Cliché

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Alejándose por el bosque, Ron, Harry y Hermione, buscaban a Fred, George y a Ginny, quienes debían haberse alejado durante el pequeño intercambio de palabras con Malfoy.

Harry miró de soslayo a Hermione y recordó lo antes dicho por la serpiente:
"— ¿No sería mejor que echaran a correr? no les gustaría que la vieran, supongo...

— ¿Qué quieres decir?

—Que van detrás de los muggles, Granger."

Y aunque el rubio se había mostrado grosero desde un principio, hubo algo en su tono y en su forma de mirar a Hermione que hizo que algo en Harry se retorciera en desaprobación.

« ¿Malfoy estaría preocupado?»se cuestionó todavía observando el perfil de su amiga ¿Podría ser...que a Draco le preocupe lo que pase con Hermione?

« ¿Malfoy estará enamorado?» pensó mientras analizaba la estructura facial de la chica. Hermione era alguien bonita, cara con rasgos finos y sonrisa perfecta haciéndole honor al trabajo de sus padres, no parecía prestarle atención a su cabello pero aun así lucía mejor que el suyo, además sus pestañas enmarcaban unos hermosos ojos cafés. Todo eso y más características la hacían alguien atractiva, pero no pudo evitar pensar que no la veía como alguien que podría gustarle a Malfoy.

A él le agradaba su amiga, no podía verla como algo más que una amistad perdurativa, y eso estaba bien. Pero si la veía desde la perspectiva en la que un hombre miraba a una mujer, no le parecía alguien capaz de captar la atención de un chico como Malfoy.

Aunque ¿Quién era él para saberlo? Conocía a Draco como cualquier Gryffindor lo haría: un presumido y cobarde Slytherin.

Y no es que Malfoy fuera la gran cosa, tenía con que defenderse eso sí: cabello liso y rubio que lucía suave al tacto, ojos grises y facciones elegantes. Lo que lo complicaba era su actitud, Draco era realmente...difícil.

Él diría que al rubio le iría bien las chicas morenas, de un cabello tan oscuro que contrastara con el suyo, negro en lugar del castaño que poseía su amiga, de piel un poco tostada, solo un poco para que se distingan cuando sus manos se junten pero sin llegar a resaltar tanto la diferencia, quizás el porte si estaría bien, aunque si fuese un tanto más alta...

En cuanto a sus ojos, pensaba que sería mejor si el rubio se fijara en alguien con ojos claros y tan distintivos semejantes a los que tenía, el gris era un color bonito después de todo. Quizás si los otros fueran igual de singulares...como un tono azul, celestes o...verdes.

Ojos verdes...él tenía los ojos verdes. Bueno, los suyos no quedarían bien con los de Malfoy ¿o sí?

Aunque eso no importaba, después de todo era un chico y Hermione una...chica ¿A Draco le gustarían solo las mujeres?

¡Pero que decía! ¡Por supuesto que a Draco solo le gustaban las mujeres! Por eso había mirado de esa forma a Hermione, por eso se había preocupado, y por eso él debería darse por satisfecho, su amiga había logrado atraer la atención del estudiante más complicado, de un chico que había estado encerrado en prejuicios y que ha conocido la libertad al enamorarse de una chica de un fuerte carácter, uno que la llevaba al extremo de golpear su intocable cara de niño rico, y que lo obligó a apartar sus ojos de una estúpida etiqueta social como lo era ser un hijo de muggles.

Quizá fue desde ese momento que Draco despertó ese interés por su amiga, desde que ella se atrevió a ignorar su posición y sus orígenes para propinarle un fuerte golpe que tenía bien merecido.

Eso le resultaba cliché. Y no quería ahondar en la lógica del asunto porque lo sentía tan...defectuoso.

De todas formas ¿Qué le estaba pasando? ¿Por qué esos pensamientos tan repentinos? Estaba bien que recientemente haya descubierto que su atracción no estaba solamente rígida a un sexo. Pero de eso a pensar en Malfoy como un hombre no debería pensar en otro...

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⏰ Última actualización: Sep 18, 2018 ⏰

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