¿Llegamos realmente a terminar algo en la vida?
Nos vemos constantemente creando y destruyendo, mejorando y retocando. Seres insatisfechos que agregan cosas llenando un mundo creyendo llenar su propio vacío y así llamar a ese vicio su razón de ser. La satisfacción propia es el fin de nuestro actuar; sólo el interés nos mueve.
Querés realizarte y el tiempo no te comparte su eternidad.
Siempre mejorandonos, retocandonos; nunca listos.
El tiempo corre, se te escapa.
Falta poco, ya casi terminas.
Pedís segundos,
horas,
años...
El tiempo tiene su propio plan.
Siempre te falta poco o tuviste poco; para la Eternidad ya estás listo.
¿Te terminaste?