Sick and pale | PanHwi

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—¡Apúrate papi!

Daehwi despejó las mechas sueltas de la frente de su pequeño y tomó la mano con fuerza mientras apresuraban el paso.

Mientras sentía el frío chocando contra su piel, Daehwi se ve a si mismo en la cama, pálido como un muerto a los 17 años. La noche era fresca y trataba de acurrucarse contra las mantas mientras miraba la luna llena junto al ruido de la televisión.

Y el sonido de peso muerto cayendo contra el techo de su habitación, hizo que corriera fuera de la cama hasta su azotea. En medio de las sábanas y con un poco de miedo, estiró su cuerpo para ver al costado y se encontró con un chico de capucha negra. Sentía sus piernas flaquear cuando lo vio sin rasguños ni pisadas extrañas a pesar de básicamente, haber caído en su techo. Era tan alto y extrañamente, su piel brillaba.

—¿Eres un v-vampiro?

Genial, se recriminó. El alto y pálido hombre se acercaba lentamente, tratando de no asustarlo y entonces, la capucha salió de su rostro y Daehwi se encontró con los labios más bonitos, la nariz más pequeña y los ojos brillantes más impactantes de la historia; pensaba que esas cosas malvadas por fin se habían atrevido a entrar a su casa, lo que sería terrible porque dejó su celular adentro y no tenía como llamar a la policía.

—¿Y qué pasará si te digo que lo soy?

Sonaba extranjero y su voz era profunda, algo aniñada para un hombre de sus características. Un frío corrió por los aires y despabiló acercándose al muchacho. —Después te haré las preguntas pero primero pasa, hace mucho frío.

Daehwi no había pensado mucho y estaba algo atontado pero tenía su primera impresión hecha y se atrevió a decirlo. El chico frente a él parecía ser esa versión internacional del tipo de Crepúsculo, lo que le era divertido y extraño. Le miró a los ojos, viendo que se acomodaba en su cama al sentarse y solo una cosa pasó por su cabeza.

"Es un vampiro guapo".

El pálido frente a él tomó repentinamente su antebrazo con una mueca de dolor, apenas perceptible y Daehwi se apresuró en ayudarle a separar la tela de su manga para que no le hiciese daño lo que sea que tuviese ahí. —¿Estás bien? ¿Te heriste el brazo?

—No lo creo, vengo de la casa vecina. Por cierto, soy Guanlin, tu vecino.

Bien.

Daehwi se separó un poco tratando de procesar la información. "¿Será posible...?".

—Lo que sea que vayas a pensar, no lo hagas.

—¿C-Cómo-? Auch...

Las sábanas cayeron de sus hombros y tomó por impulso su antebrazo izquierdo, viendo asombrado como palabra tras palabra aparecía en su piel sensible, casi como un tatuaje. Quizás con el mismo dolor del piqueteo de uno.

Es un bobo lindo.

Solo entonces Daehwi comprendió que estaba jodido. Pensaba en decirle que Guanlin mostrara su brazo ahora, pero el chico se adelantó al leer sus pensamientos, lo que hace cien por ciento cierto que lo que estaba sucediendo, era efectivamente eso.

Guanlin dejó su antebrazo al descubierto y la respiración de ambos se atascó en sus gargantas.

Es un vampiro guapo.

—Así que un vampiro... qué buen primer pensamiento.

—¿Y yo qué? ¿que soy un bobo? Te escucho riéndote.