Diariamente nos enfrentamos a un mundo contaminado de personas contaminadas donde cada uno de nosotros piensa en su propio bienestar, no nos importa la necesidad o el cuidado que requiera nuestro prójimo. Simplemente somos seres que pasamos la mayor parte de nuestras vidas en un mundo interno en el que todo encaje a la perfección. Pero si no somos capaces de hacer un mínimo esfuerzo por un ser humano, ¿Estamos dispuestos a dar la vida por aquello que llamamos planeta tierra?
Nosotros los seres humanos tenemos una ideología que a decir verdad, no está errada, si no que incompleta. Me refiero, a ese momento cuando nos referimos a la palabra hogar, nuestra mente enseguida refleja aquel lugar en el que habitamos con nuestras familias y compartimos momentos. Pero no somos capaces de decir que nuestro hogar es el planeta tierra. Gracias a él vivimos, comemos, respiramos, tenemos casas, es decir nuestro llamado primer hogar es la tierra. Y aun así obviando todo esto, vemos como día a día nuestro mundo se va acabando por nuestras malas decisiones. "Vivimos en la tierra como si tuviéramos otra a la que ir.-Terry Swearingen" El autor de la frase anterior posee total razón, parece que aún no somos conscientes de que toda acción tiene una reacción. Tal o tales acciones por buenas o malas más adelante traerán beneficios o deterioro
Cabe resaltar que no todas las personas tienen los mismos criterios de pensamientos. Existen personas que aman la vida, y que aman el lugar donde la viven. Estos son ese tipo de seres que luchan y defienden lo que aman, por ende ellos mismos saben que si en un grupo de 5 personas al menos 1 piensa diferente, pues lógicamente ya entra la controversia, y es allí donde uno puede armarse de valor y defender sus ideales sin recibir algo a cambio. Este es el caso de los ecologistas, las organizaciones ambientales, las personas que realizan marchas o campañas en contra de la contaminación, tala de árboles, quema de basuras, entre otro tipo de acciones que de un modo u otro nos perjudica a todos. Son entidades que luchan y velan por un mundo mejor, donde a cambio de su esfuerzo esperan que los ciudadanos tomen conciencia, si es posible unirse a ellos y así trabajar en equipo para velar por nuestro mundo.
Tal es el caso de "Greenpeace internacional" fundada en 1971 con el objetivo de identificar qué acciones humanas pueden afectar el equilibrio ecológico, y así llevar adelante campañas en defensa del ambiente. Otras organizaciones que aunque poseen distintos nombres, tienen en común "Proteger nuestro planeta, animales, ecosistemas" tales organizaciones son "earth action" "amigos de la tierra" "Fondo mundial para la naturaleza (WWF)" "Programa de las naciones unidas para el medio ambiente (PNUMA) entre otras, que aunque sean reconocidas o no, sus aportes marcan la diferencia. Actualmente existen más de 500 entidades a favor del ambiente alrededor del mundo, en la que cada integrante, deposita parte de su tiempo al medio, generando conciencia que nuestro planeta solo puede ser mejor, si la manera en la que lo vivimos es la adecuada.
Todas aquellas organizaciones e ideas revolucionarias a favor de nuestro planeta tierra tuvo su origen El 22 de abril de 1970 cuando 20 millones de norteamericanos tomaron las calles, los parques y los auditorios para manifestarse por un ambiente saludable y sustentable. El Día de la Tierra de 1970 logró una coincidencia política que parecía imposible. Se logró el apoyo de políticos de distintas tendencias, ricos y pobres, citadinos y granjeros, magnates y líderes sindicales. Ese día condujo a la creación de la Agencia de Protección al Medio Ambiente de Estados Unidos y a la aprobación de leyes relacionadas con el aire limpio, el agua limpia y la conservación de especies en peligro de extinción. A partir de entonces, cada año en esta fecha, el mundo entero reflexiona y se moviliza por una Tierra mejor.
En Fin, somos seres carentes de razón y por ende somos conscientes de que acciones son buenas o malas, si catalogamos el momento de arrojar algún empaque de x producto al suelo como normal, entonces deberíamos prepararnos para la futura reacción del planeta. Si de verdad queremos un mundo mejor, hay que empezar primero por cambiar nuestro modo de pensar y actuar. Para luego proseguir con lo que sería ahorrar agua, plantar árboles, conservar energía, utilizar bolsas de papel o de tela, etc. Son acciones que aunque no nos implica un gran esfuerzo realizar, algunas veces preferimos pasarlas por alto.