Park Jinyoung es un joven de 17 años en su último año de instituto, es callado, inteligente pero se divierte como cualquier muchacho de su edad, en realidad, el año pasado había ingresado a un grupo de juego muy extraño.
Él saldría todos los días por la tarde, llegando hasta tarde y los fines de semana pasándolos fuera, nunca fue cuestionado por sus padres al ser un hijo modelo. El ejemplo a seguir que merece todo lo bueno en el mundo, o así lo veían sus progenitores.
Ha formado parte de un club de tenis, de hecho, fue este quien le llevo hasta aquel extraño grupo de personas. ¿Pero quienes eran estas personas? Jóvenes de 17 años en su mayoría, que al igual que Jinyoung pertenecen al club deportivo y más aparte, asisten al instituto. Aunque en diferentes instituciones.
Jinyoung no suele prestarle atención a ninguno de los otros diez miembros del grupo, él sólo tiene ojos para ver al nefasto líder, aquel apuesto pero molesto joven pelinegro de último año de instituto. Aquel que desde el primer momento en que se vieron, brotaron chispas y surgió una gran rivalidad.
Ellos no sé toleran, siempre están discutiendo y sin embargo, suelen dejar sus diferencias de lado para los momentos de juego.
¿Han escuchado hablar de los juegos adolescentes? Aquellos en los que los jóvenes experimentan sus primeras experiencias sexuales. ¿No? Bueno, Jinyoung lo ha hecho y justamente juega uno de estos juegos con su grupo.
Ellos se reúnen todas las tardes y fines de semana en la casa del líder para jugar, explorando sus inexpertos y jóvenes cuerpos. La casa de este siempre estaba disponible al los padres del muchacho siempre se encontrasen trabajando en el extranjero.
¿Cómo fue que dio con ellos? No lo hizo, ellos dieron con él. Fue un joven mayor de origen americano quien le invito a formar parte del grupo, ir e investigar que pasaba ahí sin ninguna idea previa de que sucedía en aquel lugar. Ingenuo y curioso, él accedió a probar.
Después de la primera vez, no pudo detenerse. Su libido había sido encendida, ahora tenía más necesidades que antes y no estaba dispuesto a desperdiciar la oportunidad de satisfacerlas.
Ahora, mientras ellos ven una película en la sala de estar del líder, quien también es la estrella del club de tenis de nombre Im Jaebum, escucharon a este informar. "No podrán quedarse este fin de semana, tengo cosas que hacer" había dicho, pero Jinyoung necesitaba quedarse, estaba caliente y sus padres creían que se quedaría en la casa de un amigo, por lo cual, no podía volver. No por este fin de semana, por lo menos.
—Juguemos ahora entonces— propuso Jackson, deslizándose de su lugar en el sillón para ir a sentarse al piso. Y como sí el joven chino les diera ordenes, todos fueron a seguirle. Despejaron el lugar, acomodando los muebles de una manera en que obtuvieran espacio suficiente para jugar.
Formaron un círculo, todos sabían que hacer y como jugar, sin embargo, se encontraban con ganas de iniciar las cosas un poco altas, después de todo, no se verían durante el fin de semana para repetir.
Jugaran 7 Minutes in Heaven
Uno, dos... Gira y gira sin parar.
Han acordado comenzar en el nivel dos ¿Qué caso tiene esperar? Ninguno, más vale aprovechar el tiempo y disfrutar lo más que puedan mientras estén juntos. Uno nunca sabe.
Así que ahí estaban ellos, con los ojos fijos en el artefacto de fino cristal que giraba al centro de la sala sobre el alfombrado. Ansiosos por tomar el primer turno de esta noche.
La botella les vacila y juega con ellos, trastabilla y simula detenerse. Les hace aguantar la respiración y morderse el labio con anticipación.
Uno y dos, la botella se detiene.
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Little peach
FanfictionEntonces ahí estaban ellos, en el medio del círculo con el cabello alborotado y los labios ligeramente rojos e hinchados, agitados se miraban fijamente sin vacilar. Jinyoung dio un paso hacia el frente y empujo al otro tirándole de bruces, fue ahí q...