Ángel oscuro

119 4 0
                                    

Todo empezo.

"Esta historia se basa en mi vida real, aunque algunos nombres no seran completamente los reales"

Mi nombre, Aura, aunque nunca me ha gustado ya que simplemente mi madre lo saco de un libro.

Algunos de mis recuerdos son borrosos, mi mente a tratado de olvidarlos por la magnitud del dolor que senti por ellos, pero todo empieza masomenos asi...

Estaba en la recámara de mi madre, mientras yo lloraba, ella me decia (una vez mas) que estaba harta de mi y que desearía no ser ya mi madre.

Mientras tanto yo solo deseaba no existir para no escuchar esas palabras, que, para mi de entre 7-8 años eran lo peor; me recoste sobre una almohada y me tape el rostro deseando no volver a despertar. Y asi solo me quede dormida.

A los dias siguientes todo corria normal y como si nada hubiese pasado. Yo pense entonces que realmente ya todo estaría bien, al no saber que estaba equivocada.

Los momentos asi sentia horribles, ciertamente con solo decirme que estaba harta de mi, yo deseaba no estar en este mundo.  Llego este dia en que ella me dijo:

-vamos a platicar.  Dime, ¿que puedo hacer yo para que tu mejores?-se sienta en el sillón al lado de mi.

-Esque yo siento "feo" cuando tu me dices cosas malas-dije algo sumisa.

-Pero ¿que cosas te he dicho?

-Pues cuando me dices que te tengo harta y que me olvide de que eres mi mamá.

-Hay hija... bueno intentaré mejorar en eso, pero tu también tienes que cambiar.

-Bueno.

Asi es la primera vez que platicamos a cerca de "mejorar".

Mis iluciones crecieron al escuchar por primera vez esas palabras.

Al paso del tiempo las cosas no mejoraron como yo deseaba; ella me regañaba comúnmente, yo me sentia imperfecta, la peor hija, con fallas y defectos.

Como cotidianamente ella me lleva siempre a la escuela. Mi primaria estaba cerca de su trabajo. Me llevo en auto, una discusión mas, de esas en las que quisiera nunca haber nacido, una de esas discusiones que iniciaron solo por estupideces tan solo como el ir retrasada de tiempo al llegar. En camino, en el auto, sentada tratando de no escuchar aquellas palabras que me acuchillaban por dentro, mi madre me decía:

-Lo que pasa es que nisiquiera te apuras, solo me desesperas. Y ni una ni otra nos soportamos. Yo te digo una cosa y haces lo contrario.-decía mientras manejaba-Dime que es lo que vamos a hacer. ¿Que quieres que haga para que cambies?. Ya estoy harta de tus actitudes. Por lo que veo tú igual. ¿¡Dime!? Solo dime... Por mi, en este momento nos libramos de todo y estrello el coche. ¿Quieres eso?. Solo aqui nos matamos y acaba todo.

Ángel oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora