DNA [Zayn Malik]

1.

— Deja de emocionarte, sólo es el primer día de escuela. — Le dije a Chelsea que estaba dando vueltas.

— ¡Sí! ¡Último año! — Gritó y echo los brazos atrás.

— ¿Qué tiene? No tiene nada de bueno que sea el último año.

— Por supuesto que sí. Chicos nuevos, los del equipo de americano te hacen caso. 

Sólo torcí los ojos y seguimos caminando. Todos estaban afuera de la escuela, unos se tomaban fotos, y platicaban. Las populares de mi generación comenzaban a criticar y juzgar a las chicas nuevas, veían su nueva caza en lo nuevos.

Tampoco era una santa en el colegio, si tenía el genio de un hombre, pero me gustaba ser una chica. Mi mejor amiga estaba en el equipo de porristas mientras yo me encargaba de golpear a las del box. Una de las mejores de la escuela, este año no iba a estar ahí. Conseguir un buen puntaje +100 para la universidad costaba mucho trabajo.

Dieron la apestosa bienvenida en la explanada, todo normal. Las porristas salieron con su presentación de nenas, los de americano invitando a los chicos, etc.

— Es aburrido ¿no? — Le dije al chico de un lado.

— Un poco, Niall mucho gusto. — Estrechos u mano con la mía. — Cuanta fuerza en una mujer.

— Normal. ¿Te inscribirás a algo?

— Estaba pensando en el equipo, pero viendo bien a ellos, no. Seré porrista. — Me atraganté con agua.

— No hablas enserio. ¿Qué grado eres?

— Sexto, el último gracias a Dios. — Miró al cielo y fruncí el ceño. — ¿Tú?

— Igual, todos le ven el lado positivo al último año menos yo. — Reí. — No creas que soy así de aguafiestas, las mañanas no son lo mío, ni despertarme temprano.

— ¡Bienvenidos estudiantes! Asistan a clases, y recuerden que el tiempo es valioso para poder llegar al éxito. — Todos aplaudieron yo era de las pocas que abucheaban.

Caminé con mi nuevo amigo Niall, al parecer también era del grupo 636G. Este año no me tocaba con Chelsea, así que él podía ser uno de mis buenos amigos. La primera de nuestra clase era química, todos entraron y el profesor gordo y calvo cerró la puerta sin dejar pasar a más.

— Soy el profesor Edgar y por favor no me gusta el desorden, las bromas. Sus libros les fueron asignados desde la semana pasada y quién no lo trae se puede retirar ¡porque no sirven aquí!

— Lo siento, nos vemos luego. — Salió Niall y la mayoría de mis compañeros.

— Nos entendemos demasiado bien. — Sacó la tiza el gordo y comenzó a escribir. — Si juntamos o mezclamos cloruro de sodio más fosfato de potasio, tenemos como resultado…

— Da cloruro de fosforo más potasio de sodio. — Contesté al mismo tiempo que el moreno de la esquina.

— Perfecto. — Fulminé aquel chico y él me miró. — Ahora ustedes dos, se ven que son demasiado buenos.  — Nos miró. — Quiero que me den el resultado de…

— ¿Por qué hace esto? — Pregunté cuando me dio la palabra.

— Sólo quiero saber quién es mejor. El resultado de ácido sulfúrico más hidróxido de calcio me da como resultado…

— Hidróxido de hidrogeno más sulfato de calcio. — Contestamos de nuevo al mismo tiempo.

— Demasiado buenos, trabajaran en equipo y por ahora tienen decimas extra. — Aplaudió. — A su lado Malik.

Aquel chico moreno se sentó a un lado mío, me sonrió, hice lo mismo. Después de unos quinientos ejercicios más, sin exagerar, yo estaba platicando con aquel chico de apellido Malik, tenía unos ojos tan hermosos, y esas pestañas que cualquier chica, incluyendo a la chica más popular del mundo las envidiaría.

— Necesito saber tu nombre. — Le dije mientras copiaba la nueva fórmula de la pizarra.

— Zayn ¿el tuyo? — Preguntó y me detuve sobre mis codos.

— Jane. — Le sonreí y él ignoro mi sonrisa. — ¿De dónde sabes tanto de química?

— Mi creador me enseña.

— ¿Tu creador?

— Perdona mi padre. — Me miró. — Él me enseñó todo lo que ahora sé.

— ¿Por qué lo llamaste creador?

— No quiero ser grosero porque eso va contra mis principios morales, pero eso no te incumbe.

— Discúlpeme. — Me acomodé. — ¿Qué harás en receso? No te había visto en esta escuela.

— Iré a leer un poco a la biblioteca o quizá me ponga dibujar en la jardinera.

— ¿Dibujas?

— Un poco, me gusta tener mi espacio propio. Así que disculpa. — Se levantó metiendo el cuadernillo en su mochila. — Nos vemos en la próxima clase.

Recogí mis cosas, jamás una persona había sido tan fría conmigo. Salí acomodando mi cabello y fui al casillero, lo vi caminando directo para su siguiente salón, también el mío, no quería estar cerca de él, no me agradaba, era un grosero.

Salí a fumarme el cigarrillo, y una coca cola que había comprado en la máquina.

— Sabes que está prohibido fumar dentro del área verde ¿cierto? — Ése chico de nuevo, Zayn.

— Lo sé, ¿se supone que eres un chico bueno? — Le pregunté apagando el cigarro contra el árbol.

— No mucho, sólo tengo un brazo tatuado y más. — Sonrió. — Por lo que puedo ver tú no.

— No es que sea pero…

— Quieres disimular que eres fuerte, que nada te lastima cuando tu corazón y alma llora por dentro.

— ¿Eres poeta también?

— Jane, no es eso. Se ve en tus ojos, alguien te hizo daño, te rompió el corazón y lo hicieron mil pedazos. — Me quitó cabello de la cara. — ¿quién fue?

— Mi mejor amigo, ex mejor amigo. Aguarda un momento ¿por qué te estoy confiando mis cosas?

— ¿Qué te hizo?

— Nada. 

ZAYN’S POV:

Nunca había sentido ese hueco en mi ser, ella estaba ahí de pie. Me miraba, yo la miraba no sabía que decirle a una chica, mi creador nunca me había hablado de las chicas, se me hacía extraño. Me volvió a mirar, esperando algo de mí a cambio.

— ¿Eres gay? — Soltó y me quedé sin nada que decir.

— ¿Gay? ¿Qué es eso? — Pregunté.

— Que te gustan los hombres.

— No me gusta nadie, ahora.

Llegue a la casa con mi creador, él estaba sentado mirando al microscopio de la mesa. Deje mi mochila a un lado y me sonrió, saludándome y quitándose las gafas transparentes que llevaba en la cabeza.

— Papá… ¿Qué es lo que les gusta a las chicas?

— ¿Cómo qué que les gusta Zayn? ¡Explícate! — me gritó

— Es decir; que les gusta. ¿Por qué a mis compañeros de curso hablan de otras chicas? De sus sonrisas, de sus ojos, del trasero.

— Hijo tú, eres el único que sabes que yo te he creado a ti, sin una madre, sin la necesidad de que alguien te tuviera en tu vientre. No estás hecho para querer, sólo para crear e inventar.

Me senté en el sillón, abrí mi cuaderno blanco y tracé líneas hasta llegar a lo que me había inspirado.

 Hola, hola! Agradezco a todas que están apoyando la novela/fic como quieran llamarle. Voten por favor. 

Amparo.