Esto es lo malo de Bakugou.

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Los días de campamento se estaban acercando en la UA y todos se morían de emoción porque llegase el momento de viajar y des estresarse masivamente. Aquel plan parecía ser muy interesante debido a que prometía tener entrenamientos arduos y pruebas difíciles, cosa que le llamaba la atención de sobre manera a la mayoría de los estudiantes. Además, era una buena idea para convivir más entre compañeros.

Y Eraserhead suspiraba cansinamente, ideando posiblemente un plan para poder controlar aquella situación, estaba a cargo de un puñado de estudiantes que gozaban disputar todo el tiempo, el claro ejemplo lo ponía Katsuki y necesitaba relajarse antes de viajar y cuidar de la integridad de sus alumnos, lo cual era demasiado frustrante si se ponía a pensar en ello.

— ¿Te preocupa que llegue a suceder algo peligroso en el viaje? —Midnight se acercó para tener una pequeña charla con el enigmático profesor, éste solo le devolvió una mirada dubitativa—. No es necesario preocuparse demasiado por ellos, todo estará bien.

— No lo sé, quisiera poder decir lo mismo —respondió agotado, observando el modo de entrenamiento de sus alumnos—. Sé que son fuertes pero cualquier cosa puede suceder.

Y mientras ambos adultos discutían cómo sería la seguridad de sus alumnos, los estudiantes de la UA se encontraban entrenando como de costumbre, muy entretenidos en lo que hacían. Ochako intentaba perfeccionar algunas de sus habilidades al mismo tiempo que ayudaba a Deku, el peli verde se preocupaba demasiado por ella y a veces le preguntaba si se encontraba bien a lo que la aludida respondía amablemente ante todas las interrogantes de su amigo

— ¿Estás emocionado Deku-kun?

— ¿Por el viaje? —ella asintió y él se animo a responder con gracia—. Podría decirse que mucho, bueno, quiero seguir fortaleciéndome de alguna manera.

— Espero podamos enfrentarnos y saber quién está por encima de quién —Iida también se notaba emocionado y no sólo eso, quería pelear contra Deku, al menos todos querían.

Ochako pudo percatarse de que al menos todos deseaban enfrentarse contra su amigo y aquello era una muy buena señal del gran fortalecimiento que él poseía y que desarrollaba al paso del tiempo, estaba muy orgullosa del joven Midoriya.

— ¿Con quien te gustaría enfrentarte a ti Ochako-chan? —Deku preguntó instantáneamente.

— No lo sé —respondió encogiéndose de hombros, le daba igual con quien, quería demostrar que ella también se fortalecía día con día—. Solo espero que sea un buen rival.

— Espero y la suerte no te obligue a volver a enfrentarte a Bakugou nuevamente —comentó Iida haciendo una expresión que denotaba preocupación y cierto horror, no quería que lastimaran a la castaña por nada del mundo—. Ese tipo no medirá su fuerza y puede propasarse contigo.

— Si es así, está vez será diferente —respondió la castaña, luchando internamente por no dirigir su mirada hacía donde se encontraba Katsuki—. Volveré a demostrarle lo que valgo y poder derrotarlo ahora.

[...]

Al terminar el entrenamiento, ella se quedó hasta el final, continuando con el entrenamiento exhaustivo que ejercía, en verdad quería volverse mucho más fuerte y no podía quedarse atrás de nadie, el gran ejemplo que seguía era el de Deku y el de Bakugou, ellos dos eran increíblemente fuertes y la motivaban a seguir adelante, aunque cada uno tenía lo suyo.

Cayó varias veces, se lastimó el cuerpo tanto como su descuido lo permitía, pero sabía que debía ser persistente, lo demostraría en las futuras batallas de entrenamiento y no sólo ahí, derrotaría a los villanos que se interpusieran en su camino, tampoco quería ser alguien más del montón, no, eso jamás.

My bitchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora