Quédate

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Su voz se rompe al momento de si quiera pronunciar las palabras, su cuerpo tiembla al sentir como se aleja lentamente sin mirarlo, sus ojos arden y amenazan con dejar caer lágrimas que parecieran esperar el quiebre, débilmente trata de elevar sus manos hasta él pero resulta inútil, las ropas resbalan entre sus dedos y las palabras se desvanecen en suspiros melancólicos, no tiene el valor de decirlo, una vez más dejará que se vaya. Duele cada vez más y no esta seguro de soportarlo nuevamente, quiere gritar, desgarrar su garganta y decirle que se detenga, que lo espere, que no lo olvide y que lo lleve con él pero los pasos de Jonghyun siguen, alejándose lentamente, separándose de Minhyun.

Se siente como una pesadilla que se repite noche tras noche, únicamente cuando se encuentra solo y vulnerable, cuando nadie puede notar sus lágrimas y sus ganas de derrumbarse; se enconde en algún rincón de aquel dormitorio tan ajeno y extraño, mira su cama desde la puerta, las imagenes vuelan a su mente antes de que él lo reprima, el aroma, la textura de la piel, la calidez, cada movimiento lo tiene grabado en el cuerpo, cierra los ojos, pensando en él nuevamente. Jonghyun invade cada rincón de sus pensamientos, su voz, su tacto, todo. No sabe a dónde han ido los demás, no tiene la fuerza de preguntar o averiguarlo, piensa que tal vez han salido; detiene su mirada en su teléfono, abandonado en la cama, se deja caer en el suelo, rendido, lo toma y aprieta contra su pecho.

Debería hacerlo, quiere hacerlo pero su valentía decae en cuanto llama y escucha su voz.

"¿Minhyun? ¿Estas bien?"

No lo esta, no sabe como explicarle a Jonghyun que esta muriéndose por dentro, extrañandolo tanto que es cuestión de tiempo para que todo en él se desmorone. Esta tan mal que rompe en sollozos, no importa cuanto lo intente, no pararán, es imposible porque ha sido mucho tiempo aunque no lo parezca y quiere verlo, quiere tenerlo cerca, lo quiere cada vez más y más, y no sabe como explicarlo.

La acompasada respiración le hace compañía a sus desesperados sollozos, a su desenfrenado llanto, aunque no diga nada él sigue ahí, Jonghyun nunca lo dejaría en un momento así, Minhyun sigue hasta que cree ha perdido la voz, su garganta arde, sus ojos estan hinchados, sus manos tiemblan, debería ser suficiente, debería parar pero no puede.

Escucha la puerta abrirse y se levanta tan rápido que ha logrado marearse y dar un traspié, manos ajenas lo sujetan, Minhyun levanta su mirada, abre su boca para hablar, respirar o suspirar, tal vez todo a la vez; sus manos se sujetan lo mejor que pueden, palpando con temor, pareciera que su mente le juega una cruel broma porque lo único que sus ojos perciben es el rostro sereno de Jonghyun, le hace falta color a su rostro, las ojeras parecieran recién haberse marchado. Minhyun no quiere apartar su mirada, aunque sea una ilusión quiere verlo, quiere tocarlo, quiere pensar que es real y que no se irá.

-Minhyun- el murmullo de su voz es el mismo, la forma en la que lo sujeta para que no caiga, las lágrimas vuelven a recorrer el rostro de Minhyun, por fin esta ahí.

Se aferra a Jonghyun lo más que puede, entre lágrimas y sollozos, se tiran en la cama con movimientos torpes, el mayor deja que Minhyun esconda su rostro en su cuello, acaricia su cabello con suavidad, tiene miedo, la idea de no poder detener el llanto de Minhyun le aterra. El reloj hace su trabajo, recordandoles en cada segundo que tendrán que separarse y aunque son conscientes de ello, lo ignoran. Las cálidas manos de Jonghyun han tomado confianza, una de ellas acaricia la nuca de Minhyun mientras la otra se pierde en sus caderas, al suspirar su aliento se corta no va a llorar, no debe, Minhyun lo necesita y no puede mostrarle cuanto duele, cuanto lo extraña durante las mañanas. No puede decirle a Minhyun que por las mañanas aun espera que sea él el que lo despierte porque nunca lo hizo, no puede decirle que mientras comen siguen dejando su plato en la mesa, no puede decirle que mientras práctica logra ver su reflejo, no puede decir que cuando ríe con los chicos gira su rostro a la izquierda porque piensa que estará ahí, no puede decirle que por las noches sigue esperando que llegue a dormir. Cierra sus ojos con fuerza y aprieta su agarre sobre Minhyun, quiere robarlo, quiere tenerlo y no dejar que nadie lo tome de nuevo, quiere huir de ese lugar, retroceder el tiempo o hacerlo ir más rápido. No quiere separarse de él. Y en ese momento es cuando se da cuenta que tiene que irse, si se queda solo se lastimarán más y el tiempo no esta a su favor.

