Skyler
Voltee a ver a mi madre con cara de confusión y coraje, me molestaba ver a Harry aquí y más por lo que había ocurrido ayer jamás pensé que mi madre no me creíria, yo era su hija sin embargo le creyó a él y no a mí y eso me molestaba mucho
-quien diablos era ese chico!- grito mi madre, cerré los ojos mientras contaba hasta diez en mi mente para poder controlarme
-da igual mamá- no quería dar detalles en frente de un extraño y más porque hace unos días me amenazó con matarlo o algo por el estilo
-a mi no me da igual, ahora mismo me dirás quién es!- mis uñas estaban clavadas en mis palmas haciéndome daño, sin embargo no dolía estaba demasiado cabreada con mi madre y con el vecino que estoy segura que el le metió todo esto
-es un chico que me consiguió trabajo de mesera en un restaurante!-grite, voltee a ver a Harry- porque el está aquí? Qué no te dije que fue lo que me hizo ayer?!- mi madre volteo a ver a Harry y luego a mi
-el no hizo nada, solo quería ayudarte de ese chico- intento acercarse, pero yo retrocedi ¿enserio? le creyó más a él que a mi
-pero tú te oyes mamá?- hable incrédula, mis ojos amenazaban con salir lágrimas- te dije lo que él había hecho y simplemente le crees más a el- apunte a Harry- en todos pensé, menos en ti- quite una lágrima que se desplazaba por mi mejilla- ha sido un golpe muy bajo- tras decir eso me fui a mi habitación, no tenía nada más que decir, yo había dicho, ella lo había dicho todo, dolía como el infierno que se haya puesto de lado del vecino que el de su propia hija
Me puse mi pijama y me desmaquille, amarre mi cabello en un moño desordenado y me dirigí a mi cama, ya estaba muy tarde y tenía que ir a la escuela y después al trabajo, mañana me esperaba un día muy duro, jamás había trabajado en un lugar muy lejos, saliendo de la escuela me iría al restaurante para poder llegar a tiempo en mi segundo día de trabajo, el sitio era guay y tenía pinta de que todos los platillos costaba una pasta grande, por suerte los clientes se miraban de clase muy alta por lo tanto podían pagarlo sin problema, las propinas eran demasiado altas y para mí era lo mejor
Cerré mis ojos lentamente mientras poco a poco el sueño se apoderaba de mi
"Corría desesperadamente por las calles de donde yo vivía, gritaba a todo pulmón que alguien me ayudara, sin embargo nadie salía para rescatarme de ese chico que era mi vecino, tenía el abrigo abierto y mi blusa blanca estaba manchada de sangre, mis tenis eran lo único que se escuchaba en el asfalto, nunca antes había sentido tanto miedo de morir, tenía miedo, miedo que el tratará de hacerme daño otra vez, por suerte logré escapar de ahí, me escondí abajo de un carro cerca del parque mi respiración estaba descontrolada, mi corazón latía con tanta fuerza que sentía que en cualquier momento se saldría de mi pecho, lágrimas salían de mis ojos empapando mis mejillas automáticamente, pero era inevitable no hacerlo en esta situación, sentí como alguien me agarró de mis pies y me jalaron saliendo completamente del auto, solté un grito al ver a Harry con una sonrisa triunfal
-por favor no me hagas daño, por favor, por favor, por favor!- suplique varias veces, sin embargo el solo reía
-porque no debería hacerte daño? Ya he matado a toda tu familia- coloco el cuchillo en mi cuello y lo recorría por mi pecho hasta llegas al ombligo- dime porque no debería- se inclinó hacia mí y puso su oído en mis labios para poder escuchar mi respuesta
-porque te amo Harry, te amo y se que tú también lo haces, por favor deja eso y vámonos, seremos felices- le susurre mientras más lágrimas salían, el se separó de mi, lucía confundido y a la vez su rostro se relajo y pensé que se había acabado todo, sin embargo volvió a retomar su rostro de nuevo, la misma sonrisa
