Yuri Plisetsky

255 16 9
                                    

Por...porque tal vez no te odie tanto como pensé, si? Al parecer incluso...- trataba de acomodar mis ideas en mi cabeza pero era en vano, se escuchaba a lo lejos como la multitud vitoreaban mi nombre-me agradas un poco, es decir podrías agradarme mucho

Yuri, en serio tú...- Aquella mirada que hacía temblar todo mi ser, me analizaba pero también tenía algo de sorpresa.

Así es! Que esperabas que hiciera después de ver a la persona que amo patinando conmigo-exclamé aquella frase con algo de frustración y nerviosismo. Me acerque más hacia Otabek, quedando frente a frente.

Amas?- se notaba la confusión en aquella palabra que había salido de sus labios

Ya me escuchaste? Te amo, te amo, que otra persona te acosa de día y de noche, patina solo pensando en ti y postea en todas sus redes sociales poemas en tu honor. Te amo Otabek, te amo desde la primera vez que te vi, a partir de ese momento cada segundo de mi vida había esperado tener la oportunidad de revelarte finalmente mi secreto, abrazarte y besarte. Oh!! Ven aquí mi gran amor- sin pensarlo dos veces, agarre del cuello de su casaca y le robé un beso.

--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--.--

Mi nombre es Yuri Plisetsky, soy patinador artístico y represento a la selección de Rusia, a pesar de mis tempranos 16 años, conseguí ganar el oro en el último Grand prix en Barcelona y lo más grandioso es que era mi debut como categoría sénior. Muchos de mis seguidores me apodan "el hada rusa", según ellos por la forma tan elegante y aquella gracia al patinar; lo único que me da gracia son sus estúpidos comentarios, maldita sea!!! Soy un hombre!!! Que me reconozcan como un hada, me hace enfurecer cada vez más.

Bueno, hubo una vez que alguien me dijo algo tan hermoso y desde ese momento mi corazón le pertenece. Fue hace 5 años pero lo recuerdo como si fuera ayer.

La situación con mi madre era cada vez más insoportable; ella siendo una artista famosa no tenía ni tiempo para poderme cuidar, el único que estaba al pendiente de mi bienestar era mi abuelo Nikolai. Mi abuelo no podía llevarme ese día hacia la concentración de verano de Yakov, le había pedido a mi madre pero ella lo único que respondió fue: Yuri, ahora no.

Caminaba molesto por las calles de san Petersburgo, ah! Como olvidar que aquel día empezó a llover, había olvidado mi casaca y para colmo un estúpido taxi había ensuciado mi ropa. Recordé los consejos de mi abuelo, respirar profundo para calmar mi enojo, pero en ese instante donde mi mundo se empezaba a derrumbar sentí que un cálido abrigo me había rodeado. Confundido mire hacia la persona que me había dado su abrigo y me encontré con un niño de cabellos azabaches.

Tienes la mirada de un soldado

Solo eso salió de sus labios, soldado? Eso suena tan masculino! Desde pequeño me molestaban por mi apariencia andrógina, era la primera persona que me alagaba de esa manera.

Pasaron los días pude observar que aquel niño tenía problemas para adaptarse, mientras yo sufría con las constantes burlas de mis compañeros de clase. Uno de esos días había hecho un mal movimiento y termine besando el piso, mi tobillo me dolía a horrores y solo escuchaba las risas de mis compañeros; pero una mano apareció en mi campo de visión y cuando alcé la mirada me topé con aquellos orbes marrones. Me sonrojé al verlo y sin querer empecé a sonreír.

Cuando Otabek me ayudo a ponerme de pie, mis compañeros empezaron a murmurar "desde cuando Yuri es la novia de Otabek?", " que asco! Pero son hombres!" ," quizás Yuri realmente sea mujer". Un pensamiento cruzó en mi mente, quizás me arrepienta por toda mi vida pero estaba harto de esas burlas y tenía que hacer algo al respecto.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Sep 06, 2017 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Hey Otabek!!Where stories live. Discover now