Siente como Minhyun se ha tranquilizado y piensa que estará bien, quiere que al menos él se encuentre bien. Se levanta con esfuerzo y Minhyun aún sobre él, pareciera un niño durmiendo, su niño. Jonghyun sonríe y lo abraza, estrechandolo contra sí, lo quiere y por eso debe irse mientras la calma ha regresado, él en cambio no podrá regresar, las agendas, los programas, las personas, todo se entrometerá en sus caminos hasta que llegue el verdadero día donde esten juntos. Jonghyun mira el rostro de Minhyun y sin poder evitarlo se acerca, cierra sus ojos, acercándose hasta dejar un suave beso en sus labios; el aire se le escapa al separarse y sabe que le hará daño uno más, pero Jonghyun comprende que es un masoquista por completo así que le da otro beso un poco más duradero, le gustaría que Minhyun estuviera despierto para corresponderle sin embargo ya ha tomado muchos riesgos. Con una última sonrisa deja a Minhyun dormido sobre su cama, se levanta y lo ve, acaricia su cabello delicadamente con una sonrisa en el rostro. Ahoga un suspiro y se dirige a la puerta, se gira para mirarlo otra vez, convenciendose que será la última vez hasta que el tiempo termine. Se va, cerrando la puerta, sigiloso de la misma manera en la que llegó.

Minhyun se muerde el labio con fuerza, enterrando su rostro en la almohada dejando que mueran en ella, suprimiendo cualquier sonido porque sabe que Jonghyun aún podría escucharlo; tiene que dejarlo ir, tiene que soportar y mantenerse fuerte.

"Quédate, por favor quédate"

Palabras que no ha logrado decir le oprimen el pecho y golpean su garganta, se aleja de la almohada, solloza tan fuerte que se cubre la boca con las manos y cierra sus ojos con fuerza, encogiéndose. No puede, simplemente no puede.

Se levanta de golpe y abre la puerta de la habitación, corre en dirección a la puerta principal, él aún sigue ahí a punto de abrirla. Minhyun lo ve y se congela, sus palabras se encajan en su garganta, no puede hablar, la desesperación va desde su estómago hasta los labios, no quiere sollozar pero termina haciéndolo y aunque Jonghyun lo escucha, no lo mira; debe irse, ambos lo saben, lo entienden pero sus cuerpos no pueden dejarse ir tan fácilmente.

Quieren dejar de aferrarse al otro, resulta tan inútil, doloroso... sería mejor.

Sin embargo, en ocaciones lo mejor no es lo que te hace feliz.

Jonghyun se decide y abre la puerta, Minhyun reacciona y corre hacia él, le toma del brazo con la misma fuerza que su pecho se comprime.

-Jonghyun- su voz suena cansada, destrozada, el mayor lo nota y le lastima, por lo que trata de alejarlo.

-Jonghyun, solo hoy... por favor, solo esta vez, quédate... por favor, quédate conmigo- han pasado por tanto, antes, ahora y probablemente en el futuro, por todos aquellos recuerdos, por ese momento y por los que esperan ansiosamente, Jonghyun suelta la perilla de la puerta y jala a Minhyun hacia él, abrazandolo, llorando con él, estando a su lado.

-Solo por hoy- aun si fuera solo un momento, un segundo más, Minhyun se alegra de tenerlo, de abrazarlo y besarlo, aunque la separación solo se haya aplazado, no importa, en ese instante ya nada le importa.

Quédate, solo quédate un poco más. Es lo único que no me siento capaz de pedir.

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... Si alguien lo pregunta, creo que voy a seguir así hasta que Nu'est vuelva a estar todos juntos, lo siento pero mis sentimientos son un desastre

Si llegaste hasta aquí... ¿estas bien? ¿te gustó? Espero que si, yo lloré... en serio sigo mal, bueno, hasta el próximo, bye bye~ ♥♥

Momentos de debilidad [NU'EST]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora