Aubrey
—Y sin nada más para decirles, les doy está cordial bienvenida, y disfruten la velada—. Aplausos por todas partes se escucharon, y busque con la mirada a mi familia, los cuales estaban al frente del escenario improvisado en la gran mansión de los Scheneider.— También espero de todo corazón ver muchas manos levantadas para está subasta—. Más aplausos y empezaron a tocar una música clásica, saxofones, violines y entre otros tocaban una relajante bienvenida a lo que parece ser una larga noche.
Aiden
— ¿Por casualidad, no tendrá esos pasteles que son pequeños?—.Pregunté al señor que se encontraba al otro lado del mostrados del pequeño minimarket de la gasolineria.
—Tenemos muffins al otro lado del pasillo, joven—.
—No creó que tendrá velas de cumpleaños, verdad—.Con tan solo una mirada amarga del hombre, decía que No tenia velas.
Salí de ahí y me puse a cantar el cumpleaños feliz a Jack, la gran salida que teniamos planeada de ir a ver a nuestra madre en el club de noche que ella trabajaba, no salio tan bien, ya que nisiquiera nos dejaron entrar en el, la noche Perfecta.
—Perdón hermano, era para lo único que alcanzaba—.Dije apenado, al ver el triste muffin de chocolate que sostenia en mis manos.
—Lo importante es la intención, Aid—. Nos fundimos en un abrazo calidoa lo que Jack agarraba el muffin y se comía a mitad de este—Ten, prueba un poco—.
—Vamos a ver tele en casa, y veo que vamos a cenar—.
—Tengo un plan mejor, ven— Seguí a Jack hasta un auto rojo nuevo, me alarmé cuando subio a este y entré en pánico —Si yo no te enseño esto, nadie más lo hará —. El ruido del motor encendiendose, me saco de mi trance.
—¿¡P-pero que haces!? —. Mis manos sudaban, estaba nervioso —¿Qué pasa si nos descubren?, o peor, ¿si nos lleva la policia?¿¡Qué haremos!? —. Subí al auto sin rechistar. Mi hermano aceleró a toda velocidad, con el corazón en la garganta, trataba de ponerme el cinturón de seguridad.
Mis oídos eran sordos, hasta cierto momento, empezé a escuchar los sonidos de las sirenas de los policías.
—Oh, ¡Mierda!—. Jack golpeo el volante del auto furioso.
—¿Pensabas que no nos iban a detener? ¡Jack, para el maldito auto!—. Grité mientras veía a los carros de la policia detrás nuestro, por el espejo retrovisor.
—¡Jack, no aceleres! ¡No, no lo hagas!—. Sin hacerme minimo de caso, acelereró sin parar, me quería morir en ese mismo instante.—¡Mira a la derecha, más policias!— Joder, estabamos fritos
—Joder, ¡Mira hacia adelante, cabrón!— Luego de eso, chocamos contra una tienda, y sin más, mis cinco sentidos se apagaron por completo.
Aubrey
—Muy bien, tenemos por ahí cinco mil, la señorita de ahí con seis mil, oh, la señora de ahí con un millón, un millón a las una, un millón a las dos, ¡Vendido a la señora de vestido negro—.
Mi móvil vibró, esperaba que proto termine esto así pueda irme de una buena ves.
<<Escapemos tan pronto termine esto>>
Jonh<3
Miré para donde estaba mi novio, asentí, y le guiñe un ojo a modo de un Sí.
—Ya encontré a Jonh, Alicia, está sentado atrás de Marcus—. Susurre en su oído. Alicia lo miró y le sonrío. Marcus al ver que Alicia le sonrío se sintío feliz, pero luego decayó al ver que la sonrisa de su enamorada no iba dirgida a él, sino, al novio de su amiga.
—¿Por qué no le das una oportunidad a Marcus? Miralo, está loco por tí—. Dije al ver la escena que se dio frente a mis ojos, era demasiado tierno, mientras que mi amiga solo pisoteaba sus pobres sentimientos.
—Es muy tonto, no me atráe en lo absoluto Marcus, ya, no molestes Aubrey—. Completamente apenada por el chico, no dije nada más, y esperé a que termine la subasta.
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N/A: Wow, ¿tan rápido pasó septiembre?
Ay bueno.
Heyyy, ¿que tal?
Primer capitulo, me siento tan feliz, espero que les haya gustado, y no olviden darle a la estrellita, y recomendar.Michas gracias, los jamoneo.
Un beso en donde ustedes quieran 7u7.
Mila♡
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Siempre Eres Tú ©
Teen FictionNo copias. Todos los derechos reservados. Un chico, con un hermano delincuente, una chica con una enfermedad que posiblemente acabará con la vida de ambos. Amores que destruyen, corazones que reponer, problemas por resolver, y un sin fin de mentiras...