Quien asecha en el bosque

No soy citadino

-Danny, ¡¡Danny!!, ¿que haces aquí todavía?

-Solo Salí a fumar un cigarro -dije confundido

-el jefe te anda buscando como loco, ven, y vamos -exclama Vanessa con apuro

Vanessa y yo vamos en el ascensor rumbo al piso número 7, la noto bastante apurada, no entiendo por qué las personas se preocupan tanto por el paso del tiempo, por más que quiera el tiempo no se detendrá hasta que haga lo que quiera, el tiempo en realidad no existe, el pasado son recuerdos y el futuro expectativas, solo existe el ahora, tú futuro no es algo que está escrito, el destino no existe, forjas tú camino con decisiones y cada decisión tiene consecuencias sin importar si es para bien o para m...

-por favor quita esa cara de drogado, estás como si has fumado marihuana -dice Vanessa con apuro

-solo estoy pensativo, cuando el humo entra a mis pulmones recoge todo mi estrés y...

-ahora eres monje o algo por el estilo? -Exclama Vanessa incomoda interrumpiéndome

el ascensor llegó al piso requerido, caminamos juntos a recoger el informe que tengo en mi escritorio, espera... ¿donde está el informe?, juro que lo he dejado aquí en el escritorio, al menos puedo pasar a imprimirlo nueva mente antes de que llegue el jefe.

-¡Señor Allen!, quiero saber dónde está el informe que me debía dar desde hace 15 minutos - Grita el Sr. Smith por todo el lugar

Viene con lo mismo este hombre, viene caminando tan rápido que parece que casi trota, creo que morirá de una arritmia pronto

-Señor Allen, ¿Donde está mi informe? -dice con su voz casi chillona

-disculpe, solo tengo que ir a...

-no quiero excusas está vez, con usted siempre es lo mismo, está ¡¡Despedido!! -dice el con gran satisfacción

Siempre supe que llegaría este día en el que me despidieran como un perro, pero como decía mi abuelo: no hay mal que por bien no venga, tal vez consiga uno mejor, para mí es fácil conseguir trabajos, ya estoy acostumbrado.

Mientras tanto me quedaré unas semanas en casa a disfrutar de la hermosa soledad que nunca me falla, creo que hay alguien en la puerta.

-Hola señor despedido, he traído pizza -dice Vanessa con preocupación

Vanessa toda su vida preocupándose por mi, ella sabe que no necesito consuelo porque soy de seguir adelante, no de sentarme a lloriquear por cualquier disparate.

Cenamos, vimos una película todo bien, hasta se quedó a dormir aquí, Vanessa siempre fue una buena amiga y aprecio mucho eso, no creí que haya una persona en esta ciudad mejor corazón que ella, a veces creo que es un ángel en un cuerpo humano.

Ya han pasado días de mi despido, se siente bien estar todo el día en casa con mi mi felino amigo Metatron, ese gato blanco siempre metiéndose en líos en la calle y vuelve a casa como si nada, parece un personaje sacado de una de esas comedias baratas, ser un gato sería lo ideal para mi, comer cuando quiero, dormir todo el tiempo y no necesito la compañía de nadie para sentirme bien, solo mi comida y mi sueño, todo sería perfecto, pero soy un simple humano.

Llegó la correspondencia, lo mismo y lo mismo, factura de electricidad, factura de agua, factura del seguro, espera... ¿Que es esto?, es una carta muy rara, no tiene nombre y solo son garabatos lo que le pude entender son pocas cosas, pero definitivamente va hacia mi.

Dice: Daniel por favor ven... la oscuridad nos ha alcanzado, se han llevado a mi pequeño, ya no es lo mismo en el nido...

No sé qué pensar, si creer que es una broma, pero en el fondo me quedaré con esa duda, porque si quiera Vanessa sabe tanto de mi vida en la granja, Daniel solo me decía mi abuela y nido le decía mi abuela a la granja, nadie sabe eso aquí en la ciudad más que yo, necesito tiempo para pensar.

Ya han pasado días desde la llegada de esa carta y no he dejado de pensar en ella, esa carta ha despertado un gran curiosidad en mi, dicen que la curiosidad mató al gato, pero el gato no murió con dudas, creo que soy ese gato que morirá con dudas.

He hablado con Vanessa, ella dice que este tipo de cosas pasan todo el tiempo, dice que hay cartas que llegan equivocadas y tienen coincidencia con nuestro pasado, una vez le llegó una carta diciendo que la iban a matar por un dinero que les debía su padre, es verdad que su padre le debía dinero a mucha gente, pero su padre había muerto hace años, tal vez Vanessa tenga razón, pero hay algo dentro de mi que no deja de acelerar mi corazón y activar mi cerebro, aun sigo pensando que se hizo de la granja después de la muerte de mis abuelos, después que me fui, no sé si las cosas han cambiando ni cuánto han cambiado, no puedo dejar de pensar en ello.

En las últimas noches no he podido dormir y lo poco que duermo en el día solo sueño con la granja, me he quedado dormido en el banco de un parque como por 15 minutos y he soñado con mi abuelo, estaba corriendo, no sé de qué corría, parecía asustado y luego apareció la carta de nuevo, no puedo dejar de pensar en ello, es involuntariamente, no sé qué pasa conmigo, pero esto me está volviendo loco.

Mi pasado me está llamando, el pasado de donde siempre corrí, soy hombre de campo, no soy citadino, creo que esto solo fue para escapar de mi destino, mi destino está en la granja.

Pero ¿de que destino hablo?, allá solo hay una sucia granja con animales, ¿qué destino puede ser ese?, no hay nada más que eso, creo que pienso las cosas demasiado, a lo mejor es que la prima Olivia quiere que vaya a pasearme por la granja, creo que pienso demasiado las cosas, creo que es mejor sólo ir a visitar una semana y volver a la ciudad, después de estas cortas vacaciones me pondré a buscar trabajo.

Es hora de ir a la granja...