Guía del Buen Zombi | 🔞

Hola. Soy Bob, el zombi.

Hola a todos, mi nombre es Bob. Sinceramente ya no recuerdo mi nombre real porque técnicamente me falta una parte del cerebro pero sí recuerdo a Bob Esponja y me gustaba el personaje así que en su honor, me llamaré como él.

Ahora camino con la boca abierta, arrastrando los pies y estirando los brazos hacia adelante con la esperanza de alcanzar a ese pobre rechoncho que se acaba de meter a un callejón sin salida.

La buena noticia: No voy a compartirlo con nadie.

¿Ya he mencionado que los que gritan como porristas en película de terror tienen un sabor especial?

El zombi de hace unos minutos me dijo que lo molestaban con sus chillidos a la hora de irlos tragando, pero a mí no me molesta. Como decía mi madre: Para gustos y colores, no hay nada escrito. Y a mí me gusta cuando gritan, me recuerdan que yo ya no tengo que preocuparme por "mantenerme vivo".

Ja, mírenlo. Seguro piensa que alguien lo salvará, ¡ba! Qué se lo diga a mi molesto vecino una vez que me lo trague...

¿En qué estaba? Ah sí.

Solía vivir con sueldo bastante miserable en un apartamento promedio en la Ciudad de México. Sí, yo también considero extraño que una plaga de Zombis haya llegado hasta acá si la dichosa plaga inició lejos de aquí.

¿Y adivinen quién lo provocó? Vamos, adivinen.

Exactamente, Estados Unidos no pudo hacer caso de todas esas películas y vídeo juegos y tuvo que ponerse a jugar con los químicos. ¡Bravo! ¡Gracias! Estúpidos gringos.

Maldito muro de mierda, ¿de qué sirves si no puedes mantener a los Zombis en su país de origen?

Arrg.

En fin, lo último que recuerdo como un humano es que me habían despedido de ese molesto trabajo de... eh... ya no lo recuerdo bien pero era algo relacionado con los autos. No importa, el chiste es que poco después de despedirme, encontré a una viejita arrodillada y muriéndose por convulsiones que yo no supe por qué eran.

¿Adivinamos quién fue el imbécil que se le acercó para preguntarle si estaba bien?

¡Pues quién más!

Yo no lo hice. Fui demasiado cobarde para averiguarlo, además de que si se moría a mí me iban a encarcelar porque obvio, en este país si no tienes dinero ni parientes influyentes ya puedes irte despidiendo de lo poco que te queda de libertad.

Una mujer chismosa que no pudo mantener su distancia cuando la anciana empezó a vomitar sangre y a gruñir como perro con rabia se le arrimó. Ni porque la anciana se giró y la vio con ojos blancos y sangre en la boca se alejó. No.

Dejó que la mordieran y que el caos se propagara por este (de por sí) conflictivo estado y posteriormente el país entero.

Oh vaya, jamás había corrido tan rápido en toda mi vida humana. Ahora ya no me cuesta tanto trabajo.

¿Cómo me convertí en zombi? No quisiera decirlo, es demasiado vergonzoso y estúpido así que sólo les diré una cosa.

Después de 3 años (creo) he sobrevivido como zombi, ¿y saben qué? Me fascina.

Ahora...

¿Tú crees ser el típico Rambo con un arsenal de armas ilimitadas o el adolescente gritón que morirá apenas ponga un pie fuera de su casa?

¿Entiendes que tus posibilidades de sobrevivir pasan por el -10% y aún si lo hicieras jamás podrías combatir contra nosotros por más Resident Evil que hayas jugado?

¿A estas alturas ya te resignaste a ser parte del gremio de los no-muertos?

Entonces siéntate y lee con atención.

Te voy a mostrar cómo ser un verdadero zombi y gozar de ello.