Dirty Love

Prologo

Prologo Deacon

Enterramos a mi padre una tarde de noviembre fría y lluviosa. Me emociona ver la cantidad de gente que viene a despedirlo con cariño y respeto. Mi madre está a mi lado, pero es un tempano de hielo. Ellos estaban juntos pero separados hacía mucho tiempo. Mi padre era un hombre de honor y no se divorciaría porque le importaba que yo tuviera a mi madre conmigo a pesar de que no era ejemplar. Solo le preocupaba su próxima cirugía y el bolso de diseñador.

Mi héroe, mi ejemplo, el hombre que aspiro a ser... ahora baja dos metros bajo tierra después de luchar contra el cáncer por dos años. Un padre ejemplar, un marido leal a pesar de mi madre y sus aventuras, un empresario exitoso. Amigo fiel y compañero de travesuras. El mejor hombre que pude tener como padre me dejo, no porque quisiera. Soporto todo lo que pudo hasta que su corazón dijo basta. Ahora me dejaba con una madre demasiado llena de si misma, una empresa a la que ponerle el pecho y un vacío que nunca podre llenar. Hasta nuestro perro Rufus esta triste. Sentado a mis pies con su cabeza sobre sus patas, mira el ataúd bajando con la tristeza de quien ha perdido a un amigo de toda la vida.

Empieza a llover más fuerte y nos retiramos hacia la recepción. Toda la gente que trabajo con mi padre, sus socios y amigos de toda la vida nos dan el pésame sinceramente.

Cuando al caer la tarde todos se fueron mi madre se retiró a su habitación diciendo que la atmosfera era deprimente. Yo entre al estudio de mi padre sintiendo su presencia en el todavía. Me senté en su sofá sintiendo que me quedaba grande y pensando en lo que quería para mi vida y en cual era mi deber ahora y todo se volvió demasiado pesado.