Una historia que contar

Prologo: Desconcierto

~En Ciudad Romantis~

— No he logrado encontrarla por ninguna parte, ¿Vosotros la habéis visto? —Masculla Trovato siendo el último en llegar.

— No, y desde hace semanas. Estoy muy preocupada, no puedo simplemente pasear feliz por ahí sin saber que le ha pasado —Dice Xana en voz baja preocupada.

— Calmaos los dos, puede no ser nada, tal vez solo ha ido a entrenarse a laguna ruta poco transitada y se le ha olvidado llamar —Comenta Kalm de forma razonable.

— Pero Kalm yo he estado practicando coreografías y aunque hay veces en las que el tiempo se me pasa volando, nunca han sido semanas. Esto es raro lo mires por donde lo mires —Le recuerda Benigno.

— El profesor ha enviado a sus asistentes, pero ¿Podríamos hacer algo más? —Se pregunta Trovato en voz alta.

— ¿Y si contactamos con su madre? Si la ha llamado todo esto solo será un mal recuerdo que olvidaremos pronto —Benigno y Trovato la miran contentos por la idea.

— Ya pensé en ello y hablé con mi madre, la señora Vera no sabe a dónde ha ido y está preocupada también —Los chicos bajan la cabeza apesadumbrados— Además, como dijo Trovo, el profesor Ciprés ha enviado a sus dos asistentes a buscarla en lugares donde pueda estar, si no la han encontrado...

— ¡No! No podemos pensar en eso —Se asusta Xana— No podemos ponernos en lo peor, ya verán, lo arreglaremos.

— ¿Y si la han atrapado los del team Flare? —Insinúa Trovato.

— ¿Esos raros que creen que lo que es bello debe ser de un color rojo chillón? ¡Por favor! — Exclama Benigno— Zuri es mucho mejor que todo eso.

— No podemos saber eso Beni ¿Y si le han tendido una trampa o algo peor? —dice Trovato comenzando a deprimirse.

— No, no y no. Eso no ha sido así —Patalea Xana e infla los mofletes— Zuri es fuerte, la veremos enseguida y, ¡Será con una gran sonrisa! — Xana aun con los mofletes inflados se gira enfadada y se va.

— ¡Xana, espera! —La llama Kalm— Esto es un desastre —Se da una palmada en la frente.

— Y que lo digas —suspira Benigno— Se me han quitado las ganas de todo —El chico baja la cabeza de forma tristona.

—No podemos rendirnos Beni —Trovato posa una mano en su espalda, por ser bajito no llega al hombro— Si puedo encontrar cualquier pokemon daré con ella y seguiremos nuestro viaje como antes, me adelantaré para ver qué tal se encuentra Xana ¿De acuerdo? —Dice Trovato con una sonrisa algo temblorosa y se marcha.

— ¿Se ha vuelto tan valiente de pronto o me lo parece a mí? —Comenta Kalm acercándose a Beni, este suspira de nuevo.

— No sabría decirte, ellos se llevaban muy bien e incluso tenían una pequeña competición amistosa entre ellos dos para ver quien había conseguido completar más apartados de la pokedex. Cuando se vieron recién en la ruta cinco le regaló miel. A él como a todos les ha pegado un poco fuerte su desaparición, es una lástima que no sea la primera y probablemente tampoco la última la última —.

— ¿Te refieres a la desaparición de entrenadores jóvenes? —pregunta Kalm pensativo— Ya la liga ha hecho una ley para que los niños empiecen su viaje después, no como antes que lo hacían a los diez años, así que no entiendo que quieres decir.

— Puede que exista pero, sigo viendo a entrenadores de preescolar entre las rutas. Es extraño que los padre los dejen sin más —Cuestiona Beni.

— Los niños hacen lo que quieren, mientras estén cerca de las ciudades supongo que esta bien, después de todo, es la decisión de los padres —Trata de justificar Kalm algo inquieto.

— Sigue sin estar bien si nos pasa a nosotros con nuestra edad ¿Qué seguridad tienen ellos? —se entristece Beni.

— ¡¿Podemos hablar de otra cosa?! No hemos parado con este tema desde hace tiempo —se queja Kalm.

— ¿Y de que quieres que hablemos exactamente? ¿Quieres ignorar la desaparición de una amiga? ¿Para qué? ¿Para hablar de tu entrenamiento de nuevo? En serio, sabemos que quieres que superarte a ti mismo pero...—se rasca el brazo— Ni Trovato, ni yo, ni Xana podemos entender tu indiferencia.

— ¡Yo no siento indiferencia! ¡Estoy preocupado por ella! ¡Por eso tengo que esforzarme mucho más! — Benigno lo mira sorprendido.

— Oh, lo siento, pero es que me diste esa impresión, con esos del Team Flare y lo de Zuri, entiendo que quieras enfocarte en algo para despejarte. Solo que a mi y tal vez a los otros no se nos ocurra nada no significa que no lo pueda llevar mejor otra persona, supongo. ¿Me... Perdonas? —Beni le mira con un aire lastimero, cabizbajo.

— Claro amigo, sin problema. Vamos, hay que alcanzar a los demás —Comenta con una sonrisa fingida mientras caminan a la siguiente ciudad— Si esos idiotas tienen la culpa... Pagaran por ello —piensa el chico apretando los puños.

~En la Cafetería Lysson~

— ¿Entonces aun no la han encontrado? —Pregunta el Líder del Team Flare, con una ceja alzada— Que extraño. Bueno. Así no se interpondrá en mis planes, lograré que este mundo sea tan hermoso como antaño —dice mientras alza su copa de vino antes de beber.

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Bueno ese es el nuevo fic una especie de 2.0 espero que esté mejor.