-gracias, la verdad me han salvado...- aquello fue lo primero que les dijo Kagami apenas entró al vehículo.
Kise había ido a la estación de policías por Aomine, despues de una larguísima jornada laboral y cuando iban rumbo a su casa, Kagami le había dicho a Daiki, pasaran por el a la estación de bomberos.
Rara vez Taiga se atrevía a pedir un favor así. Pero era más de la una de la madrugada, estaba lloviendo como si no hubiera mañana y tenía más de 36 horas trabajando y la verdad, no podía ya ni caminar de tan cansado que estaba.
-Kagamicchi... te voy a cobrar tarifa doble por hacerme regresar medio pueblo por ti...- Ryota bufo con un puchero pero continuó manejando.
-lo siento... solo quise aprovechar que Aomine y yo tuvimos el mismo horario de salida... lo compensare, lo prometo-
Los tres continuaron en el vehículo rumbo a la casa de la pareja. No era la primera vez que Taiga y Daiki tenían horarios similares y la casa de ellos quedaba mucho más cerca que la de Taiga, así que le permitirían descansar un par de horas, para el día siguiente, volver a la estación.
Así que, como el tiempo es oro, Taiga se acomodó en la parte trasera del auto, puso la chamarra y la mochila a manera de almohada y se dispuso a dormir el trayecto camino a la casa de sus amigos.
Unos ruidos comenzaron a sacarlo lentamente de la somnolencia... el carro se había detenido y aunque Taiga no había abierto los ojos, supo que en la parte de enfrente, Aomine y Kise aún estaban ahí.
-sshhh... baja la voz lo vas a despertar...- había susurrado Aomine, mientras unos ruidos como... de... chupeteo inundaban el pequeño espacio que era el vehículo.
-es que... ¡mggh! Ya me quiero correr...- ante esto, el corazón de Taiga se paró... y no solo el corazón... pero su cuerpo había reaccionado por si solo ante los ruidos, los jadeos, el olor...era normal que dos hombres jóvenes, que eran pareja, tuvieran sexo... que se dieran una mamada rápida en el auto, que estaba apagado a saber dónde... ¡pero no con el ahí!
Taiga contuvo la respiración y fingió seguir durmiendo... sería imposible hacerlo porque la curiosidad y el morbo le estaba ganando... se podía escuchar perfectamente como Aomine se la estaba chupando a Kise... y Kise... y Kise...
O Shit... estaba conociendo una parte de Kise que nunca había imaginado conocer... jadeaba y gritaba fuerte aunque se suponía que debía quedarse callado... respiraba rápido, siseaba e incluso se removía en el asiento desesperado.
Y... a Taiga se le hizo agua la boca de tan solo imaginar cómo sería la cara orgásmica del rubio...
-vamos dentro... quiero que lamas mi culo...- susurro suplicante Ryota, sujetando la cara de su pareja para separarlo de su pene, pues Daiki no le soltaba, como si pensara que era una piruleta.
Finalmente Aomine se había incorporado y limpiándose con el dorso de la mano, asintió a la petición del rubio.
El estúpido miembro de Taiga estaba bien firme y anotando la petición que Kise había realizado... el también quería... pero sabiendo que uno no se debía meter donde no le llamaran, opto por fingir que seguía durmiendo.
Sus dos amigos bajaron del auto y Taiga pensó que correrían directito al interior de su casa y se encerrarían en su habitación para coger como conejos... ok. Taiga podría sobrevivir a dormir una noche en un auto... era cómodo, estaba calientito y aunque no podría cambiarse de posición, lo podría aguantar.
Pero los planes de la pareja fueron otros.
La puerta que daba directamente a su cabeza se abrió y unos brazos rodearon su cabeza, incluso una mano ya se estaba colando en su playera y estaba tocando su pezón.