Borracha, drogada y enojada.

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-Buenas tardes- Rose estaba cocinando unas tortillas de banana, olía delicioso

-Buenas tardes, ¿a qué hora despertaste?

-Como a las 12 del día, tampoco iba a madrugar, mujer…- Me acerqué a ella en la isla en la que estaba la cocina, me senté en un taburete y ella me daba la espalda. Se quedo callada por un rato, era un silencio incomodo, muy incomodo.

-¿Qué paso ayer?- le dije temerosa. Me acuerdo de haber tenido celos de ella y Chris y que después bebí demasiado, fume marihuana y casi me violan, después de eso, no me acuerdo de mucho.

Suspiro y se dio la vuelta con un plato lleno de tortillas hechas. Me las puso al frente y me miro por un segundo.

-Casi pierdes tu virginidad en ese lugar, Alicia, te drogaste y bebiste hasta casi intoxicarte, ¿en qué pensabas?- En ti y Chris en una cama, desnudos.

Okay, estaba enojada, pero es que fueron mis impulsos, los celos, la rabia, la desesperación… No sé.

-Lo siento, me deje llevar por mucho, sabes que no voy a fiestas y esta era una muy buena oportunidad para divertirme un poco y se me fue de las manos, solo fue eso…  Lo siento- Pensándolo bien, yo no soy la que debe pedir perdón, ella fue la que me provoco, pero no es una escusa inteligente.

Le vi los ojos. Se notaba aun que estaba cansada, como yo con el dolor de cabeza. Al fin y al cabo solo sonrió y dejo salir todo el peso que tenía en sus hombros.

-Para la otra te mato, ¿de acuerdo?- Reímos juntas, dejando al pasado lo que paso ayer, eso era lo que quería… Pero aun no estaba satisfecha, quería saber si es que pasó algo con Rose y Chris.

-Hey- Rose siguió cocinando y le llame la atención- ¿Te divertiste en la noche?, ¿con algún chico?- actuaba normal, sin que se diera cuenta de lo desesperada que estaba, así que corte un pequeño trozo de la comida y lo deposité en mi boca, calmadamente

- La verdad que no…-se quedo callada un momento y dejó salir una sonrisa piadosa- La verdad es que la pase bien con Chris, pero no paso nada más con un baile. Después estuve con su amigo, am… - Se puso a pensar en cual era el nombre del chico- Hey…, Hay… Empezaba con H, te lo aseguro.

-Hayden- dije seca.

 -¡Sí!- grito chillona- ¿Lo conoces?, no le di mi teléfono porque en ese momento estaba ayudando a Chris a cargarte y llevarte a mi casa, claro- dijo en énfasis en “ese momento”, que molestosa

-Bueno, no lo conozco, pero Chris sí. Él aun sigue en tu cama, yo me voy a mi casa- No termine mi desayuno-comida, ya que el comportamiento que estaba tomando Rose me estaba empezando a molestar.

-¿Ya te vas?- se dirigió hasta mí, limpiándose las manos en un paño- Si quieres te quedas un rato más

-No gracias, estoy bien- me había puesto mi ropa, sin lavarme ni nada así que necesitaba urgentemente una ducha y unas pastillas para la resaca- Nos vemos el Lunes.

Ahora te puedes quedar sola con Chris esperándote en tu cama, querida amiga…

|…|

Cuando llegué a mi casa me di cuenta de que no tenía mi celular, ni mis llaves, que suerte tengo, lo agradezco. No tenía otra opción que subir por el árbol que daba a mi ventana o tocar el timbre provocando que mis padres, sí es que estaban, los depártase y me vean de esta manera. De una manera de que me volví loca en una fiesta muy salvaje, cosa que sería lo contrario de tipo de fiesta a la que “supuestamente” fui.

Dificultosamente y con dolor de cabeza, subí con cuidado ya que si daba un movimiento en falso, podría caerme y quizás, llegar al hospital, cosa que ahora me fastidiaría.

Un chico Desconocido [Christofer Drew]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora