La vida de mi hermana

Días Felices

Era una chica normal, siempre tranquila y estudiosa, de pocos amigos, su nombre Anali, edad hasta ahora 14, pasa a tercer grado de secundaria y está muy emocionada por eso.

El primer dia de clases me contó que fue genial(ella me cuenta todo) dijo que al llegar al aula se encontró con una amiga que ya conocía desde pequeña 😊 era Diana, hablaron de sus vacaciones, en las que conocimos a un chico en la playa, a mi hermana le encantó su forma de tratar, siempre la moleste por la cara embobada que siempre tenía desde que lo conocemos, el nombre de este chico es  Oscar Paul, la edad de mi hermana, persona feliz, le gustaba tocar guitarra, hacer deporte, y era muy divertido.

No sabía que era tan importante para ella, hasta que un día me di con la sorpresa de que mantenían contacto vía Facebook.

Noté que a ella le gustaba mucho (ella no era quien hablaba con personas que recién conoce, tal vez por alguna razón estudiantil)

A Diana le contó que la había impactado la forma de ser y pensar de este chico, pero él estaba en otra ciudad, sin embargo no era impedimento para que sean amigos.

Me he cuestionado si está enamorada, aunque me detiene la idea de que a esa edad aun es una ilusión fugaz.

Han pasado varias semanas desde que empezó el año escolar y ha tenido un buen desempeño, mamá le preguntó sobre un compañero(Javier) que si este chico estaba interesado en ella, a lo que respondió, solo es un amigo y asistimos al mismo colegio porque sabes que es hijo de tu amiga, no le he tomado interés especial, así que no crees historias en tu mente, yo solo reí con su respuesta, mamá para calmar la situación dijo, pregunté por el porque me dijo que tenían una maqueta, Anali decía que no era nada del otro mundo.

Por la noche me quedé a hablar con ella para contarle como estuvo mi día y así tratar de que me suelte algo ya que últimamente estaba muy callada, apenas iba a hacer una historia de mi día y sonó su teléfono(canción de fondo quisiera de pasa bordo )

Era él, era Paul?, mi mente empezó a dudar cuando ella decía me parece genial que vengas el sábado, salí haciendo señas para dejar que hable tranquila.

Al día siguiente le pregunté sobre la llamada, sonriente me dijo que Paul le habló para preguntarle como estaba y como le había ido, sin más, se retiró del comedor y se dirigió a la puerta para ir al colegio.