🔹T A R E A🔹

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    Bufaba mientras en su otra manos estaba su lápiz para escribir cualquier idea que consiguiera de internet. Quería pensar que estaba aburrido pero no, estaba nervioso por encontrarse en la casa de Tyler, sólos. ¿Por qué? Porque a la profesora se le ocurrió la grata idea de hacer pareja de trabajo a esos dos que eran conocidos por odiarse. Pero para Tyler fue una suerte. Una que estaba de su lado.

—Termine—mencionó el mayor de los dos con una sonrisa.

Liam rodó los ojos al verlo como un niño pequeño por hacer algo bien. Era tierno cuando quería y en este momento lo era.

—Que bien—volvió a su trabajo. Cada uno hacia su parte y aunque el mayor tenia la parte más difícil le fue sencillo terminarlo.

Maldito genio. Pensó el menor mientras veía el enorme libro que tenían que leer y hacer un breve ensayo que no le costaba, pero en esto no se le formulaba ninguna idea.

—Al parecer tienes problemas—esa sonrisa de superioridad le ganó.

—¡No tengo problemas!

—¡Shh! No me grites en mi propia casa, además pedir ayuda no es malo, creeme, últimamente lo hago mucho—pedir ayuda a la profesora fue lo mejor que se le ocurrió, ahora tenia a Liam con él, aunque sea en pareja de trabajo.

—Yo no pido ayuda.

—Con razón—rodó los ojos cruzándose de brazos.

—¡Ya me harte!—se levanto de la silla para tomar sus cosas.

—¿A donde vas?—Tyler se levanto para detenerlo.

—A mi casa, no soporto estar cerca de ti—lo encaro mirando esos ojos que lo enloquecía.

Se quedo un tiempo así y se molesto consigo mismo por sentir aquello por Tyler. Sabia que el mayor lo odiaba y una posibilidad de estar con él era cero como la suma de todas las fuerzas. Cero. Por esa razón trataba así a Tyler que por el momento no lo había ofendido con gravedad.

Tyler se sentía mal por esas palabras. Lo único que quería era estar con Liam y que ambos dudaran juntos hasta que la llama de la vida se apagara.

—¿Por qué? ¿Por qué no soportas estar cerca de mi? ¿Tanto me odias?—la tristeza era notable en Tyler que hizo tragar saliva a Liam.

Ver al siempre fuerte y animado Tyler de esa forma tan vulnerable hacia relucir su parte que menos quería.

—Yo no te odio, es sólo...—su cara se puso roja y bajo la cabeza. El nerviosismo lo empezó adueñar.

—¿Sólo?—miro a otro lado.

—...Me gustas...—esas palabras salieron de sus labios sin pensarla.

Miro con miedo a Tyler. Nunca fue bueno poniendo un filtro entre su cabeza y boca y por eso algunas veces lo ponían en situaciones problemáticas.

—¡O sea! Yo, si me gustas, pero se que tu no sientes nada y por eso te trato de esa manera—dio un suspiro—. No soy muy bueno diciendo mis emociones o como reaccionar, así que eso era la única forma de convencerme a mi mismo que no sentía nada por ti—se mordió el labio a no ver ninguna expresión en la cara de Tyler.

Otra de las razones es que todos decían que Tyler era homofóbico y quizás ahora lo estaba confirmando.

—Creo que debo irme—se soltó del mayor para ir a la puerta de la habitación, pero unos brazos lo rodearon.

—¿Por qué se te hace pensar que yo no siento nada por ti?—se estremeció al escucharlo en su oído.

—Porque todos dicen de ti que eres homofóbico—la risa del mayor le hizo sentir un cosquilleo.

—No lo soy, se equivocaron y la verdad es que siento algo por cierto chico que tengo en mis brazos o ¿Crees que esto del trabajo fue al azar?—se giro al escuchar eso.

—¿Qué? 

—La profesora sabe muy bien que no podemos estar juntos en un mismo lugar, pero yo la convencí de que hiciéramos el trabajo juntos, aunque claro, también la soborne con chocolate y acepto de inmediato— Liam se puso a reír. La profesora que Tyler hablaba , se podría decir que era de un carácter fuerte y casi amargada, pero solo era una mujer blanda con una severa obsesión con el chocolate.

—¿Entonces esto es un plan tuyo? No me lo esperaba, pero eso es jugar sucio, algo que no va en ti ¿Quién te ayudo?—Tyler miro a otro lado. LIam podía leerlo como un libro abierto—. Lo tengo, fue esa amiga tuya que le falta tornillos al puente ¿No?

—Si, fue ella.

—Que amiga—un corto beso en sus labios le hizo mantener la boca cerrada.

—Pero esa amiga ayudo que estemos en esta situación—Liam sonrió como un tonto.

—¿Quieres ser mi novio?—se le había escapado. Cuando se dio cuenta ya no había vuelta atrás, aunque digamos que no quería devolverse y volver como era antes.

—Claro que si, aunque te lo iba a pedir yo, después de todo yo voy a mandar en esta relación—Liam rió ante lo dicho.

—Oh no, tu no mandaras, seré yo y espero que estés preparado—un beso de Tyler lo dejo sin aliento dejando entender que él quería mandar—. E-Esta bien, tu seras el activo.

—Como supuse y ahora hay que terminar un trabajo—arrastro al menor hacia el escritorio.

Siguieron haciendo el trabajo, pero digamos que los besos sobraban ahí, sin embargo, ya no se odiaban, no, porque nunca fue así. Se amaban hasta odiarse.

Entre El Amor Y El Odio [Yaoi/Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora