ―Baje corriendo como una niña pequeña. Me tiré sobre ellos dándole la despedida.
―Si quieres, puedes llamar a Zayn para que te cuide. Será un gran niñero. ―Susurró mi padre en mi oído, después de soltar una sonora carcajada. 
―Eres pésimo con las bromas, los extrañaré y me comportaré bien, se los prometo. ―Dije riendo.
―Lo sabemos cariño, te amamos. ―Salí para verlos marcharse subiendo al taxi, hasta que el coche se perdió en la carretera.
Ahora es oficial, estoy completamente sola, miré al reloj y eran la 1:32pm. En media hora era el partido de Zayn y yo aún no estaba lista, corrí hacía mi closet, y busqué lo que quería, me puse unos pantalones negros de cuero y una chaqueta del mismo material. Tomé las llaves de mi auto, encendí el motor y me dirigí al campus. Al llegar me encontré a Christofer estacionando su auto.
―Hola, Chris, ¿viniste a ver el juego? ―Dije acercándome a él.
―No, vengo a ver el debut de Chloe, en nuestra antigua escuela era una de las mejores. ―Sonrió.
― ¿Y tu vienes a ver a tu novio? 
―Si, a mis amigos y por supuesto a Chloe y Skyler que están en el grupo de animadoras. ―Dije, mientras caminábamos hacía los lugares para ver el juego. Llegamos y nos sentamos― La rutina de las animadoras comenzó.
―Mira que bien baila Chloe. ―Dijo mientras sonreía por ver a su mejor amiga en el centro del campus.
―Si, lo hace excelente. ―Dije― ¡Ja! ¡Mira a Savannah! ―Me paré de mi asiento para gritarle un comentario constructivo a la rubia.
―¡Oye! ¡¿A eso le llamas bailar?! ―Ella me miró rápidamente y me fulminó con la mirada.
―No debes hacerla enojar, le saldrán arrugas. ―Bromeó Christofer y yo rompí en carcajadas. Un micrófono se escuchaba.
―Estudiantes de Oxford, bienvenidos sean todos al último partido de fútbol americano del semestre, este es un juego muy importante, para todos, ¡así que démosle un aplauso a nuestros jugadores! 
Mire hacía donde salían todos y vi a mis amigos junto a Zayn, que sonreía a mi dirección, no pude evitar sentir orgullo de mis amigos y mi novio. El juego empezó. Zayn se escabullo con el balón esquivando grandes cuerpos y así anotando un punto. Todo fueron gritos y ovaciones, ya que había sido una gran jugada. Él se giro y se paro justo frente donde me encontraba, sonrió ampliamente y me señalo tirándome un beso. Yo me quite mi chaqueta y deje ver el mensaje que traía esta "¡Let Zayn! I love you." Cuando la vio sonrió. La multitud se enloqueció y yo me enrojecí. El partido terminó, nuestro equipo, el local, gano por muchos puntos, todos los chicos habían hecho una anotación, así que estaban satisfechos por sus jugadas. Los chicos tuvieron que quedarse para hablar con el rector y alguien de una universidad o algo parecido. Me despedí de Christofer y subí a mi auto para dirigirme a casa, a mi deshabitada casa. Llegué y me quite los zapatos ¡estaba muerta! Preparé pasta para comer y me fui a ver algo de televisión, luego de unos minutos me quede dormida. 
Desperté porque algo hacía difícil mi respiración, abrí los ojos y ahí estaba Zayn, tan angelical, durmiendo encima de mi pecho, acaricié su mejilla y volví a cerrar los ojos. Sentía un cosquilleo en mi abdomen, que recorría mi pecho y cuello. Abrí los ojos y era Zayn que depositaba un camino de besos en mi cuerpo.
―Hola. ―Dije sonriendo.
― ¿Sabías que eres hermosa mientras duermes? ―Se acomodó en el sofá.
―No, no lo sabía. ―Reí― Jugaste muy bien hoy, ¡te felicito! ―Dije besando sus labios.
―Lo hice por ti, cuando levanté mi mirada y te vi tan sonriente, me puse feliz, eso me impulsó a correr más rápido y ser más ágil. ―Dio un pequeño suspiro― Y cuando vi lo que decía tu camisa, quería abandonar el partido e ir a comerte a besos. ―Me sonrojé.
―Pero, ahora no estás en el partido, tienes todo la libertad de comerme a besos. ―Se abalanzó suavemente sobre mi, capturó mis labios en un solo movimiento, los empezó a besar con lentitud pero a media del tiempo iban tomando mas velocidad. Se separó un poco de mí.
