Estás Para Olvidarte Y Nada Más...

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-Elisa...¡Elisa! Despierta o se te hará tarde, ya son las 6:50 y entras a las 8- me dice mi madre un tanto enojada.

-¡Nunca llego tarde! y no lo haré hoy- digo asustada y cansada mientras me levanto de un salto.

Comencé a correr en busca de mi ropa y todas las cosas que necesitaba para las clases de hoy, mientras mi madre me observaba correr para todas partes, hasta que decidió moverse de la puerta para decirme que el desayuno me lo guardaría para que me lo llevara.
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Después de una hora mi madre me dejó en mi escuela, llegué 10 minutos antes, para mí esto era tarde ya que siempre llego 45 minutos antes para disfrutar de la tranquilidad, era gigante la escuela pero no era la gran cosa, iban muchos chicos de mi edad o unos cuantos años más, por cierto tengo 16 años, pocos años me han dicho algunos pero estos dos años se han hecho eternos...

-Hola Elisa- me dice una chica con una sonrisa amigable, a lo cual solo le respondí con un gesto, me coloqué solo un audífono el otro lo dejé colgando, para poder escuchar a la chica.

-Disculpa tal vez no me recuerdes, soy la clase de música y biología mi nombre es Ve...- fue interrumpida por el timbre para ir a las clases y como nos tocaba biología juntas se quedó conmigo y me acompañó a las clases.

-Te llamas Venus ¿No?, si te recuerdo, un gusto, disculpa si no hablo mucho, no me gusta hablar- dije desinteresada antes de entrar a la clase, coloqué mi mochila en dónde me siento todos los años, en el último lugar de una esquina de la sala, con una vista perfecta al patio, lo cual me mantenía bastante tranquila cuando me sentía triste, cosa que desde mis 15 años ya era normal.
Venus se sentaba al lado de la puerta, de las primeras, solo he hablado con ella 2 veces y por lo que sé es bastante tranquila y se veía que era amigable ya que tenía bastantes amigos, pero yo no era uno de ellos.
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Al terminar la clase fui a dejar mis cosas al casillero y saque lo que me tocaba después en mi mochila, es raro ver a alguien con mochila bueno hasta ahora soy la única que lleva una a todas partes, siempre la he llevado.Me hacían bullying en mi antigua escuela, decían que era rara y me llamaban idiota y un montón de cosas, hablaban mal de mi, incluso me golpearon y una vez que llevaba una mochila llena de libros les pude pegar y huir gracias a mi amada mochila, por eso siempre la llevo.

Me dirigí a la sala de la siguiente clase me tocaba literatura una de mis clases favoritas, junto con música, arte, teatro, francés, y muchas más, las que no me gustaban del todo eran inglés y física, todas las demás me resultaban interesantes y mucho más fáciles para mi.

Cuando entré a la sala de literatura algo me llamó la atención, pude ver que había alguien mas ahí, fue algo extraño ya que siempre soy la única que se adelanta a estar en las salas para estar sola. Esta persona me miró, era un muchacho de unos 17 años, algunas de las clases se juntaban con chicos y chicas de otras edades como literatura y música.

-Disculpa, pensé que no vendría nadie- me dijo el chico, mientras se colocaba el gorro de su sudadera y se escondía, lo único que se le veía eran sus dos grandes y hermosos ojos de un color marrón muy oscuros, tenía una mirada profunda, me sonroje al pensar eso y me fui a sentar donde siempre, el chico se levantó de su lugar y se paró en el pasillo al lado de mi mesa.

-Me puedo sentar contigo, está bien si no quieres, es que fui el único de mi edad de los que conozco que decidió estar en esta clase opcional y no conozco a nadie- dijo un tanto nervioso y sonrojado, le pude ver su rostro, era guapo y tenía una mirada dulce, usaba unos anteojos que le quedaban muy bien, tenía buen gusto musical o eso creí al ver lo que tenía en su mochila, llevaba un parche de TØP, una chapita de Gorillaz y tenía otro parche que no era de ninguna banda era un cuchillo con sangre, era bastante genial, era alto y muy lindo. ¡¿En qué estás pensando Elisa?!

-Claro- le contesté un poco sonrojada pero con una dulce sonrisa. ¡¿Por qué siento algo extraño en mi estómago?! Jamás me había pasado esto y menos con un chico.

-Gracias... por cierto mi nombre Evan ¿Y el tuyo es?- me miró nervioso, parece que tampoco era de entablar una conversación, ni de tener muchos amigos. Extraño su compañía, la compañía que me hacía hasta que esta...

-¿Estás bien?- me dijo tocando mi mejilla, ahí fue cuando me di cuenta que estaba llorando, el me secó mi lágrima y se sonrojo pero a pesar de eso aún me miraba preocupado.

-Si, disculpa solo recordé algo- me sequé las pocas  lágrimas que quedaban, pero cuando me iba a dar la vuelta hacia la ventana y a colocarme los audífonos, Evan me tomó de la mano para detenerme, me sonrojé y miré su mano a lo cual él se sonroja y me suelta.

-¿Q-que pasa?-le pregunto muy nerviosa.

-Solo que me preocupa el que te hayas puesto a llorar de la nada, ¿Te pasó algo?- me dice con una mirada dulce y tranquila.

-No, solo que recordé algo que pasó hace un tiempo- le digo antes de mirar a otra parte, haciendo que la conversación se terminara de una manera incomoda.
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Después de un largo día he llegado a mi casa, después tengo que ir al trabajo por lo cual era más largo el día. Cuando abrí la puerta me topé con una carta, lo más extraño es que decía de tú sabrás quien al voltearla. La abrí muy nerviosa y asustada, cómo podría ser de quién creó si está persona ya no está, esto tal vez sea un mal sueño, pero no lo creo, esto no se veía como uno.

Estoy bien,no creas lo que los oficiales dijeron...
Te extraño ya me volverás a ver y reiremos como antes.
De: tu ya sabes quien
Pd: no le digas a nadie sobre esta carta o todo cambiará.

Leí la carta y pensé ¿Que clase de broma es esta? Me molesté por la carta, tal vez era de quien yo creía o solo me seguían molestando los chicos de acá, yo solo quería olvidar lo sucedido y ellos me entraban arruinando todo.

Decidí dejar mis cosas en el sofá e ir a buscar algo para comer, así dejaría de pensar en la carta y... tal vez en el chico que conocí hoy, es simpático y muy gracioso, tal vez logre entablar una amistad con él, después de todo necesito a alguien a mi lado.

Hola! Jeje espero que no se aburran con el inicio no sabía muy bien como comenzar pero el siguiente capítulo será más interesante que este y mucho más largo ya que este es demasiado corto para lo que suelo escribir, espero que os guste, voten y comenten, si tienen sugerencias sobre la historia las leeré y las consideraré.

Besos y que tengan un gran día 😊.