No se si a ustedes les pasa pero mientras mas leen sobre chicos perfectos se dan cuenta de que los reales no las merecen. ¿Egocéntrico? Tal vez. Pero si ustedes están de acuerdo en que seria lindo tener al chico perfecto esta historia es suya, en es...
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Traducción Imagen: Chicos que sonríen cuando ustedes dos hacen contacto visual.
Estoy sentada en la clase de matemáticas, materia que claramente no se me da bien desde que deje de ver las tablas de multiplicar, la voz de la maestra es completamente tediosa , aveces pienso que me concentro mas en como habla que en lo que me esta diciendo, álgebra te maldigo una vez mas.
La clase se encontraba aburrida igual que cualquier otro día, excepto que algo me hacia sentir...no se...extraña mire a mi al rededor, hasta que me di cuenta de dos hermosos ojos que brillaban tanto que los podrías ver a dos mil kilómetros de distancia estaban posados en mi, eran como dos hermosos faros guiando a aquel barco que se había perdido en el mar de...en esta ocasión de números y letras. Al parecer ninguno de los dos teníamos la intención de quitar la mirada así que los dos terminamos por escanearnos el uno al otro varias veces, aquellos labios carnosos eran perfectos, su cabello se encontraba completamente despeinado como si se hubiera pasado la mano por este varias veces, su cejas eran perfectas ni muy pobladas ni poco, eran justo como me gustan,tenia aquella marcada mandíbula, el hombre estaba como quería y ni de hablar de su cuerpo era difícil apartar la mirada de este, se notaba que por sus marcados brazos que por cierto me moría por tocar y morder, que iba seguido al gimnasio, tan distraída estaba que me sorprendí a mi misma mordiendo mi labio sin piedad y sin un poco de pudor, me traía completamente encantada y ni hablar de su actitud, era la típica de un chico seguro de si mismo, irradiaba seguridad , incluso tenia ese ligero toque de chico malo que a toda mujer encanta.
— Señorita (T/N) . ¡¿Podría poner atención?! Sino la puerta esta abierta — la voz de la profesora me atrapo por sorpresa, e inmediato mis cachetes se tiñeron de rojo, mas no quite la mirada de aquel chico perfecto, en el que pude ver como su sonrisa iba creciendo hasta casi llegar a sus ojos , para luego guiñarme el ojo.
Mire a la profesora.
— Perdone...no volverá a pasar .
— Eso espero...
Comencé a ver el pizarrón, aunque de vez en cuando veía de reojo a el chico con ojos de faro, que seguía sin dejar de mirarme, tanto como aquella sonrisa que no se borro ni un segundo de la clase.
Así es como aquel chico perfecto se gano mi corazón, la mirada es lo mas importante de una persona y aun mas importante cuando este es incapaz de retirarla...
Bueno si alguien lee esto, gracias por darle una oportunidad a esto, prometo que la siguiente sera mejor, este es solo el comienzo, así que estoy lista para escuchar, sino se sienten cómodas diciendo sus problemas con chicos a todo el mundo pueden mandar un mensaje privado y estaré ahí lista para escuchar y dar un consejo.
