Narra Liam:
-Escuché que hablabas con alguien la otra noche.-
-Con Logan.- Me respondió rápidamente mirando por la carretera.
-¿Ah sí? ¿Y qué quería?- Pregunté.
-Solo saber cómo estaba y que si cuando regresaría.-
-¿Regresar? ¿Tan rápido?- Ella sólo miró sus piernas.- ¿Qué sucede?-
-Nada.- Me sonrió- Solo que todo esto es nuevo para mí.-
-Ya te acostumbrarás.- Seguí conduciendo.- Vamos a cenar.-
-¿Cenar?-
-Sí, solos tu y yo, por eso te pedí que te visiteras formal.- Sonreí.
-Señor Payne.- Exclamó un tipo de no más de cuarenta años.- Lo estábamos esperando.-
-Gracias Jeremy.-Dije y lo seguimos.
-Esperen un poco, iré a ver si está listo.-
-Aquí esperamos.-
-Jeremy me agrada.- Dijo ella riendo, Jeremy era gay.
-¡Liam! ¡Por acá!- Gritó una chica rubia con un vestido demasiado pequeño para ella, mientras se acercaba.
-¿Quién es?-
-Es la conductora del programa ¿Recuerdas?- Respondí.- Hola Rachel.- Dije cuando ella llegó.
-No esperaba encontrarte por aquí.- Puso su mano en mi hombro.
-Sí, yo tampoco.- Sonreí.
-Oh, veo que no mentías con respecto a la actriz.- Dijo mirando a (tn) _______.-Y yo diciendo que salía con Tom, discúlpenme.-
-No te preocupes.- Dijo intentando sonreír.
-Sí, ten por seguro que entre ella y Tom no hay nada.- Dije algo molesto. Que hablaran de él no me hacía muy feliz.
-Señor Payne, ya pueden tomar su mesa.- Llegó Jeremy.
-Pues yo me voy, un gusto.- Se despidió con un beso en la mejilla.-Adiós.- Se fue.
-Oh que linda.- Dijo (tn)______ sarcásticamente tallándose la mejilla, Rachel había dejado labial en ella.
-Ven.- Dije entre risas, la tomé de la mano y salimos hacia un balcón donde sólo había una mesa para dos. Ella sólo miró asombrada.- ¿Te gusta?-
-Me encanta.-
-¿Puedo preguntarte algo?- Me dijo cuando llegamos a mi casa en Londres.
-Lo que quieras.- Dije entrando con las maletas.
-Emm.- Ella dudó.
-¿Te sientes mal?- La tomé de la cintura y ella negó con la cabeza.-Ponte cómoda, esta es tu casa.-
-Es acogedora.- Miró alrededor.
-¿Me preguntarás?-
-No era nada.- Trató de sonreír.
-Pues no lo parece.- Puse mis manos en su rostro obligándola a mirarme.- Dime.-
-Nada.-Insistió.
-¿Tiene que ver con Tom?-
-¿Por qué todo tiene que ver con él?- Quitó mis manos de sus mejillas y caminó a la sala.
-Últimamente todo es por el.- La seguí.
-No, no es así.-
-Si no lo fuera no te molestarías.-
-¿Quieres discutir?- Me preguntó molesta.