Sweet Love Between Ninjas ||Naruto Uzumaki|| [Yaoi]

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[(Narra: Kuro)]

°°6:00A.M°°
Luego de haber pasado toda la noche sin poder conciliar el sueño decidí salir de la cama, baje las escaleras y entré a la cocina yendo directamente hacia el refrigerador. Un nuevo día en la academia me esperaba, sin embargo mi humor por las mañanas no estaba al máximo y eso provoco que el desayuno se me quemará un par de veces. Suspire fastidiado y saque unas tostadas mientras oía los pasos de mi padre por las escaleras.

-OtoSan: "Ohayō~, Kuro ¿Te sientes bien?"-Oí la voz de mi padre a mis espaldas, voltee un poco en su dirección, mirándolo de reojo- "Se te está quemando el desayunó." -Agregó señalándome, volteé nuevamente hacia el sartén.

-"Nada, simplemente estoy cansado. Moo~" -Respondí indiferente mientras volteaba el tocino- "¿Tienes alguna misión hoy?" -Le pregunte cambiando de tema.

-OtoSan: "No..." -Lo oí murmurar y seguido se escuchó un golpe, voltee a verlo... Estaba dormido. Puse los ojos en blanco y continúe cocinando.

»45 Minutos Después«

-"¡Oto-San ya me voy. Moo~!" -Grité desde la puerta principal, escuche los pasos apresurados de mi padre bajando las escaleras.

-OtoSan: "Kuro, espera ¿Donde esta mi libro?" -Preguntó mirando me de forma acusadora con su único ojo visible entrecerrado ¿Su libro?.

-"¿Tu libro degenerado ese? No tengo la más mínima idea, buscarlo en tu bolsa. Moo~" -Respondí abriendo la puerta y sin dejarlo hablar salí de casa cerrando la puerta detrás de mi. Suspire aliviado- "Estuvo cerca. Moo~" -Revisé mi mochila y allí estaba el libro... Icha Icha Paradise~♥.

Lo tomé para leerlo en el camino, obviamente debía volver a guardarlo antes de entrar a la academia o me lo confiscarían y Oto-San se enojaría conmigo por haberlo tomado, sin mencionar también que comenzarían a llamarme Pervertido pero... ¡No es culpa mía que tenga una buena trama!

»20 Minutos Después«

Continuaba leyendo Icha Icha♥
Hasta que una risa que me resultaba familiar me desconcentro, voltee un poco mi cabeza hacia la izquierda pero no había nada... O eso creí cuando repentinamente dos Ninjas pasan corriendo en dirección contraria a la mía y como por arte de magia aparece detrás de una tela... Naruto Uzumaki, un chico de mi clase que resulta ser bastante torpe e hiperactivo. Comenzó a burlarse de los Ninjas que acababan de pasar y el había logrado despistar, hasta que su diversión se fugó de forma rápida cuando apareció Iruka-Sensei gritándole, por el susto e instintivamente guarde el libro, Iruka lo sujeto del cuello de su chaqueta y comenzó a arrastrarlo. Rece por que no notará que estaba allí pero como tengo mala suerte, estornude y el volteo en mi dirección.

-Iruka: "¿Hm? ¡Ah! Kuro-Mo, que gusto verte..." -Sonrió amablemente, mientras que yo veía como Naruto se retorcía para librarse de su agarré- "¡Ya deja de moverte Naruto! ¡No te soltaré hasta llegar a la academia" -Le reprendió con voz seria y casi gritando.

Naruto comenzó a patalear bruscamente y gritar exigiendo que lo soltara pero obviamente era un hecho que Iruka-Sensei no lo soltería. Una gota de sudor cruzo por mi rostro.

»30 Minutos Después«

Al llegar a la academia Iruka-Sensei ató a Naruto con una soga en medio de la clase y como pasaba muy seguido comenzó a sermonear al Uzumaki, este solo lo ignoraba girando su rostro en dirección contraria a del Sensei, logrando solo así irritar aun más al endemonia-- Digo, al pobre Iruka... Finalmente luego de todo el espectáculo matutino, todos tuvimos que rehacer el Jutsu de Transformación.