―Eres lo mejor que me ha pasado en la vida. ―Dijo, mirando fijo a mis ojos.
―Zayn, te amo, como a nadie en este mundo. ―Di un pequeño beso en su nariz.
―Faltan dos horas para la fiesta de Harry, ¿quieres ir a caminar?
―Me encantaría. ―Tome su mano y salimos por la puerta. Frente a nosotros venía un hombre hablando por su celular, Zayn se detuvo frente a este.
―Ella es mi novia, soy el hombre más feliz del mundo. ―El hombre lo miro extrañado y caminó más rápido.
― ¿Qué estás haciendo? ―Dije entre risas, la expresión del hombre me hizo carcajear.
―Le digo al mundo lo mucho que te amo. ―Sonrió.
―Si sigues así te tacharan de loco.
―No importa. ―Seguimos caminando y venía una pareja también tomadas de las manos.
―Él es mi novio, soy la persona más feliz del mundo. ―Me sonrieron, ellos si sabían qué era el amor.
—Cuando nos casemos y tengamos hijos, quiero que sea una niña y se llame... Scarlett. ―Dijo Zayn, con ternura. 
—Tendrá el color de mis ojos, y mi cabello, tendrá tus labios y tu bella sonrisa. ―Agregó.
—Será perfecta... pero, y si es niño, ¡quiero que se llamé como tú! ―Dije con una sonrisa.
Después de ahuyentar a varias personas con nuestras declaraciones de amor debíamos volver a casa, la fiesta de Harry se aproximaba. 
―Espera aquí, debo darme una ducha. ―Dije señalando el sofá.
― ¿Por qué no nos duchamos juntos? 
―Porque no. Te voy a poner una maratón de mi serie favorita. ―Presioné los botones para llegar al canal.
―A mi no me gusta "Two and a Half Men". ―Protestó.
―Entonces mira una película. ―Asintió, me marche de el living y subí a mi habitación, tome una ducha y me vestí, {http://www.polyvore.com/deception/set?id=66558866} alboroté mi cabello para terminar mi look "rebelde", baje las escaleras y tomé a Zayn de la mano para partir a la fiesta.
― ¿Tu auto o el mío? ―Preguntó.
― ¡El tuyo! ―Rió, ya que la respuesta era obvia, subimos al coche.
―Tus padres me pidieron que te cuidara, tal vez harías una locura.
― ¿Y lo vas a hacer? 
―Si, ese es mi deber, tus padres me lo pidieron y no puedo desobedecerles. ―Sonrió.
―Oh que responsable. ¡Eres un mentiroso! Solo quieres quedarte para... esas cosas. ―Dije incomoda, mientras mis mejillas se ponían de un color rojo.
― ¿Qué cosas? ―Se mordió su labio inferior.
― ¡Ya sabes!
―No, no sé, explícamelo.
― ¡Cállate! Ya llegamos. ―Bajamos del auto y me tomo de la mano. La casa de Harry estaba llena de gente que no conocía, algunos rostros familiares, las despampanantes animadoras, jugadores del equipo de fútbol americano, béisbol y baloncesto.
―Que bueno que vinieron. ―Dijo Liam, mientras nos abría paso hacía el patio de la casa.
―No me la perdería por nada. ―Dijo Zayn.
― ¡Ya están aquí! ―Dijo Harry, venía junto a Chloe y la sujetaba de la mano, mi boca se abrió, nunca pensé que este par llegarían a algo, era obvio que se gustaban pero Harry era demasiado lento para hablarle a la chica que le atraía.
― ¿Ustedes dos... están juntos? 
― ¡Si! ―Dijeron al unísono mientras juntaban sus labios en un armonioso y tierno beso.
― ¡Chloe! ¡Te mataré! ¿Por qué no me lo dijiste?
―Estábamos esperando el momento y el lugar. ―Añadió la castaña.
―Me alegro por ustedes. ―Abracé a ambos.
―Esperamos tener una relación como la suya. ―Dijo Harry, refiriéndose a Zayn y a mi.
―Creo que eso será imposible. ―Exclamó Zayn.
―Ok, vale intentarlo. ―Respondió Chloe.
― ¿Quieres bailar? ―Dijo alguien a mis espaldas, me giré y era Josh.
―Claro. ―Mire a Zayn, quien me miraba con cara de pocos amigos. Di un beso en su mejilla para que se tranquilizara. Las horas corrían, había bailado con todas las personas de la fiesta, menos con Zayn

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