No me mires así

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Narra Alice
Llevo una semana y media en este hospital, no es demasiado agradable sentirte como una rata de laboratorio, estoy todo el día en la habitación y de un sitio a otro para que me hagan las pruebas.
Sin embargo por las noches es distinto, hace días pedí a mis padres dormir sola para que así ellos pudiesen dormir en casa ya que a ambos se le acabo la excedencia del trabajo y deben ir a trabajar.
En las noches voy una habitación que está a unos pasillos de la mía, ahí converso hasta el amanecer con un chico que se llama Aaron, lleva ahí mucho tiempo.
Solo se que lleva varios años luchando contra el cáncer y en los últimos meses empeoró y volvió a ser ingresado, hablamos de temas muy randoms, pero al menos me distraigo un poco mientras salgo de aquí.
Ayer en la mañana recibí una llamada de mi amiga, estaba preocupada ya que no fui a clases estos días, le dije que estaba resfriada.
-¿Cuándo saldrás de aquí? -pregunté a Aaron.
-Jum, no se ya que me acostumbre a la cama me daría pena irme -bromeó.
Y ambos reímos como tontos, a pesar de que solo lo conozcon de una semana me siento genial cuando estoy con él, es como hablar conmigo misma, me agrada mucho.
Y siento que el también se la pasa genial.

Ya hace dos semanas que estoy aquí, los médicos empiezan a descartar algunas enfermedades, pero todo va muy lento ya que el hospital está muy lleno y falta personal.
Los días se pasan más rápidos en compañía de Aaron, aunque aveces ninguno se encuentra demasiado bien, él por los efectos secundarios de la fuerte quimioterapia que recibe y yo bueno, no se el porque.

Siento una fuerte presión en el pecho y me cuenta respirar y de repente no siento mi cuerpo.

*Una hora después*
-¿Cómo te encuentras? -pregunta un doctor joven.
-¿Qué fue ahora?
-Aún estamos investigándolo - dice mientras sonríe triste.

Narra Karen
Siento una gran tristeza al saber que en cualquier momento uno de esos ataques pueda dañarla aún más, los médicos aún no saben que sucede y hace dos semanas que está aquí.
Desde la sala de espera oigo a mi marido riñendo a los doctores.
-¿Cómo es posible que aún no sepan lo que le pasa a mi pequeña?, ¿qué clase de médicos son?- dice roto.
Mi teléfono suena son varios mensajes de la mejor amiga de Alice.
-Hey Karen soy Laia, como va Alice con el resfriado? Es que ella no responde mis mensajes.
-Creo que Alice no te contó, lleva dos semanas en el hospital, los médicos aún no saben que tiene, deberían visitarla para que se anime - respondo enseguida.

Espero que esté también les guste, a pesar de que no sea muy feliz
.

Mi segunda oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora