Puella Magi Vero Mágica

Una realidad no tan "mágica"

Era un día como cualquier otro, salir del instituto, hacer algo de vigilancia en busca de brujas, transformarse y luchar al lado de esas niñas. Nada fuera ya de lo extraordinario. 

Mi nombre es Verónica, y en esta realidad, soy una Mahou Shojo, o "chica mágica", cuya una de sus capacidades es poder romper la cuarta pared, y si, me veo en esta realidad, y es bastante triste la verdad... De hecho, me sorprende el aún no haberme convertido en una bruja... aunque supongo que es parte sobrevivo gracias a mi capacidad de comunicarme con mi autora y pedir que aún me mantenga viva, pese a que varias veces, ambas estuvimos a punto de romper en llanto y perder la esperanza.

Bueno, regresando a esta realidad, soy una estudiante de instituto que ya pasó los 18 años, por ende, mi caducidad de chica mágica está próxima, y eso es algo que temo enfrentar... Aunque claro, no por ahora, porque por tantas veces que Homura regresa el tiempo para salvar a la tonta de Madoka, siento que de algún modo me salva esta especie de limbo eterno... Hasta ahora, en ninguna realidad me he convertido en bruja, pero si que he muerto en un par de ocasiones, soy consciente de ello, y de ello también aprendí que nadie más puede saberlo pues, así como "nadie cree en el futuro", menos lo hacen cuando les dices "hey! esta realidad no existe y nosotras sólo somos títeres que vuelven una y otra vez"... algunas veces, al darse cuenta solas, caen en la locura, así que llegue a la conclusión que es mejor mientras no se enteren mucho y solo utilice la información para ayudar o desahogar un poco mis penas.

En fin, mientras hablaba con ustedes en mi mente, pudimos deshacernos de una bruja, "Albertine", gracias a la ayuda de la pequeña Nagisa (lamento que más adelante y en otras líneas temporales, debas convertirte en "Charlotte"), a veces siento curiosidad y me gustaría saber qué clase de bruja sería yo... pero como en este mundo, el éxito es lo último que tiene asegurado, solo vale intentar sobrevivir, o al menos, morir con dignidad.

Es bueno tener con quien hablar... las otras chicas suelen verme como alguien muy distraída, pero claro, cómo no serlo siendo consciente de tantas realidades, a veces me hace reconsiderar mi deseo y pensar nuevamente en mi origen...