Mi ogro favorito

Parte 1 "El encuentro"

Los minions, pequeños seres amarillos con binoculares en sus ojos, estaban buscando a un nuevo amo, alguien fuerte y malo al cual le pudieran servir. Se toparon con muchos villanos que entraban en el rango que buscaban, pero por conflictos siempre terminaban solos y abandonados. Tras esto su comunidad quedó triste y no veían sentido en sus vidas. Un día un minion valiente se aventuró a continuar por sí mismo. Al partir se le unieron algunos compañeros. Mientras buscaban a alguien más sin perder la fe, continuaban durante el día y de noche dormían en donde podían, bajo árboles, en cuevas, entre otros. 

Uno de estos árboles que usaban estaba cerca de un gran pantano, a ellos les interesó demasiado y fueron a investigar cuando amaneció. Allí descubrieron que el bosque estaba lleno de criaturas mágicas. Ellos trataban de ver como líder a cualquier criatura que se les cruzaba, hadas, lobos, ratones, estaban desesperados y buscaban a alguien que llevar con sus compañeros para recobrar la alegría. Cuando intentaron servir a las hadas ellas se negaron por miedo y salieron huyendo, los lobos intentaron atacarlos, por lo que los Minions correspondieron esta actitud probando su maldad, también salieron corriendo. Por último los ratones perdieron el interés de los seres amarillos al no tener tanta maldad.

Cruzaron el pantano buscando una sombra para descansar, estaban decepcionados. Al cruzar observaron una choza mezclada con los árboles, les interesó que ahí pudieran tener otra oportunidad de villano. Los minions entraron a la choza lentamente por si había alguien malvado ahí, y empezaron a ver las cosas que había. Se dirigieron decepcionados hacia la salida, pues lo único que había era un desorden increíble pero ninguna señal de habitante. Justo antes de salir de la casa, escucharon un ruido de alguien grande que se se acercaba a la choza, sonaban pisadas inmensas, incluso los minions se asustaron un poco, pero estaban emocionados por ver entrar por aquella puerta a alguna criatura feroz.

La puerta se abrió, con ella la silueta de una criatura grande se hizo visible, estaban cerca de correr por la emoción y el susto juntos. De la puerta salió Shrek, un ogro feo verde, muy grande en comparación a los minions. El ogro los observó y después de una expresión de enojo, gritó ferozmente a lo minions. "¿¡Qué hacen en mi casa!?"